El compañero Penayo comienza contando que “La empresa hace una presentación en el Ministerio de Trabajo. Aduce que tiene baja producción, baja de ventas y ante esa situación quiere suspender entre 350 a 400 personas entre planta Pacheco y planta Victoria.
“Nosotros venimos de un proceso en el que en agosto y septiembre impedimos en tres oportunidades que nos metan vacaciones fraccionadas. No fue lo mismo en planta Victoria donde lo impusieron. Allí les dijeron que con eso iban a resolver el problema de la crisis. Mintieron.
“Nosotros rechazamos los argumentos que utiliza la empresa. Le decimos que no estamos dispuestos a seguir pagando la crisis más de lo que ya venimos pagando. Ni con suspensiones ni con despidos. La empresa quiere convencernos de que esto es el mal menor, por eso la crisis la aguantan hasta acá. Nosotros le decimos que también venimos bancando la crisis. Con la devaluación y la inflación perdimos el 50% nuestro poder adquisitivo. En Pacheco se han ido compañeros con arreglos, otros se jubilaron, alguno falleció y alguno despidieron, esos puestos de trabajo no se repusieron”.
El integrante de la Interna sigue diciendo que en la reunión con los directivos, les plantearon que al tiempo que aumenta todo “ustedes siguen remarcando los precios inclusive en la proveeduría que tenemos internamente. Eso lo pagamos de nuestro salario, que se firmó un 28% para este año y la devaluación va a llegar a un 60, mirá si no ponemos como trabajadores en esta crisis. No es lo mismo, ustedes tienen espalda para soportar. Si mantienen su postura, nosotros decimos que no estamos de acuerdo y vamos a confrontar”.
Cuenta Penayo que los directivos dicen que no quieren confrontar, que “el conflicto no nos sirve a ninguno” pero que amenazan: “¿Ustedes piensan que las corporaciones van a volver a tolerar una toma de fábrica?”. Penayo dice que le contestaron “Nosotros no estamos hablando de toma de fábrica, lo que estamos diciendo es que vamos a confrontar, no vamos a quedarnos de brazos cruzados. No sabemos lo que se hará, porque eso lo vamos a decidir con los trabajadores, no con ustedes. Ante esa situación dicen que ellos están dispuestos a dialogar y buscar un punto de encuentro”. Cuenta Penayo que en esta semana está prevista una audiencia en el Ministerio de Trabajo donde la Interna conocerá los detalles del planteo de la empresa. Con eso se seguirá el debate entre los trabajadores. “Ya en las compulsas que venimos haciendo en los distintos turnos, los compañeros están rechazando a mano alzada estas suspensiones. Hay una conmoción en los trabajadores que no están dispuestos a que sean suspendidos y mucho menos despedidos.
“También decimos que esta política se sepultó en las elecciones el 27 de octubre. Porque el pueblo mayoritariamente votó contra el ajuste, los cierres de fábrica, suspensiones, inflación, tarifazos, devaluación, el pueblo votó en contra de esa política y la empresa presenta esto y dice que ‘tenemos que dar una señal a las corporaciones’ ¿Qué señal? Así nos dijo Macri, que teníamos que dar una señal para que vengan los inversores. No, estamos en contra”.
—La interna esta plantada y están discutiendo con los compañeros que pasos tomar. ¿Ellos plantean por seis meses las suspensiones?
—Esos detalles lo vamos a tener en la audiencia. Lo que manifiestan oficialmente es que son a partir del primero de diciembre, seis meses, y con el salario al 90%. Eso también lo discutimos en la reunión con los directivos, ¿vos te querés ahorrar un 10% de los salarios, y con eso vas a resolver tu problema? Ellos dicen que también se ahorran las cargas impositivas. Entonces le dijimos, si el gobierno saliente o el entrante se compromete a librarlos de impuestos o de lo que fuese para que no lleguen a las suspensiones, ustedes las dejarían de lado. Y nos dicen que sí. Le dijimos que nos están usando de chivo expiatorio. Nos quieren llevar a un conflicto para negociar.
Nosotros en la audiencia le vamos a plantear al Ministerio de Trabajo en primer lugar, que sea la empresa la que pueda solventar esta situación. En segundo lugar que el Estado vea la forma, que pueda buscar los recursos para que pueda solventar el Estado. Una vez que volvamos del Ministerio de Trabajo veremos los detalles y discutiremos entre los trabajadores.
—¿Por qué la empresa mete esta medida ahora, a pocos días de las elecciones?
—Yo creo que están muy enojados porque tenían conversado con Macri la reforma laboral. Como Macri pierde tal vez ellos especulan que el gobierno que viene alguna medida va a tomar para que esto pueda empezar a repuntar. Y entonces se les va a hacer más complejo achicar y ajustar, porque hasta ahora nosotros venimos oponiéndonos. Quieren acelerar en estos cuarenta días que quedan de transición. Esa es nuestra apreciación.
En esta reunión con los directivos de Mondelez, dijeron que ellos no pidieron preventiva de crisis ni suspendieron, como otras empresas de la industria. También puede ser que haya alguna señal del gobierno entrante para toda aquella industria que estaba en esta situación, que tal vez vuelven los Repro y Mondelez quedó afuera de eso. Ellos hacen más política que nosotros. Es nuestra apreciación. Nosotros ratificamos en las asambleas que no vamos a dejar pasar ninguna suspensión ni despido, que tenemos que estar más juntos que nunca y que hay condiciones para enfrentar.
Estamos en una zona adonde hay amenazas de 400 despidos en la línea 60, porque quieren cerrar ramales. Alijor no está pagando la quincena y tiene amenaza de cierre de fábrica. Ford está con amenaza de cierre de un turno. Así que estamos en una zona que es un caldo de cultivo, donde sale uno a hacer la delantera es probable que nos juntemos todos en la zona norte, porque no estamos de acuerdo en seguir pagando la crisis si el pueblo avaló con su voto que esta política no va más.