1. La emergencia sanitaria como principal emergencia
La pandemia por el coronavirus se va extendiendo por todo el mundo y también en la Argentina.
En nuestro país la pandemia de coronavirus ya produjo más de 820 casos y más de 20 muertos, principalmente en la Capital Federal, provincia de Buenos Aires y Chaco. El gobierno nacional va tomando medidas positivas para afrontar esta situación de emergencia sanitaria y alimentaria.
El presidente Alberto Fernández, el domingo 29 de marzo, decretó la extensión de la cuarentena hasta el 12 de abril, e impulsó junto con el ministro Daniel Arroyo la formación de un Comité de Emergencia Nacional desde el Ministerio de Desarrollo Social, con todos los sectores afectados, incluyendo a las organizaciones sociales como la CCC, Movimiento Evita y Somos Barrios de Pie. Es un paso importante, el ministro Daniel Arroyo tomó el compromiso de garantizar el aumento en los alimentos a distribuir y de impulsar la conformación de Comités de Emergencia en los municipios.
La cuarentena también puso en evidencia la grave situación de las masas populares, que se profundizó con la política del gobierno de Macri. Algunos grandes monopolios pretenden seguir descargando la crisis sobre los trabajadores con despidos y suspensiones.
Una gran parte del pueblo en todo el país no puede cumplir con la cuarentena por las condiciones en las que vive. Familias enteras viviendo en una habitación, o a orillas del Riachuelo, en los barrios y pueblos sin agua potable, electricidad o gas porque no llegan las redes.
2. Avanzar en la organización contra la pandemia y el hambre
Crecen los ejemplos de solidaridad del pueblo argentino.
El Partido Comunista Revolucionario y su Juventud Comunista Revolucionaria jerarquizamos que el centro de nuestro trabajo sigue siendo concentrar la lucha política en los barrios y zonas rurales peleando la conformación de comités de emergencia.
Impulsamos una gran campaña de organización popular para que el pueblo tome en sus manos y sea el protagonista para enfrentar la pandemia sanitaria y alimentaria.
En este sentido se han dado pasos importantes: el funcionamiento de los comedores y merenderos todos los días en los barrios de muchas provincias y zonas del país, repartiendo comida casa por casa a los mayores, produciendo alcohol en gel, barbijos, etc. Es un ejemplo de solidaridad, con un gran protagonismo de las compañeras y compañeros del PCR y su JCR, del PTP, de la CCC con los desocupados y precarizados, el movimiento Ni un pibe menos por la droga; la CEPA, la FNC, el MUS y el MIJP. Y otras organizaciones.
La lucha de los trabajadores/as de Mondelez, con paros y asambleas con su Comisión Interna a la cabeza, conquistó la formación de un Comité de Emergencia y se tomaron numerosas medidas para la emergencia sanitaria y alimentaria.
Los trabajadores/as del Astillero Río Santiago con su cuerpo de delegados, conquistaron la fabricación de elementos sanitarios necesarios para enfrentar la pandemia, entre otros reclamos.
La JCR está a la cabeza de la lucha por la emergencia impulsando la organización de voluntarios solidarios en todo el país. Y avanza en unidad con otras fuerzas en el Movimiento ni un pibe menos por la droga. El pronunciamiento de 22 organizaciones juveniles de unidad para enfrentar la pandemia crea mejores condiciones para que avance la juventud.
Las mujeres y sus organizaciones protagonizaron junto al pueblo el domingo 29/3 y el lunes 30/3 un ruidazo, colgando pañuelos y subiendo fotos a las redes, por los femicidios de las últimas horas, de Cristina Iglesias, Ada y Claudia Repetto. Con la cuarentena urge la necesidad de que se declare la emergencia en violencia contra las mujeres.
El ejemplo de solidaridad popular va marcando un camino. Ya son miles y miles las enfermeras/os, médicas/os y demás trabajadores de la salud y de trabajadores voluntarios, campesinas/os, mujeres y jóvenes. Es un ejemplo para que cada vez sean más los que tomen en sus manos la lucha contra el coronavirus y las emergencias. Las medidas represivas en algunas provincias y municipios muestran el temor a ese protagonismo popular.
3. La economía mundial y el coronavirus
La economía mundial venía en recesión, con la pandemia del coronavirus esto se profundizó.
Siguen los derrumbes en las acciones en Wall Street. Algunos economistas connotados plantean que esta será una crisis más aguda que la de la década infame (1930).
Bolsonaro hace campaña contra las medidas para enfrentar a la pandemia. Dijo: “Brasil no puede parar”. Presionando a los gobernadores para que reabran las escuelas y los comercios, ordenó suspender el pago a trabajadores estatales. Miles se movilizaron este sábado 28/3 contra las medidas y dichos del presidente de Brasil.
El presidente yanqui Donald Trump abandonó la idea de poner en cuarentena a los estados de Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut, crecen los contagios (124.686) y los muertos (2.191) en Estados Unidos y pronostican que el pico de muertes ocurrirá en dos semanas.
En Italia hubo saqueos de supermercados y protestas contra el gobierno del primer ministro Giuseppe Conte, que no tomó las medidas necesarias. Se elevan ya a más de 10.000 muertes, y cada día se suman cerca de 1.000 más.
Hay desconfianza sobre los datos reales de China, desde que la OMS comprobó que los test para detectar el coronavirus que venden a España y otros países están vencidos y no detectan el contagio.
4. Fortalecer al PCR
Vamos por más afiliados al PCR y su JCR.
En este periodo dimos batalla política para no poner en el blanco al gobierno de Alberto Fernández.
Seguimos jugando políticamente en el Frente de Todos, jerarquizando la alianza con los Cayetanos, el Movimiento Evita y Somos Barrios de Pie. Sostuvimos la política de unidad para la lucha y de lucha por la unidad en los frentes únicos de los que somos parte. Pero también damos batalla peleando nuestra independencia política y organizativa para no diluirnos ni fundirnos en el Frente de Todos, ni con los Cayetanos, ni con el gobierno de Alberto Fernández.
Peleamos por fundirnos con las masas más explotadas y oprimidas que habitan nuestro suelo.
Peleamos para que el PCR y su JCR sean conocidos y reconocidos por las masas en todo el país, para avanzar en arraigar al PCR y su JCR entre las masas obreras, campesinas, estudiantiles y populares.
Fue un acierto de línea del Comité Central del PCR tomar la decisión y ponerse a la cabeza de la organización popular para enfrentar la pandemia y el hambre. Ahora debemos integrarla con la agenda patriótica y popular: Este 2 de abril en todo el país recordamos a nuestros héroes y caídos en Malvinas.
Escuchamos, discutimos y trabajamos para acumular fuerzas que creen las condiciones para abrir el camino que lleve al pueblo a acabar con la dependencia, el latifundio oligárquico y el Estado podrido que los sostiene. Para conquistar uno nuevo, donde los trabajadores encabecen la más amplia unidad popular que decida qué se produce, cómo se produce y cómo se distribuye lo que se produce.
Escriben Jacinto Roldán y Ricardo Fierro
Foto: Comedor de La Matanza
