Luego de que los docentes universitarios nucleados en la Conadu Histórica realizaran su reunión de Mesa Ejecutiva y denunciaran la grave situación económico-social agudizada con la corrida cambiaria -posterior a la devaluación del dólar, ocurrida tras la contundente derrota electoral del gobierno de Macri- Luis Tiscornia expresaba a este semanario: “Lo que ha sucedido con la brutal devaluación y los consecuentes impactos inflacionarios es la pérdida adquisitiva de los salarios, el deterioro de presupuesto universitario, el deterioro del ingreso de los jubilados, el deterioro de los ingresos de nuestras obras sociales.
“Entonces, a esta situación grave tiene que haber una respuesta concreta del gobierno, por eso estamos pidiendo que se compense la pérdida ocasionada por estas medidas, de las cuales es responsable el gobierno nacional. Por eso exigimos que también se haga el pago a los docentes universitarios de los 5 mil pesos de incremento que el gobierno resolvió pagar a los estatales nacionales. La docencia universitaria y los trabajadores no docentes hemos chequeado que hemos quedado excluidos del pago de 5 mil pesos a los estatales nacionales, siendo el principal contingente de estatales nacionales: hay 150 mil docentes, casi 40 mil no docentes.
“También exigimos el adelanto que estaba pautado en la paritaria para abril, del 8%, que se adelante a agosto. Que se extienda el pago de los 5.000 pesos a los jubilados, y que haya un refuerzo presupuestario urgente a las obras sociales, porque con el pago de las sumas en negro del año pasado, se produjo un desfinanciamiento de las obras sociales y del sistema jubilatorio; y el refuerzo presupuestario inmediato, ya que que atrasan el envío del ya raquítico presupuesto universitario.
La política de ajuste no va más
“El pueblo argentino se expresó el domingo 11 y le dijo al gobierno: ‘basta, no los queremos más. La política de ajuste no va, la rechazamos, queremos otro camino’. Y la respuesta contundente fue la de Fernández-Fernández. Después, lo que pasó el lunes fue como si el gobierno llamase a los “barrabrava” y nos mandó a pegar. Esos patovicas eran el Fondo Monetario, la especulación financiera, que nos pegó con la devaluación y el aumento de los precios. Al día siguiente, el gobierno pidió disculpas. Las disculpas, para que sean reales, se tienen que traducir en compensación económica. O sea, reduciendo los daños de las decisiones que ellos han tomado.
“Por supuesto que esto se resuelve con medidas de fondo. Por eso está planteado que el 27 de octubre –que son las elecciones definitivas, y ya la mayoría se expresó pidiendo que esto cambie– esperamos que esto se concrete. Mientras tanto, es justo el reclamo para que todo el daño que el gobierno está haciendo sobre los ingresos de la gente, sea compensado con respuestas concretas.
“Las estimaciones dan que la inflación de agosto es entre el 4 y 5%, y la de septiembre entre el 5 y 6%. Entre los dos meses estaríamos en un 10% de inflación, con una proyección que venía para el 3 o el 4%. Después, otros analistas hablan de aumento de precios de un 20% o impacto inflacionario alrededor del 20%. Por eso, lo que hay que compensar ya -porque no se sabe qué es lo que va a pasar en 15 días- es la pérdida estimada de agosto-septiembre, porque los acuerdos paritarios están discutidos y resueltos en un contexto completamente distinto.
“Un gran éxito de la lucha de los docentes universitarios es la cláusula gatillo en octubre; lo que alteró todo es la pérdida que va a haber de agosto y septiembre. Por eso vamos a un plenario nacional el viernes 23. Hemos tenido una reunión con todas las organizaciones docentes, y en conjunto le pedimos al gobierno la inmediata conformación de una reunión de la mesa salarial para nuestra paritaria. Por supuesto que, de no haber una respuesta inmediata, discutiremos las medidas de fuerza a tomar”, finalizó.
Hoy N° 1779 21/08/2019
