Tras unos días y noches agitados, la canciller alemana Angela Merkel y Horst Seehofer (ministro del Interior, del Partido Unión Socialcristiana) llegaron a una “reconciliación” en la noche del 2 de julio, reafirmando la alianza gobernante.
El “compromiso” es otro endurecimiento ultrarreacionario de la política de refugiados. Y eso después de que Merkel y Seehofer ya estuvieran “completamente de acuerdo en 62,5 de los 63 puntos”. Esto se refiere a deportaciones más rápidas y rigurosas, extensión de las áreas de detención para deportación, en el caso dado incluso mediante ubicar en el mismo lugar a personas detenidas en espera de expulsión y delincuentes; extensión de las deportaciones colectivas.
Se planean medidas agresivas contra los refugiados, que tratan de ser encubiertas mediante toda una serie de términos demagógicos: “centros de anclaje”, como un tipo de campos de reclusión cerrados en Alemania y “zonas de protección” en el norte de África. Pero los campos existentes en Libia ya tienen mala fama por el terror, las violaciones en masa y la trata de esclavos y fueron rechazados por todos los países de África del Norte. Y ahora, finalmente, instalarán “centros de tránsito” en la frontera alemana-austríaca. Es cierto que el SPD (Partido Socialdemócrata) se queja un poco, pero al fin y al cabo Andrea Nahles (su principal representante) señala su aprobación si se hacen algunos cambios cosméticos.
Todo esto tiene el objetivo de mantener brutalmente alejada de Europa al máximo número posible de gente que huye ante la guerra, destrucción del medio ambiente, pobreza y hambre. En realidad los países imperialistas, también los de la Unión Europea (UE), son dramáticamente responsables de las causas de la huida: mediante la destrucción de una economía autóctona independiente, promoción de la amenazante catástrofe ecológica global que sigue avanzando, las guerras por el poder y esferas de influencia.
El acuerdo de las fuerzas gobernantes de Alemania prevé expandir masivamente las “guardias de fronteras”: Frontex. Se criminalizan las embarcaciones de rescate marítimo de ayuda a los refugiados y se prevé prohibirlas.
¡Pero sólo este año ya 1.137 niños, mujeres y hombres perdieron su vida en el Mediterráneo!
Sin embargo, con este supuesto acuerdo, las causas de la crisis política más profunda desde hace décadas no han desaparecido en absoluto. Los acontecimientos de los últimos días llevaron la crisis del gobierno de Berlín hacia una abierta crisis política. La próxima controversia previsible en el gobierno puede ser mucho peor, porque confluye una profunda crisis de confianza, abiertas crisis de partidos, crisis de la política burguesa sobre refugiados, la salud, el medio ambiente, crisis de la Unión Europea, etc.
El MLPD exige la dimisión del gobierno entero de Merkel/Seehofer/Scholz. No se trata sólo de su política hacia refugiados. Los gobiernos de la UE buscan un retroceso en la protección del medio ambiente, atacan a la jornada laboral y los derechos laborales, van desmantelando los derechos y libertades democráticos. En general, van preparando una guerra imperialista.
Hoy N° 1725 11/07/2018
