Mientras se arrodilla frente al imperialismo de los Estados Unidos y su actual presidente Donald Trump, el oligarca invertebrado que tenemos de presidente en la Argentina sigue sus negociaciones con la China socialimperialista y su máximo exponente Xi Jinping. Así Macri ha arreglado entrevistarse con el jerarca chino el 2 de diciembre, al otro día que haya concluido la cumbre del G20 y todos los demás jerarcas imperialistas se hayan ido de Buenos Aires.
Entre los temas que se han propuesto tratar, se encuentran los más sensibles que interesan al imperialismo de China en su política de disputa con el imperialismo de Estados Unidos y demás imperialismos en América Latina: los acuerdos por la construcción de una central nuclear, el desarrollo de inversiones en litio, el control del espacio aéreo y la persistencia de un fuerte financiamiento en swaps que podría condicionar a la Argentina en el futuro inmediato.
En ese amplio listado de temas, lo más urgente para los imperialistas de Pekín es concretar el acuerdo para la construcción de la central nuclear Atucha V en Argentina con tecnología completamente china, con la firme intención de empezar a construirse en el 2022. Dicho acuerdo fue comprometido a Xi, tras la Cumbre del Brics relizada en Sudáfrica entre el 25 y el 27 de julio pasado, a la que asistió Macri pese a no ser la Argentina miembro de ese grupo que integran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
El compromiso surgió porque en sus negociaciones con el FMI, Macri había dejado caer el proyecto de construcción de la central Atucha IV que había previsto con tecnología y aporte de Canadá y China. Así, tras la resignación de la soberanía que implicaba abandonar la tecnología Candu que supo forjar la Argentina a lo largo de su historia, el gobierno de Macri pretende ahora entregarla al imperialismo de China optando por un proyecto de mayor envergadura con tecnología sólo china, recortando U$S7.5 millones del nuevo Presupuesto pactado con el FMI a cambio de un crédito flexible de China por U$S9.000 millones.
Estaciones “espaciales” y telescopios de “investigación”
También estarán en la agenda la estación “espacial” que ha instalado China en Bajada del Agrio en Neuquén. Macri, en el acuerdo firmado por el gobierno de Cristina Kirchner que concedía por 50 años las 200 hectáreas de la estación, hizo agregar que se trata de una estación espacial de “uso pacífico”. El detalle es que está manejada desde abril pasado por una agencia china que depende del todavía llamado Ejército Popular de China. Esto ha generado gran malestar de los imperialistas de la Unión Europea y de Estados Unidos. Estos últimos presionan para la instalación de una base yanqui en Neuquén.
El otro proyecto en danza es la instalación de un radio telescopio de China en San Juan en acuerdo con el gobierno de Sergio Uñac y la Universidad Nacional de San Juan, en la estación espacial de Leoncito. También en este caso, los chinos aseguran que sólo será de uso pacífico y con fines de investigación, lo que está siendo puesto en duda por sectores militares yanquis y de Argentina.
Las polémicas represas
Cuando Macri asumió el gobierno, renegoció el contrato por la construcción de dos represas en Santa Cruz, firmado por el gobierno anterior. Se les redujo la potencia a las represas, y China aceptó la reducción del financiamiento, advertida de los sobrecostos del ex ministro de Planificación Julio De Vido.
A partir de conocerse la llamada “causa de los cuadernos”, sobre la corrupción en el gobierno kirchnerista, el gobierno de Macri alertó a China que seguir el contrato por las represas en Santa Cruz con una empresa como Electroingeniería implicaba un problema ya que estaba mencionada en la causa de coimas. Según Infobae “Fuentes calificadas de la diplomacia argentina” aseguraron que para compensar los fondos de este socio faltante en la construcción de las represas la gigante estatal china Gezhouba se hará cargo de comprar Electroingeniería y al parecer no habrá demanda alguna de por medio. Una vez más, el pragmatismo de la China socialimperialista se impone para mantener sus posiciones estratégicas en la disputada América latina.
Hoy N° 1737 03/10/2018
