1. El coronavirus en el mundo y en la Argentina
La pandemia se ha extendido en todo el mundo. Tres millones de infectados, más de 207 mil muertos y 830 mil recuperados al momento de escribir estas líneas. En la Argentina son más de 4.000 los contagiados, 200 muertes y 1107 recuperados. Buenos Aires, CABA, Chaco, Córdoba y Santa Fe son los lugares con más casos confirmados.
El gobierno de Alberto Fernández, el 25 de abril anunció la extensión de la cuarentena hasta el 10 de mayo. Definió el esquema de restricciones y un plan de fortalecimiento del sistema sanitario.
Al mismo tiempo la pandemia agravó la crisis social. Hoy en la Argentina una gran parte de nuestro pueblo hace la cuarentena con hambre, hacinamiento y sin agua potable.
Hay que tener en cuenta que con la política de Macri y su gobierno se debilitó la Salud Pública, reduciendo un 25% el presupuesto dedicado a la salud. Los hospitales quedaron sin insumos e hicieron del Ministerio de Salud una Secretaría.
En la reunión de Alberto Fernández con las organizaciones sociales en la Quinta de Olivos el jueves 23, Juan Carlos Alderete, miembro del Comité Central del PCR, coordinador nacional de Desocupados y Precarizados de la CCC y diputado nacional del PTP-PCR, planteó la preocupación por la falta de alimentos, insumos y recursos en los barrios y denunció a la patronal del frigorífico Penta por los 240 despidos. La compañera Nené Aguirre del PCR Zona Norte del GBA y de la CCC, planteó la necesidad de la emergencia en violencia contra las mujeres. El Presidente, en esa reunión, se comprometió a implementar la entrega de alimentos, obras públicas y que tomaba nota de los reclamos planteados.
Las empresas de servicio de luz y gas aumentaron hasta 500% en las facturas. Y si no se paga amenazan con cortes, pese al decreto de Alberto Fernández de suspender los cortes por 180 días.
Los trabajadores asalariados viven una gran ofensiva de despidos, suspensiones y rebajas salariales. Hay despidos en el frigorífico Penta, de trabajadores metalúrgicos, de la industria petrolera, entre otros; y rebajas salariales que están imponiendo grandes patronales que descargan la crisis sobre la clase obrera. Según el Banco Interamericano de Desarrollo la crisis será severa en lo económico y se verán las tasas de desocupación más altas de los últimos 50 años.
Un sector de monopolios imperialistas, terratenientes, bancos y otros sectores de las clases dominantes empuja levantar la cuarentena en defensa de “la economía”. El 20 de abril Mauricio Macri, Vargas Llosa y Alejandro Roemmers firman un manifiesto de la Fundación Internacional para la Libertad (FIL) con 150 personalidades de 23 países, contra la cuarentena: “Que la pandemia no sea un pretexto para el autoritarismo”; también plantean “muchos gobiernos toman medidas que restringen indefinidamente libertades y derechos básicos». Macri dijo que “el populismo es peor que el coronavirus”.
Estos sectores y sus voceros hacen campaña con el macrismo y los medios que controlan, planteando esta falsa opción de cuarentena o la “economía”. El problema principal de la economía hoy es ¿quién paga la crisis?
Por eso tiene importancia el proyecto de ley del Frente de Todos que plantea el impuesto a las grandes fortunas, porque además de cubrir una necesidad inmediata, pone en discusión ante toda la sociedad quién paga la crisis, los poderosos que controlan el Estado, o se sigue descargando sin piedad sobre las espaldas de la clase obrera, del pueblo y de la Nación Argentina.
Está en curso la disputa por la hegemonía en el bloque de las clases dominantes en la Argentina, que se agudiza con la pandemia. Con la derrota electoral de la política del gobierno de Macri, ¿cambió el gobierno o cambió el Estado argentino?
El impuesto a las grandes fortunas que plantea el Frente de Todos ya tiene sus rechazos, como adelantaron los senadores Juan Carlos Romero (Salta), Carlos Reutemann (Santa Fe), Clara Vega (La Rioja) y Lucila Crexell (Neuquén). Proponemos que el PCR y su JCR en cada una de esas provincias impulsemos una gran campaña de denuncia, para hacer conocer ante las masas sus posiciones ante la emergencia sanitaria por el Covid-19.
2. La disputa interimperialista por el petróleo
El petróleo es clave en la economía mundial. El precio del barril Brent, que el 3 de abril del 2008 llegó a 144 dólares, cayó por debajo de los 20 dólares el 23 de abril del 2020. Fracasaron los recortes acordados por la OPEP + Rusia en la producción para levantar el precio. La demanda antes de la pandemia era de 100 millones de barriles, ahora es de 30 millones.
La baja récord del precio del petróleo agrava la situación económica en Venezuela. Siendo el país con la mayor reserva de petróleo, hoy no está operando en sus pozos. Donald Trump le dio licencia a Chevron y a las empresas de servicios Halliburton, Schlumberger, Baker & Hughes y Weatherford de permanecer en Venezuela hasta diciembre del 2020. Apuntando a ahogar económicamente al gobierno y al pueblo de ese país.
Según la Base de datos de Financiación China-América Latina, los créditos a Venezuela fueron por alrededor de 62 mil millones de dólares en los últimos 10 años ¿Cómo pagará Venezuela esa deuda, cuando hoy tiene escasez de gasolina en casi todo el país?
3. El coronavirus, la crisis y la disputa en América Latina
Se agudiza la disputa interimperialista por el dominio y el control de nuestros países. Repudiamos la intervención y las amenazas de Trump al pueblo venezolano. Hasta ahora no ha podido derrocar al gobierno de Maduro, que cuenta con el apoyo principal del imperialismo ruso y el imperialismo chino.
El ministro de justicia Sergio Moro renunció al gobierno de Brasil. Su presidente Bolsonaro dijo “no tiene más compromiso con Brasil, solo compromisos personales”. Antes, Bolsonaro había hecho renunciar al ministro de Salud.
Este 24 de abril hubo cacerolazos pidiendo la renuncia de Jair Bolsonaro, que se escucharon en barrios de Brasilia, San Pablo, Río de Janeiro, Salvador, Recife, Paraná, Bello Horizonte, Porto Alegre, Cuiabá, Palmeras, Aracaju, San Luis y Florianópolis.
4. Las organizaciones de masas, del Partido y de su Juventud
Este 1° de Mayo desde el PCR reafirmamos las banderas del internacionalismo proletario y como una de sus principales tareas la solidaridad con las luchas de la clase obrera mundial en tiempos de la pandemia por el coronavirus.
El PCR y su JCR, la CCC, la FNC, Ni un Pibe Menos por la Droga, las mujeres y sus organizaciones, los originarios, estudiantes, intelectuales, trabajadores de la Cultura, avanzan en la conformación de Comités de Emergencia en todo el país, por provincias y municipios. Para esta nueva etapa de la cuarentena seguimos la pelea que venimos protagonizando por conformarlos barrio por barrio.
Por el avance del coronavirus, el dengue y el hambre en Misiones (Posadas) se conformó el Comité de Emergencia, en distintos barrios.
En Mondelez Pacheco las y los trabajadores pelean cotidianamente para que se cumplan las normas para cuidar la salud, las condiciones y su fuente de trabajo, con su Comisión Interna que es parte junto a los trabajadores del Comité de Emergencia en la fábrica.
En el Astillero Río Santiago siguen las tareas de los trabajadores reparando camas ortopédicas, y son parte de los comités de emergencia en los hospitales Cestino y Crónicos del Dique en Ensenada.
Se multiplican las necesidades y las raciones de comidas en todo el país, en todos los comedores. En La Pampa en el comedor–merendero de la CCC César Gody Álvarez se entregaron casi 400 porciones de comida. En Rosario, las y los compañeros sostienen más de 75 ollas populares. “Sin alimentos no hay cuarentena que aguante”.
Los equipos de trabajo de organizaciones de psicología social y derechos humanos, como Eatip (Equipo Argentino de Trabajo e Investigación Psicosocial), el Capítulo de Salud Mental, Derechos Humanos y Emergencias Sociales de la Asociación de Psiquiatras Argentinos y Liberpueblo trabajan solidariamente en apoyo y reflexión planteando que el distanciamiento físico no es distanciamiento social.
Es una necesidad la declaración y la implementación de la Ley de Emergencia en Violencia contra las Mujeres. Los abusos, el machismo y principalmente los femicidios siguen creciendo.
Reivindicamos el papel que juegan médicos y trabajadores de la Salud y entendemos que es necesario resolver equipos de protección que no los dejen expuestos porque están en la primera línea en un sistema de salud colapsado.
Una de las tareas urgentes que tenemos es generar las condiciones en el menor tiempo posible. Nosotros seguimos jugando políticamente en el Frente de Todos, jerarquizando la alianza con los Cayetanos, el Movimiento Evita y Somos Barrios de Pie. No ponemos en el blanco al gobierno de Alberto Fernández, pero sí decimos y discutimos lo que no estamos de acuerdo.
Es una necesidad que en el PCR y su JCR demos batalla para que se jerarquice la importancia de la organización de las masas en cada barrio, lugar de trabajo, zona agraria, colegios, universidades etc., para que avancen en su organización. Entendemos que es a través de su propia experiencia que las masas avanzarán a formas superiores de lucha.
Escribe Jacinto Roldán
Foto: trabajo solidario en barrios de Rosario