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03 de julio de 2019

Otto Vargas

El clasismo y la lucha antigolpista

Continuamos reproduciendo la introducción de una charla del camarada Otto Vargas en la Capital Federal, en el marco de la Campaña Financiera de julio de 2010.

Hay muchos compañeros que a veces se consideran como San Antonio “en un prostíbulo”, y cuidan no tocarse con nadie para no caer en pecado, o como ese cura, Gil, que ni siquiera miraba al espejo para no caer en pecado. Pero cuando vos estás verdaderamente en la lucha por la revolución, tenés que golpear con muchos, como hizo Mao Tsetung, con los que a veces no te gusta ni codearte, pero tenés que hacerlo. Tenés que unirte con los aliados en un frente único, y diferenciar el frente único de golpear juntos.

Nosotros levantamos las banderas del clasismo. En el Cordobazo hubo tres columnas fundamentales. Una de ellas fue la de Santa Isabel que empalmó con los compañeros de Perdriel. Ahí ya venía mezclado en la masa, ese compañero que es una figura legendaria del movimiento obrero argentino, René Salamanca. Ahí venía la columna de Dinfia encabezada por los compañeros de la 1°de Mayo, que habíamos creado en Dinfia, y que dirigió una de las tres grandes columnas que hizo posible el Cordobazo.

Y ahí estaban también los estudiantes, desde ya, que jugaron un gran papel –ya lo habían jugado antes en Córdoba–, y que hicieron estallar ese gran polvorín.

Y entonces levantamos las banderas del clasismo revolucionario, que vuelvo a repetir, implica no que la clase obrera se autoconsidera como una clase sectaria, cerrada, sino que tiene una política para hegemonizar el proceso revolucionario, y por eso tiene en cuenta los matices. Por eso René Salamanca fue el compañero que encabezó en Córdoba la lucha contra el golpe de Estado cuando en el año 74, nosotros comprendimos que, inevitablemente, la Argentina iba a un golpe de Estado.

Levantamos las banderas del clasismo revolucionario, y pasamos a dirigir cuerpos de delegados en muchas empresas, en muchos lugares, no sólo en el Smata Córdoba. Pasamos a dirigir Grafanor que era la empresa más grande de Tucumán. Y muchas otras grandes empresas; no me voy a extender en eso.

Contra el golpe y la dictadura
Nosotros comprendimos, en el año ‘74, que inexorablemente este país iba a un golpe de Estado, porque era un país en disputa entre los yanquis y entre los rusos. Los yanquis estaban en retroceso, habían sido derrotados en Vietnam. Los rusos habían hecho pie en Africa Oriental, en Etiopía, y en Angola, en África Occidental. Estaba en juego el dominio del Atlántico Sur. Y era inexorable la disputa de la Argentina porque la fuerza que habían acumulado los rusos en el ejército era muy grande. Las tres “V” se decía entonces: Videla, Villareal, Viola, eran prosoviéticos.

Los yanquis tenían su fuerza, desde ya, grande. Habían triunfado en Chile, en Paraguay, Bolivia, Brasil, y en Uruguay. Por lo tanto, era inevitable que se diera el golpe en la Argentina. Y desde entonces a nosotros hay quienes nos llaman “lopezreguistas”, porque levantamos la bandera de la lucha contra el golpe de Estado. Dijimos: “unirse y armarse para evitar otro 55”. Esa fue nuestra consigna. Eso sí, también aclaramos que si era necesario defender al gobierno constitucional de Isabel Perón frente a los golpistas, nosotros la defendíamos, y no nos arrepentimos de eso. Algún día habrá historiadores que dirán la verdad, no como ese responsable sindical del PC, que el otro día dijo que René Salamanca era de Vanguardia Comunista.

Nosotros sabíamos lo que venía, el tipo de golpe que se estaba preparando. Luchamos contra los yanquis, y contra los rusos. Cuando Capellini, que estaba en una trenza proyanqui, dio su golpe, rodeamos los cuarteles donde él se había alzado, con grupos que nosotros formamos. Desde el primer día, en la primera declaración que sacamos cuando triunfó el golpe, el 24 de marzo de 1976, dijimos que el golpe estaba hegemonizado por un sector de militares ligados a la Unión Soviética.

Tuvieron los yanquis que declarar el bloqueo a Afganistán, cuando los rusos la invadieron, para que la dictadura argentina tirara la careta. Se transformó en la cantinera de las tropas soviéticas que habían ocupado Afganistán. En todos los foros internacionales, la dictadura argentina era defendida por la Unión Soviética, que impedía que se la califique como a una dictadura igual que la de Pinochet.

Bueno, compañeros, esa es nuestra historia. Cuando vino la dictadura, nos quedamos aquí en la Argentina, nosotros no nos fuimos. Así como tuvimos muchos mártires en la lucha antigolpista, muchos compañeros que fueron asesinados -y en el nombre de Enrique Rusconi voy a nombrar a todos-, también bajo la dictadura tuvimos muchos compañeros detenidos desaparecidos, entre ellos Gody Alvarez, René Salamanca, Angelito Manfredi, y tantos compañeros que resistieron con valentía, como demuestra la autopsia del propio cadáver del compañero Gody Alvarez, que fue prácticamente quemado vivo. Demuestran el valor con que afrontaron la tortura y por la que hoy nosotros estamos acá.
Los compañeros nuestros, sometidos a la opción de irse o quedarse, se quedaron acá, en las cárceles, y se pasaron allí siete, ocho años, como Ciafardini, como Normita Nassif, porque no aceptaron la opción de irse al exterior. Nosotros luchamos dentro de la Argentina. Ese es nuestro Partido compañeros. Para este Partido nosotros les pedimos la contribución en esta Campaña Financiera.

Cuando Cristina estaba en Estados Unidos tratando de que Obama la reciba, cosa que no logró, la Kraft, el Sindicato, la Policía Federal, que estaban unidos, atacaron a los trabajadores de Terrabusi, y convirtieron a la Kraft en un campo de concentración. Y ese día compañeros –porque yo quiero terminar en esto–, la Argentina desde Jujuy hasta Tierra del Fuego demostró que aquí hay un Partido. Es chico, no estamos contentos con este Partido, queremos engrandecerlo e invitamos a los que no se han afiliado a que se afilien. Pedimos una contribución para fortalecerlo.

Pero ese día, los cortes de ruta que hubo en Jujuy, Salta, Tucumán, el corte del puente de Resistencia-Corrientes, el corte del puente Cipoletti-Neuquén, las manifestaciones en Ushuaia, demostraron que en la República Argentina, aquel grupo, aquellos compañeros que hace 42 años fundaron este Partido, han logrado construir un Partido, compañeros. Un Partido que está al servicio de la clase obrera y al servicio de las luchas que hagan falta para liberar a nuestro país. Eso es lo primero que yo quería decir.

Hoy N° 1773 03/07/2019