Cientos de miles de personas participaron en los actos en Irán por el funeral del general Qasem Soleimani, jefe de la fuerza Al Quds de la Guardia Revolucionaria, asesinado en Irak en un operativo norteamericano con un dron. Se calcula que en Teherán alcanzaron a un millón. En la ceremonia realizada en la Universidad, participaron todas las autoridades iraníes.
Además de retratos de Soleimani había banderas de Irán, Irak y el Líbano. El entierro fue en su ciudad natal, Keman.
Aún antes de terminar las ceremonias, Irán lanzó un ataque con misiles sobre las bases en las que hay militares norteamericanos en Irak: la base de Ain al Asad en la provincia de Al Anbar y la de Erbil. Según Trump, no hubo víctimas mortales. El objetivo es expulsar a los norteamericanos de la región. El parlamento de Irak pidió que se retiren las tropas extranjeras de su país, lo cual fue aceptado por algunos países, pero no por Estados Unidos.
Después del bombardeo iraní Estados Unidos realizó declaraciones amenazantes, pero no contestó militarmente en la zona. El 6 de enero la base operativa F-35 de la Fuerza Aérea norteamericana, en Utah, realizó una “caminata masiva de elefantes”, lanzando 52 aviones de forma ininterrumpida desde un portaviones. “Caminata de elefante” es un término utilizado por la Fuerza Aérea para la movilización de un avión militar justo antes del despegue, cuando están en formación cerrada. Si bien el ejercicio combinado había sido planeado durante varios meses, el número de aviones desplegados fue de 52, la misma cifra de blancos que Trump anunció que tenía en su radar si Irán continuaba su respuesta. Cincuenta y dos, además, es el número de diplomáticos y civiles estadounidenses capturados por Irán durante la crisis de rehenes de 1979.
En sentido contrario, la Cámara de Representantes de Estados Unidos, de mayoría demócrata, votó una resolución limitando las posibilidades de Trump de iniciar acciones bélicas sin previa consulta. Al no producirse una nueva reacción militar norteamericana, la tensión decayó, expresada en baja del precio del petróleo y suba de las bolsas.
El gobierno iraní, a su vez, anunció que deja de cumplir con las limitaciones impuestas a su programa atómico por el acuerdo nuclear de 2015, “elimina la última restricción técnica que quedaba, que era el límite en el número de centrifugadoras”, que era de unas 6.100 para la producción de uranio, aunque continuará cooperando con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Por otra parte, el 8 de enero un avión comercial ucraniano se estrelló minutos después de despegar de Teherán. Las 176 personas a bordo murieron. Los pasajeros eran principalmente canadienses e iraníes. Hay muchos iraníes residentes en Canadá, pero no hay líneas aéreas directas. El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau declaró que varias fuentes de inteligencia, incluidos los servicios canadienses, sugieren que fue “derribado por un misil tierra-aire iraní. Puede que no haya sido intencional”, dijo en una conferencia de prensa. Irán finalmente reconoció que el avión había sido derribado por error con un misil y pidió perdón a las víctimas, mientras aumentaban las amenazas norteamericanas. El conflicto Estados Unidos- Irán sigue abierto.
Hoy N° 1798 15/01/2020