Comenzaron las audiencias hoy en Oberá, Misiones, y se prolongarán hasta el jueves cuando se conocería la sentencia. La justicia apunta a incriminar a la joven y pierde de vista el calvario en el que vivía producto del cual ella perdió a su hija, asesinada por su ex pareja.
Comenzaron las audiencias hoy en Oberá, Misiones, y se prolongarán hasta el jueves cuando se conocería la sentencia. La justicia apunta a incriminar a la joven y pierde de vista el calvario en el que vivía producto del cual ella perdió a su hija, asesinada por su ex pareja.
La abogada de la joven, Roxana Rivas, explica que no hay modo de sostener la hipótesis de que la madre de la niña era violenta y terminó asesinando a su propia hija, por lo que entiende que no hay elementos para seguir culpándola. Pide su absolución y remarca no solo la falta de pruebas para sustentar esta postura, sino que además el relato de Victoria es coherente con su conducta y que ella hizo lo posible en el contexto en el que vivía para pedir ayuda y asistir a su hija.
Según relata Victoria Aguirre, su ex pareja Emilio Lovera, provocó la muerte de Selene. El hombre con quien ellas vivían comenzó a tener actitudes violentas hacia ambas. La situación se fue agravando hasta que días antes del asesinato Lovera armó una pantalla para aislar a Victoria de su familia, disfrazó un secuestro de paseo familiar. Publicaba en las redes sociales fotos comentando que estaban viajando, yendo a pasar algunos días fuera de casa para disfrutar en familia y confirmaba el amor que les tenía a ambas. Lo que no se imaginaba el entorno de la joven es que ese sería el comienzo del fin. El hombre las secuestró, las mantuvo cautivas en su propia casa. Las sometió a torturas físicas y psicológicas, violó reiteradas veces a Victoria y la golpeó hasta dejarla inconsciente en múltiples ocasiones.
Antes de llegar al trágico final, Victoria logró convencer a Emilio de llevar a la niña a un hospital ya que no estaba bien. Frente a una médica el hombre continuó con sus amenazas no solo verbales sino con armas blancas, y la madre por miedo a que le hiciera mayor daño a la nena se la llevó de allí. La profesional solo hizo una exposición ante la justicia y no una denuncia. Esa fue la única oportunidad de dar aviso a alguien fuera de la casa que tuvo la joven. Al día siguiente, el 28 de enero del 2015, la violencia llegó a su punto más alto terminando con la vida de Selene y quedando incriminada su madre.
Actualmente Victoria está en prisión y enfrenta una pena de hasta 35 años por “homicidio calificado, agravado por el vínculo”; mientras el agresor Lovera, afronta una pena por “homicidio simple” con una posible condena de 7 años, cuando la carátula de su causa debería de ser “femicidio vinculado”, de ser así la justicia estaría comprendiendo que Selene era agredida para causar dolor a su madre. Pero la realidad es que todos los cañones apuntan a Victoria sin comprender la situación que vivió y la imposibilidad de proteger a su hija a la que se debió enfrentar.
Denunciamos la violencia institucional del Estado por la resistencia a la incorporación de la perspectiva de género en la justicia, la criminalización a las mujeres pobres. Y reclamamos: absolución e inmediata Libertad a Victoria Aguirre, justicia para Selene, perpetua para Lovera, Declaración de Emergencia en Violencia contra las Mujeres, para que se habilite presupuesto para la prevención, asistencia y erradicación de la violencia contra las mujeres.