Hay 11.300.000 argentinos viviendo en la pobreza, 4.000.000 que pasan hambre, 165.000 niños desnutridos reconocidos, de menos de cinco años. De cada 10 trabajadores 4 están "en negro", sin beneficios sociales. La mayoría de los salarios no cubren la canasta familiar. Los chacareros pobres y medios son castigados con impuestos confiscatorios. La salud y la educación pública están en crisis. La juventud es empujada a la prostitución, la droga y el delito. La industria nacional es aplastada por las importaciones chinas y brasileñas. La Nación está a punto de perder una extensión de 3.000.000 de kilómetros cuadrados, en el Atlántico Sur y la Antártida, con enormes riquezas.
Durante 5 años el kirchnerismo gobernó el país con su doble discurso. Tuvo "el viento a favor" por los buenos precios de las exportaciones argentinas, pero no lo aprovechó para sacar al país de la brutal crisis social: pagó la deuda externa, subsidió a monopolios y terratenientes "amigos", realizó grandes negociados, y "borocotizó" dirigentes políticos y sociales.
Grandes luchas obreras y populares y la reciente rebelión agraria le "abrieron la mano" al gobierno, que quedó duramente golpeado. Estalló la crisis política. El "modelo K" se desfondó, empujando al país hacia una nueva crisis económica, en medio del estallido de la crisis económica mundial que las potencias imperialistas buscan descargar sobre nuestros países.
El gobierno no cambió. Le ofrece pagar al contado a los usureros del Club de París una deuda que viene de la dictadura, restando esa plata a la grave situación nacional. Y presentó un proyecto de Ley de Presupuesto que agravará la situación y cargará sobre el pueblo la crisis económica que ya asoma.
Hay fuerzas opositoras al kirchnerismo que lo enfrentan con "recetas" que también llevan a "ajustes", con tarifazos y devaluaciones, que cargarán la crisis sobre las espaldas del pueblo.
Hay un camino para salir de la emergencia social y la inflación, y que paguen la crisis los que se llenaron los bolsillos. Para un gran debate nacional en las fábricas, el campo, las aulas y los barrios, con la movilización y el estado asambleario que hizo fuerte a la rebelión agraria, el PCR propone diez puntos que hemos recogido de las luchas obreras y populares, patrióticas y democráticas.
Unir fuerzas en un paro nacional activo, obrero, campesino y popular, para torcerle el brazo al gobierno y resolver las necesidades inmediatas del pueblo:
• Precios máximos y supresión del IVA a los productos de la canasta alimentaria básica. Garrafa social de 10 kilos a $ 10. Aplicar la Ley de Abastecimiento contra la especulación. Congelación de alquileres y prohibición de toda indexación. Tarifas populares para los servicios públicos.
• Salario mínimo de acuerdo a la canasta familiar hoy de $ 3.600 y reapertura de las paritarias. Derogación de las leyes de flexibilización laboral, de Trabajo Agrario y las reformas a la de Accidentes de Trabajo. Eliminación del impuesto a las ganancias a los trabajadores. Blanqueo del trabajo en negro. Incorporación al convenio principal de los tercerizados. Efectivización de los precarizados y contratados. Expropiación con entrega a las cooperativas de las fábricas recuperadas, y subsidios para su producción.
• 82% móvil para los jubilados y del 75% para los pensionados, de acuerdo a la canasta familiar. Jubilación para las amas de casa a los 55 años y a los mayores de 60 años sin recursos.
• Planes sociales de acuerdo a la canasta básica hoy de $ 540, para todos los desocupados.
• Igual salario a las mujeres por igual trabajo. Jardines maternales y guarderías en los lugares de trabajo y barrios. Ley de emergencia sobre violencia sexual. Anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir.
• Trabajo, educación y deporte para la juventud. Aumento del presupuesto para prevención y tratamiento de adicciones, con centros de atención en los barrios, inserción escolar y capacitación laboral.
• Retenciones segmentadas y coparticipables. Tierra y créditos para los pequeños y medianos productores del campo y sus hijos. Ley de arrendamientos que limite a los pooles y terratenientes y garantice el acceso a la tierra a los campesinos pequeños y medianos y sus hijos.
• Tierras, títulos de las tierras, trabajo, educación bilingüe, viviendas, planes sociales y proyectos productivos para los pueblos originarios.
• Inmediato aumento de la coparticipación federal.
• Garantizar todos los elementos, el personal y los salarios necesarios para el funcionamiento de los hospitales públicos y las salas de atención primaria. Agua potable y cloacas para el pueblo.
• Garantizar salarios, infraestructura, becas, comedores, etc., en todos los niveles de la educación.
• Anulación inmediata de todas las concesiones mineras contaminantes (Cerro Vanguardia, Veladero-Pascua Lama, Bajo de la Alumbrera, etc.).
• Aparición con vida de Julio López e inmediata amnistía a todos los luchadores presos y procesados.
Diez puntos para una Argentina popular, patriótica y democrática
1. Parar la inflación
• Garantizar el valor del peso con un estricto control de cambios, la nacionalización del comercio exterior y de los bancos extranjeros y el manejo de las divisas y del crédito.
• Reforma impositiva para que paguen más quienes ganan y tienen más.
2. Trabajo para todos
• Jornada laboral de 6 horas sin reducción salarial en las grandes empresas monopólicas y supermercados.
• Inmediata puesta en marcha de un plan nacional de construcción de un millón de viviendas populares, atendiendo a las necesidades regionales y priorizando los asentamientos y barrios de emergencia, obreros rurales, comunidades originarias y campesinos pobres.
• Reapertura con control obrero de todas las fábricas cerradas o en convocatoria de acreedores, con inmediata ayuda estatal.
• Plan de colonización de un millón de chacras y comunidades originarias.
3. Derechos sociales
• Plena vigencia de la Ley de Contrato de Trabajo.
• Reestatizar el sistema jubilatorio con control de los jubilados y pensionados. Restablecer el 100 por ciento de los aportes patronales. Defensa del PAMI, con la dirección de los jubilados y pensionados.
4. Salud, educación y medioambiente
• Saneamiento de ríos y arroyos contaminados, con la participación de los ribereños afectados. No a los monopolios contaminantes.
• Duplicación del presupuestario nacional y provinciales de salud.
• Duplicación de los presupuesto de educación, nacional y provinciales, y triplicar el presupuesto para las universidades y la investigación científica y tecnológica.
• Anulación de la Ley de educación Superior, y las de Financiamiento y Enseñanza Técnica.
• Eliminación de todos los acuerdos que subordinan la educación nacional a centros imperialistas.
5. La tierra para los que la trabajan o quieren trabajarla
• Nacionalización de las tierras extranjerizadas.
• Reforma agraria integral y profunda, expropiando los grandes latifundios.
• Cese de todas las ejecuciones y desalojos de los campesinos pobres y medios, y precio mínimo sostén en origen para sus producciones.
6. Pueblos y naciones originarias
• Restitución de tierras en calidad y cantidad. Plena vigencia de todos los derechos de los pueblos originarios. Reconocimiento del derecho a la autodeterminación.
7. Defensa de la industria nacional
• Penalizar toda importación de bienes que se produzcan o con historial de haberse producido en el país. Arancel cero para insumos críticos que no se fabriquen aquí.
8. Restablecer el federalismo
• Anulación de los pactos fiscales, restituyendo a las provincias los importes que se les quitó.
• Política de estímulo a las economías regionales.
9. Democracia amplia y profunda
• Nulidad de los indultos a los genocidas. Juicio y castigo a todos los responsables de crímenes contra el pueblo y a todos los responsables de masacres como las de la AMIA, los mineros de Río Turbio y el boliche Cromañón.
• Ley de medios de comunicación que garantice una amplia libertad a las organizaciones populares, prohíba su control por capitales extranjeros y su monopolización.
• No a cualquier golpe de Estado, abierto o "institucional", con los que las clases dominantes imponen recambios contra el pueblo.
• Amplia democracia para las organizaciones populares que garantice la soberanía del pueblo. Elegibilidad y revocabilidad de todos los funcionarios públicos, fijándoles un sueldo equivalente al salario medio de un obrero calificado.
10. Deuda externa y soberanía nacional
• No pago al Club de París. Rechazo a todo pago de la deuda externa ilegítima, usuraria y fraudulenta; investigación y castigo de los responsables.
• No al ALCA y cualquier otro pacto que atente contra la producción y la soberanía nacional.
• Reestatización de YPF y demás empresas públicas privatizadas, con control de los trabajadores, castigando a quienes las entregaron y vaciaron. Anulación de todo convenio o ley entreguista. Nacionalización integral de todos los recursos naturales y energéticos (petróleo, gas, minería, pesca). Suspensión de la exportación de petróleo, gas y todo otro recurso no renovable.
• Política de recuperación del territorio nacional en el Atlántico Sur y la Antártida colonizado por Inglaterra, enfrentando sus pretensiones ampliar esa usurpación. Reconocimiento histórico de la guerra nacional de Malvinas, y sus veteranos, rompiendo los pactos con el imperialismo inglés.
• Ruptura de la "alianza extra OTAN" con Estados Unidos. Fuera las bases de inteligencia yanquis y de otros países imperialistas. Solidaridad con el pueblo y el gobierno boliviano. Unidad latinoamericana. Ni un soldado argentino a las agresiones imperialistas en Haití o a cualquier otro país. Solidaridad con Cuba, Venezuela, Bolivia y Ecuador; con la heroica resistencia de Irak, Palestina, Afganistán y Chechenia, y todas las naciones que luchan por su liberación.
El camino del Argentinazo y la rebelión agraria
Unidad de las fuerzas obreras y populares, patrióticas y democráticas, recogiendo las enseñanzas del Argentinazo y de la rebelión agraria, que mostraron el camino para conquistar los reclamos e imponer los derechos y necesidades del pueblo y de la patria: la más amplia movilización en las calles y las rutas, un estado asambleario, y la unidad en multisectoriales y otras formas de coordinación popular.
Sobre la base de esa unidad es posible garantizar un paro nacional activo, obrero, campesino, estudiantil y popular, para torcerle el brazo a la política kirchnerista. Sólo profundizando el camino del Argentinazo de 2001 y la rebelión agraria y popular de 2008, recogiendo las experiencias de la Revolución de 1810, de las insurrecciones radicales y el 17 de octubre de 1945, se puede imponer un gobierno de unidad popular, patriótica y democrática, basado en las multisectoriales, asambleas populares, cabildos abiertos, cuerpos de delegados, y otras formas de democracia directa, que garantice la aplicación inmediata de las 10 medidas que proponemos, y convoque a una Asamblea Constituyente Soberana que abra el camino hacia una revolución de liberación nacional y social que barra con el Estado oligárquico-imperialista.
¡Basta de verso kirchnerista! Unidad popular, patriótica y democrática para que la crisis la paguen los que se enriquecieron a costa del hambre del pueblo, y conquistar una Argentina con pan, trabajo, tierra, educación, salud, libertad e independencia nacional.
Partido Comunista Revolucionario
PCR