La sala fue desbordada una y otra vez por quienes concurrieron, por lo que en dos oportunidades hubo que cambiar el salón.
El acto comenzó con la proyección de un video en el que se relataron hechos fundamentales de su vida y su lucha, siendo conmovedor poder ver a María leyendo el discurso de apertura del Segundo Encuentro nacional de mujeres realizado en Buenos Aires.
La sala fue desbordada una y otra vez por quienes concurrieron, por lo que en dos oportunidades hubo que cambiar el salón.
El acto comenzó con la proyección de un video en el que se relataron hechos fundamentales de su vida y su lucha, siendo conmovedor poder ver a María leyendo el discurso de apertura del Segundo Encuentro nacional de mujeres realizado en Buenos Aires.
Luego se leyó una carta de Romina Tejerina (al final de la nota), expresando en sus sentidas palabras lo que significó para ella su lucha, su acompañamiento, conmoviendo hasta las lágrimas a todas las presentes.
La lectura de las palabras de sus hijos, Pedro y Andrés, ahondó más aún en la emoción sin límite, haciendo de este homenaje un momento entrañable.
Ana Quiroga y María José Lubertino también estuvieron presentes con el recuerdo de María, al igual que Clelia Iscaro, las tres a través de sus cartas.
Las palabras que siguieron de Bety Sánchez, de Pampa del Indio (presidenta de la Unión Campesina del Chaco) dieron cuenta de esa esencia de María arraigada junto a las más oprimidas, quien la ganó para la lucha hace más de una década, a quien “amamos”, y está siempre con “nosotras”.
Elsa Colqui, presidenta de la Casa de la Mujer que lleva su nombre desde el año 2007, contó cómo María le permitió comprender el sufrimiento de Romina Tejerina, y como ella se vinculaba con las compañeras más oprimidas, ayudando a visibilizar esa opresión de género que es la doble opresión que sufrimos las mujeres.
Gladys Roldán de La Matanza relató cómo María la ayudó a salir a la calle a luchar, a pesar de los miedos, y como la empujaba a hablar “desde el corazón”.
Luego hablaron Nina Brugo, abogada e integrante de la Campaña por el Derecho al Aborto, y militante de UP, recordando la lucha compartida en la comisión organizadora del Segundo Encuentro realizado en Buenos Aires, y Julia Rosales, quien se refirió a su recuerdo sobre la adherencia de María al comunismo, y su punto de partida, al igual que el suyo propio, luego de sufrir el intento de homicidio en el marco de una situación que pretenden enrarecer por la desaparición de Santiago Maldonado.
El homenaje finalizó con la clara idea de que todas las presentes podíamos contar algo de María y su influencia en cada una de nosotras, lo que sería sin dudas un homenaje infinito. Y ese momento entrañable, que ha hecho de este 32 Encuentro uno de los más conmovedores, terminó en un sinfín de abrazos por el momento compartido.
Carta de Romina Tejerina
A diez años del fallecimiento de María Conti, hoy quiero estar presente para homenajearte como la Gran Luchadora y Defensora de todos nosotras que siempre fuiste y en mi nombre (Romina Tejerina) y de toda mi familia, quiero expresar mi absoluto agradecimiento por la comprensión, acompañamiento y lucha en todos los terrenos posibles, durante la tragedia que me tocó vivir en Jujuy y por la búsqueda incesante de mi libertad y la de todas las Rominas Tejerinas de nuestro país; que son víctimas de un sistema patriarcal, en el que el Estado condena a quienes no recibieron educación sexual, penaliza a quienes son obligadas al aborto clandestino y no investiga a los violadores.
Hoy quiero decirte María que fuiste la hacedora del movimiento nacional que fortaleció la lucha no solo en Jujuy, sino en todo el país y me diste la fortaleza para que resistiera en la cárcel y ya cumplidos los 14 años de condena por una justicia machista, puedo gritar a los cuatro vientos que pude resistir gracias al sostenimiento impulsado por ti, como así también por el conjunto de mujeres que se hicieron eco de mi causa y nunca me dejaron sola.
En este momento en que estoy escribiendo, innumerables recuerdos pasan por mi mente ¡Cómo me hubiera gustado que hayas estado presente el día en que recobré la libertad o en este nuevo camino que estoy recorriendo a escasos meses de ser Mamá!
¡Pero sé muy bien que aquella mañana en que fui liberada me abrazaste con esa ternura que te hacía tan especial y estoy segura que desde el lugar en donde estés, seguramente estarás feliz por esta última noticia!
¡GRACIAS MARIA! ¡SIEMPRE ESTARAS EN MI CORAZON Y EN MI MEMORIA! ¡HASTA LA VICTORIA SIEMPRE, MARIA!
¡Y SIEMPRE PRESENTE ENTRE NOSOTRAS!
Romina Tejerina
