Estos concejos –instituciones tan características de la revolución rusa– se originaron en 1905, cuando durante la primera huelga general de los obreros, las fábricas y organizaciones sindicales de Petrogrado enviaron delegados a un Comité Central. Este Comité de Huelga fue llamado Concejo de diputados obreros. Convocó a la segunda huelga general en el otoño de 1905, envió organizadores por toda Rusia y por un breve tiempo fue reconocido por el gobierno imperial como el vocero autorizado de la clase obrera revolucionaria rusa.
Con el fracaso de la revolución de 1905, los miembros del Concejo huyeron o fueron deportados a Siberia. Pero este tipo de unión fue tan sorprendentemente efectivo como órgano político que todos los partidos revolucionarios incluyeron un Concejo de diputados obreros en sus planes para el siguiente levantamiento.
Los soviets. Cuadernos hoy Nº 88.
