1.La Emergencia sanitaria como principal Emergencia
Al momento de escribir estas líneas son 1.345.048 las personas contagiadas, y cerca de 80.000 los muertos en todo el mundo. La situación actual muestra además de la precariedad económica, la magnitud de la crisis social que el coronavirus agrava en un país dependiente y latifundista como Argentina, como la mayoría de los países de América Latina.
En nuestro país los datos publicados por el Indec del cierre de 2019 señalan un 35,5% de pobreza. Son 16,4 millones de personas, la mitad de los cuales son menores. A esto se agrega los miles de jubilados y pensionados que son gran parte de la población en riesgo, que con lo que cobran no cubren la canasta básica total y no les alcanza para comprar los remedios.
En su discurso del 31 de marzo Alberto Fernández planteó que entre la salud y la economía privilegiaba la vida, a los sectores empresarios les dijo: “muchachos, esta vez les toca ganar menos”, y decretó la extensión de la cuarentena hasta el 12 de abril.
A los pocos días se iniciaron cacerolazos reclamando que los funcionarios del gobierno bajen sus salarios. Gerardo Morales, gobernador de Jujuy, envió un micro con 52 extranjeros de La Quiaca a Buenos Aires, y lo justificó mintiendo sobre la declaración jurada. Las embajadas de Colombia y Perú han desmentido al gobernador jujeño.
También se produjeron hechos como el saqueo de un supermercado en Pergamino, el posible asesinato del comisario inspector Guillermo Luis Perea en La Plata, o el femicidio de María Florencia San Cruz, hija de un comisario retirado en Tigre. La situación se ha ido tensando.
Hay despidos y rebaja de salarios en varias industrias, y las grandes cadenas de comercialización empujan el aumento de precios.
2.La lucha contra esta pandemia es una lucha larga
El viernes 3 de abril miles y miles de jubilados se amontonaron frente a los bancos en todo el país, sufriendo frío en las largas colas para poder cobrar su jubilación. El ministro de Salud, hablando de su gobierno dijo “no fue un buen paso”. El gobierno el mismo viernes 3 dispuso que se abran los bancos el sábado 4 y domingo 5.
El gobierno decretó la cuarentena, dispuso un gran operativo de controles de tránsito para garantizarla y se lanzó una gran campaña a través de todos los medios llamando a la población a no salir de sus casas, lavarse las manos frecuentemente. Todo esto apuntando a que el coronavirus no se extienda.
Al mismo tiempo una gran parte del pueblo en todo el país no puede cumplir con la cuarentena por las condiciones en las que vive. Una de las recomendaciones sanitarias es lavarse las manos ¿cómo hacen las familias que viven sin agua potable, o tienen una canilla cada dos manzanas?
Otra de las recomendaciones para la cuarentena es “quédate en tu casa” ¿cómo hacen las familias que viven en una sola habitación?
Para enfrentar la pandemia ¿Cuántas salas de primeros auxilios y respiradores se necesitan en el Gran Buenos Aires? ¿En CABA? ¿Cuántos en cada provincia?
Y para salvar vidas ¿De dónde tiene que salir la plata, si no se tocan los intereses, en primer lugar de los que se la llevaron en pala durante el macrismo?
La salida de la cuarentena obligatoria será escalonada, de forma gradual. En nuestro país los contagios son, al martes 7, de 1628 personas, con 325 recuperados y 53 muertos.
¿Cuánto puede durar esta situación? La emergencia sanitaria profundizó la necesidad de resolver la emergencia social. La lucha contra esta pandemia es una lucha larga, no termina con la salida de la cuarentena.
Entendemos que el protagonismo de las masas es clave en la lucha contra la pandemia. En esa pelea aparece la diferencia entre el asistencialismo y la solidaridad, entre delegar y ser protagonista, esto aparece en cada una de las cosas que hacemos. La pelea nuestra es que las masas no deleguen e impulsar la solidaridad de todas y todos, para garantizar el control de las masas sobre la distribución de alimentos, planes sociales, que las escuelas estén abiertas y los chicos puedan comer.
3.Con la pandemia se agudiza la disputa interimperialista y crece la lucha de los pueblos
EEUU va siendo golpeado por la pandemia. Con más de 10.000 muertes y 360.000 casos confirmados pasó a estar en el centro de la crisis sanitaria mundial y sigue avanzando. Trump advirtió “Habrá muchas más muertes”. El martes 1 de abril lanzó un inédito operativo antinarco en América del Sur “contra carteles mexicanos y venezolanos”. Instaló la flota naval y aviones de la Fuerza Aérea en las costas venezolanas. El jefe de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos denunció a Maduro como jefe del narcotráfico.
De manera “pacífica y solidaria” aparece apoyando Francia y Reino Unido, que han enviado buques y portaaviones “sanitarios” a costas cercanas.
El imperialismo chino, en noviembre del 2019 venía con una alta tasa de desocupación en medio de la crisis comercial con los EEUU.
El médico chino de Wuhan, Li Wenliang, fue quien advirtió sobre el coronavirus y su brote el 30/12/2019, denunciando al gobierno de Xi Jinping. Lo llevaron detenido unos días, luego de unas semanas contrajo el virus y el 6 de febrero de este año murió ¿China podría haber bloqueado el virus sin propagar su expansión?, no lo sabemos, pero sí que los mandarines que hoy gobiernan China no son amigos de los pueblos. Son imperialistas que pelean por el control del mundo.
Por otro lado, Putin (Rusia) está muy preocupado por el precio del petróleo y le interesa directamente el futuro de Venezuela, por las empresas y negocios en ese país. El presidente ruso propone en la reunión de la OPEP que el precio del barril pegue un salto ¿Cómo repercutirá el aumento del precio internacional del barril de petróleo en Venezuela? ¿Qué hará Putin si Trump decide invadir Venezuela?
A mediados de febrero de este año Bolsonaro dijo “le estamos ganando por goleada al coronavirus”, pero avanzó la pandemia y desplazaron parcialmente a Bolsonaro. El presidente operativo al mando de la batalla contra el coronavirus en Brasil pasó a ser el general Walter Braga Neto, así lo menciona un comunicado de las fuerzas armadas.
4.El PCR pelea que el pueblo sea protagonista y tome en sus manos la lucha por salud, educación, trabajo, vivienda, contra el hambre
Una gran parte del Partido y su Juventud, junto a cientos de compañeras y compañeros de los frentes únicos en los que participamos como la CCC, la FNC, el Movimiento Ni un pibe menos por la droga, las mujeres y sus organizaciones, venimos protagonizando la pelea por la organización popular.
Peleamos la conformación de los comités de emergencia, garantizando el protagonismo de las masas en fábricas, lugares de trabajo, zonas rurales, barrios, escuelas, universidades, etc.
Los comedores y merenderos han sido el termómetro de organización y solidaridad en los barrios. Hay experiencias que son nuevas, vamos aprendiendo a movernos en esta difícil situación. El Partido no ha quedado paralizado.
En Tucumán la FNC junto a otras organizaciones en la municipalidad de Cañada de Viclos, realizaron una jornada de fumigación. En Mendoza la FNC vendió 1.600 bolsones de alimentos a las municipalidades de Maipú, Santa Rosa, San Martín. Así como también la Unión Campesina de Varela y el Asoma en La Plata arman bolsones de verduras para venderlos entre la gente del barrio.
El ARS y sus trabajadores realizan una colecta entre los trabajadores para comprar alimentos a los productores agrarios de la zona y donarla a los comedores y siguen reparando camillas, sillas, etc.
En La Matanza en el GBA se realizó una colecta entre comerciantes, pymes, relaciones políticas, religiosas, para la Sala de Salud en el Barrio María Elena. En distintos lugares se van capacitando agentes de salud, como en la zona de Abasto (La Plata) donde salieron a vacunar a los mayores entre el barrio y las quintas.
Guillermo Ávalos, concejal del PTP/PCR en el Frente Neuquino planteó que no haya despidos, que los 25 mil petroleros que hacen la cuarentena cobren su sueldo, establecer precio sostén de 40 dólares el barril del petróleo y la estatización del 49% restante para tener una YPF 100% estatal.
Fue un acierto del Comité Central del PCR plantear que la emergencia sanitaria pasaba a ser la principal emergencia. Se crearon mejores condiciones para pelear el protagonismo de los obreros/as, campesinos/as, de los originarios/as, de los estudiantes, de los profesionales, de los intelectuales y el pueblo, en los barrios, quintas, en cada municipio y en cada provincia para enfrentar la pandemia. Estamos en un buen momento para seguir fortaleciendo al PCR y su JCR. Somos parte del Frente de Todos y peleamos iniciativas, sin sectarizar pero sin diluirnos en el frente.
En este mundo actual, el coronavirus vino a detonar la crisis general anticipando un escenario mundial, dicen los economistas, semejante al de la Gran Depresión de la década de 1930, que exacerbó el fascismo y la disputa entre las principales potencias imperialistas, llevándolas a una nueva guerra mundial en 1939. Pero también es bueno aclarar que en ese período, en las difíciles condiciones de la crisis y durante la guerra el proletariado y los pueblos y naciones oprimidas resistieron, tomando las armas de los opresores en sus manos y tras la derrota del fascismo asistimos a una oleada revolucionaria mundial que se prolongó hasta la década de 1970.
Ninguna crisis ni ninguna guerra pueden ser iguales, pero hasta ahora las primeras y principales víctimas son los trabajadores y los pueblos oprimidos. Por eso para afrontar la actual crisis que se augura profunda y prolongada debemos prepararnos, uniéndonos y organizándonos de manera que esta crisis permita abrir un nuevo periodo de revoluciones en todos los países del mundo.
Escuchamos, discutimos y trabajamos para acumular fuerzas; las experiencias más avanzadas las tenemos que generalizar. Nos fundimos con las masas más explotadas y oprimidas de todos los que habitan nuestro suelo. Y peleamos para avanzar y abrir el camino que lleve al pueblo a acabar con la dependencia, el latifundio oligárquico y el Estado podrido que los sostiene.
Escribe: Jacinto Roldán