—¿Cómo comenzó todo este proceso?
—Se me hace un poco difícil contar todo lo que fue la historia del inicio porque la verdad que hay muchos detalles. Pero lo que nos unió, lo que nos motivó, fue la lucha para apoyar el derecho al aborto legal seguro y gratuito. Convocamos por redes sociales y vimos como varias chicas del colegio se mostraron interesadas en hacer un pañuelazo; también nos encargamos de comprar tela verde y hacer pañuelos propios para las chicas que no tenían. Así fue como unimos la lucha del aborto con lo relacionado a la educación sexual. Al ver tantas chicas juntas a interesadas en luchar, se nos cruzó la oportunidad de tirar la idea de formar un centro de estudiantes. Así es como nos fuimos uniendo y fuimos luchando entre todas para crear el estatuto, entregar nuestra lista, integrar a más estudiantes y que nos puedan dar los directivos fechas para las elecciones.
El ambiente de las elecciones fue parejo ya que fuimos lista única, se presentó otra lista, pero tuvo que bajarse al no cumplir con los requisitos necesarios. Nosotros manteníamos una gran cantidad de chicos y chicas pertenecientes a nuestra lista, aproximadamente en ese momento éramos casi 50 chicos. Tengo que agradecer que tuvimos directivos que nos ayudaron y nos dieron un camino más fácil con respecto al armado del centro, sobre todo porque allí no funciona un centro de estudiantes desde hace 8 años.
Lo que mayormente nos impulsó fue el hecho de la voz ausente de los estudiantes de ese colegio, veíamos la necesidad de que cada estudiante tenga una atención más personal ya que muchos reclamos y cosas relacionadas quedaban en el aire y no había ningún tipo de representación o apoyo a causas que nos afectaban o creíamos correctas de reclamar tanto en el ámbito estudiantil como en el ámbito social.
—¿Al principio fueron sólo chicas?
—La verdad que sí, ya no somos todas chicas, pero una gran mayoría del centro está conformado por mujeres, sobre todo los roles como vicepresidencia, secretarías, etcétera. Es una comunidad buenísima porque todas formamos parte de la lucha de las mujeres contra las problemáticas que afrontamos a diario. Arrancamos como 15 chicas y hoy en total el centro tiene aproximadamente 70 personas. Y lo ganamos con 352 votos cuando el padrón total es de 480 pibes.
—¿Qué problemáticas veían en tu colegio?
—En el colegio está muy normalizado el hecho de la falta de atención a los estudiantes o la poca representación que tenemos, también la lentitud para tratar ciertos temas que suceden en el ámbito escolar. Tuvimos ayuda de los directivos y creo que es porque necesitan una mano con respecto a todas las situaciones que se abarcan en un ámbito escolar y la necesidad de una representación estudiantil.
—El tema de la Educación Sexual Integral, ¿Cómo lo toman?
—La jornada de educación sexual en el colegio es algo que por suerte está bien manejado y se hace en ciertas fechas. Se basa en que los profesores –sean de la materia que sean– van a explicar asuntos que están relacionados con la educación sexual integral. Con el centro queremos impulsar una jornada del estilo charla educativa para todo el colegio, con gente especializada en el tema.
Hoy N° 1741 31/10/2018
