Este viernes más de dos mil trabajadoras y trabajadores del Astillero Río Santiago se movilizaron desde la puerta de la fábrica hasta la Casa de Gobierno, en la ciudad de La Plata, contra la intervención de gobierno provincial y los despidos y para exigir que las autoridades aseguren el presupuesto necesario para que la empresa estatal pueda desarrollar sus actividades normalmente.
El delegado de soldadura del Astillero e integrante de la Corriente Clasista y Combativa (CCC), Martín Esquerra, aseguró que los trabajadores decidieron seguir con su plan de lucha con “mucha fuerza y gran combatividad” porque “todavía no nació la persona que se va llevar puesto al Astillero”.
De esta manera, los trabajadores comenzaron su movilización a las 9 de la mañana con la ropa de trabajo tradicional y en su caminata hasta La Plata se detuvieron en el Ministerio de Trabajo, ubicado en calle 7 entre 39 y 40. La medida de fuerza fue decidida conjuntamente en una asamblea histórica realizada en la tarde del jueves que duró más de seis horas y que se desarrolló bajo la lluvia.
Una vez en el Ministerio, horas antes del mediodía, los delegados del Astillero fueron recibidos por funcionarios del gobierno. Allí, los trabajadores del Astillero plantearon sus preocupaciones por posibles despidos, recriminaron la prepotencia con la que llegaron las nuevas autoridades que puso el gobierno provincial y pidieron por la apertura de la paritaria. A su vez, exigieron una reunión con el Ministro que quedó pautada para el próximo miércoles.
Los trabajadores del Astillero rechazan la intervención del gobierno provincial de María Eugenia Vidal que el pasado lunes despidió por decreto al presidente Cristian Curto y nombró a Daniel Capdevilla, ex Coordinador de Proyectos del Ministerio de Modernización y que trabajó en Autopistas Urbanas S.A. En este sentido, Esquerra denunció que la nueva presidencia ya ha desplazado a gerentes y no se presentó ante las trabajadoras y los trabajadores.
Esquerra afirmó que la situación que se vive es de “total incertidumbre” pero aseguró que “los trabajadores estamos completamente unidos para afrontar esta situación”. En este sentido, denunció que el gobierno provincial “quiere ahogar económicamente” al Astillero y “hacerle pagar el ajuste a los trabajadores”.
Terminada la reunión en el Ministerio, la columna de trabajadores se movilizó hasta Casa de Gobierno. Con cantos contra Mauricio Macri pero también contra la gobernadora María Eugenia Vidal, se acercaron a Plaza San Martín pasado el mediodía. Una vez allí, y al igual que en el Ministerio de Trabajo, fueron recibidos por funcionarios de tercera línea ante quienes reclamaron una reunión directamente con la gobernadora o alguien que actúe como su vocero porque, como señaló Esquerra, “queremos saber qué planes tienen para el Astillero y necesitamos tener su propio compromiso de que en el Astillero no va a haber ni un solo despedido”. Ante este pedido, desde el gobierno comprometieron la presencia del Jefe de Gabinete, Federico Salvai, en la reunión del próximo miércoles junto al ministro de Trabajo.
“La marcha de este viernes fue contundente e histórica”, resaltó Esquerra una vez finalizada la reunión con los funcionarios y destacó que la misma fue decidida en una multitudinaria asamblea. “Esta empresa fue la única que en la década neoliberal de los 90 no fue privatizada. Si el gobierno piensa que lo va a poder lograr ahora está muy equivocado”, comentó.
“Los trabajadores estamos en estado de alerta porque están en peligro miles de puestos de trabajo y porque la ciudad de Ensenada tiene una relación muy especial con el Astillero”, aseguró Esquerra y completó: “No vamos a dejar pasar otro Fanazul”.
Por otra parte, delegados del Astillero confirmaron que el próximo 17 de mayo realizarán un plenario general con todos los sectores de la comunidad, movimientos sociales, sindicatos y sectores políticos para avanzar en defensa de los puestos de trabajo.
Intervención de Jorge Mario Smith, dirigente histórico del ARS, en la asamblea del 10 de mayo, ante más de 2000 trabajadores que discutieron durante 6 hs seguidas bajo la lluvia el plan de lucha
Quiero llevar tranquilidad a los compañeros y compañeras porque hay mucha preocupación. Cuando llegó la Intervención, recorriendo el Astillero uno notaba en las caras la preocupación que había. Les queremos llevar tranquilidad porque vamos a decir que “todavía no nació el que se va a llevar puesto el Astillero”. Y si nació… nosotros tenemos que estar con una actitud de que vamos a ganar, porque para ganar hay que pensar primero que vamos a ganar. Por eso incorporemos en la camiseta que llevamos adentro que “todavía no nació el que se va a llevar puesto el Astillero”.
Y esto lo digo, porque los que tuvimos el orgullo de pertenecer a la generación de los 90, los momentos son totalmente diferentes, ya estamos viejos, lo que nosotros somos es un punto de referencia, podemos aportar experiencia. Ya lo demostramos en la Plaza del Congreso el 18 de diciembre, los viejos estábamos en la retaguardia en el centro de la Plaza y la nueva juventud del Astillero iba al frente, iba y volvía, y hasta que no se recuperó al último compañero, la conducción gremial y nosotros no nos fuimos, arriesgando la propia vida. Con ese espíritu les decimos que no van a pasar con nosotros. Esta es la actitud que tenemos que tomar.
También les digo que en los 90 no fue solo que teníamos pelotas, teníamos sapiencia y teníamos una línea de conducción que íbamos elaborando entre todos. ¿Cómo se creen que nosotros entramos en el Ministerio de Economía a 10 ms de la oficina de Cavallo? ¿Cómo se creen que entramos en la Bolsa de Comercio? ¿Cómo se creen que entramos en la Sociedad Rural? Porque nosotros elegíamos el camino donde entendíamos que podíamos golpear, no nos íbamos a enfrentar ejército contra ejército, golpeábamos en esos lugares para después salir rajando y refugiándonos en la Catedral. Esa es la sapiencia que teníamos. Y después cuando el momento llegó, el 18 de setiembre de 1992, vinieron los Albatros. Dijeron que estaba ocupado militarmente por los Albatros. Nosotros estábamos festejando en Plaza San Martín en pantalla gigante que le habíamos ganado una pulseada a Cavallo y a las seis de la tarde habían entrado las fuerzas represivas al Astillero. ¿Qué dijimos cuando vino un dirigente y nos dijo “muchachos, se terminó todo, nos ganaron, está ocupado militarmente el Astillero”? ¡Le dijimos en tono cariñoso “cambiá la cara, vos sos dirigente! Mañana vamos a hacer asamblea y el lunes vamos a recuperar los puestos de trabajo”. Con esa decisión tuvimos la epopeya de que fue la única empresa que no nos pudieron privatizar.
¡Por eso decimos que no van a pasar! ¡Compañeras y compañeros, vamos a ganar! ¡No estamos solos!
Para saber con quién estamos, nosotros cuando fuimos mandatados por el Cuerpo de Delegados a entrevistar a la Intervención, no se crean que fue fácil. Veníamos con un mandato de un Cuerpo de Delegados prestigioso, de una calidad de compañeros de todas las agrupaciones, independientes, que había tomado una decisión. Y el interventor Capdevila se quería dar el gusto de recibir a Pancho Banegas solo. Pancho le dijo “solo no, con la Comisión”, “bueno, vení y conversamos”. Al rato llamaron a Pablo Rojas, los que estábamos afuera no teníamos problemas porque tenemos eterna confianza en los compañeros. Pero no podíamos permitir que después de lo que nos habían hecho el lunes desconocieran una resolución de un cuerpo de delegados y una conducción que está prestigiada por su lucha, y le golpeamos la puerta a Capdevila. El Interventor dijo “parece que están apurados” y le contestamos “el apurado fuiste vos el lunes”. Nos recibieron en la mesa oval con medialunas dulces y saladas, con agua y con café. ¡Entramos y dijimos “acá no se come una m…” y no comimos nada! Y el gerente que vino de asuntos jurídicos, Calvente, se las comía todas, y en determinado momento dijo “¿qué pasa que ustedes no comen? Es medio sospechoso”. También pasaron otras cosas, y ahora es momento de que trasciendan porque son difíciles los momentos que estamos atravesando, para saber con quién estamos, porque hubo compañeros –equivocados o no- que tuvieron un goce porque habían despedido a esos gerentes que podemos decir hasta indefendibles, porque ni siquiera se quedaron en sus puestos de trabajo para que los defiendan. Nosotros les planteamos las cuestiones que nos daba la reunión del Cuerpo de Delegados, no a los despidos. A lo que el presidente dijo “bueno, despidos masivos…” La respuesta fue “no, no va a haber despidos, no te vamos a dejar que despidas…” Y para que sepan con la calaña que estamos trabajando, un compañero le planteó “100% estatal”, a lo que el presidente contestó al muy estilo Macri “imagínense, la cobrería, una empresa de Dinamarca; carpintería, una empresa de capital privado; todos juntos sacando el Astillero para adelante”. Nosotros le contestamos “¿dónde te crees que estás?”
Compañeros, lo que pudimos recoger de ahí es que iban a hacer una carta de presentación. Pero era difícil que cumplieran para esta asamblea lo que nosotros pedíamos. Por lo tanto, el camino de esta asamblea histórica se va a tener que recordar en la historia del Astillero. El camino fue el Cuerpo de Delegados, la Comisión Administrativa que dirige actualmente, los paritarios… El Cuerpo de Delegados que eligió un plan de lucha, plan de lucha que se llevó a las asambleas de sección a debatir y que se enriqueció, y esta asamblea masiva para que todos los compañeros en unidad puedan decir todo lo que piensan. Esta es la garantía para lo que yo digo de que no nos van a ganar.
Corresponsal
