Este 8 de marzo de 2018 quedará en la memoria de la lucha de los pueblos de todo el mundo. Hubo movilizaciones de mujeres en más de 170 países, y el paro internacional tuvo efectividad en 50 países.
La jornada tuvo repercusión en los cinco continentes, y en cada marcha se hicieron oír las mujeres con sus reclamos de mayores derechos, igualdad laboral, social y política, y las protestas contra la violencia, los femicidios, el acoso, la discriminación y por el derecho a un aborto legal, seguro y gratuito.
Nuestro país tuvo una presencia destacada en los informes de los principales noticieros del mundo, por la masividad y la profundidad del reclamo, e incluso en algunos se reflejaba el carácter pionero de las demandas del movimiento de mujeres de la Argentina. Eso se evidenció en Roma, donde muchas portaban carteles con la consigna “Non una di meno”.
Hubo marchas inmensas, en algunos países de manera legal, como en Europa y la mayoría de América, y en muchos lugares desafiando a la represión como el caso de la multitudinaria presencia de mujeres en las calles de Estambul, Turquía. Poco ha trascendido de lo ocurrido en China, salvo la protesta de estudiantes de la Universidad de Tsinghua de Beijing.
Impactante fue la huelga de mujeres en España, que se estima que fue acatada por entre 5 y 6 millones de personas. En varias ciudades de la península ibérica se vieron gigantescas manifestaciones. En muchas de ellas, se cantaba una versión de una conocida canción de la época de la Guerra Civil, que en su estribillo dice “A la huelga diez, a la huelga cien, a la huelga madre ven tú también/ A la huelga cien, a la huelga mil, yo por ellas madre y ellas por mí”.
En India, Pakistán y Filipinas el fin de los femicidios y abusos sexuales fueron el principal reclamo. En el Kurdistán sirio, donde las mujeres están en la primera fila de la lucha por la liberación y por una nueva sociedad ,el Comando General de las Unidades de Protección de la Mujer (YPJ) destacó el rol de las mujeres del mundo en la resistencia contra la explotación y los poderes dominantes: “La mujer, que desempeñó un papel principal en la creación de la sociedad –continúa el comunicado de las YPJ-, fue arrastrada por la mentalidad oscura y dominante para desaparecer de la historia de la humanidad. Pero la verdad nunca puede ser enterrada en la oscuridad. Sin lugar a dudas, la identidad de la mujer libre ha continuado incesantemente: de Clara Zetkin a Rosa Luxemburgo, de las tres hermanas Mirabal a Zarife, Besê y Saras, Gulans y Zilans, de Beritan, Nalin y Servins, a Avesta, Barin y Amargis. El éxito se alcanza con la postura libre y resistente de las mujeres pioneras. Todas las mujeres del mundo que luchan por una vida libre contra toda la oscuridad, las alianzas inhumanas y el silencio de las potencias internacionales y contra las matanzas, deben encontrarse con la imagen de las mujeres el 8 de marzo y defender la resistencia de Afrin para frustrar los ataques colonialistas del Estado turco”.