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06 de septiembre de 2020

Que los pocos muy ricos aporten alguna vez a los muchos muy pobres

Situación epidemiológica en Santa Cruz

Al jueves 3 de septiembre de este raro 2020, según datos oficiales existen en la provincia 1471 casos activos de Covid-19 en toda la provincia,

1412 son de Río Gallegos, 25 El Calafate, 15 Río Turbio, 8 Perito Moreno, 4 Puerto Deseado, 2 Caleta Olivia, 2 Piedra Buena, 2 El Chaltén, 1 de 28 Noviembre.

La situación epidemiológica actual de Río Gallegos está definida como zona de transmisión comunitaria. El Calafate transmisión local con predominancia por conglomerado, Río Turbio brote localizado, Puerto Deseado casos importados- brote localizado con 1 contacto estrecho, Caleta Olivia, Piedra Buena, 28 de Noviembre y Perito Moreno casos importados, El Chaltén casos en investigación.

La media de edad es de 37 años.  El porcentaje de ocupación de camas a la fecha, de todos los servicios es del 33,81 % en todos los establecimientos de la provincia. En Río Gallegos es de 42,85%.

El porcentaje de ocupación de camas de UTI adultos, es de 42,90% en establecimientos públicos y privados de la provincia. En Rio Gallegos es de 86%. Quedando dos camas libres de terapia en el hospital general y una de las clínicas privadas cerradas por la cantidad de contagios en su personal.

Fallecidos: el promedio de edad 65 años en base a registros SISA, 27% son mujeres y 73% hombres. Curva de Duplicación de casos al 3/9 en Santa Cruz es de 18 días. Cantidad de test realizados 8.307 desde el inicio de la pandemia.

Estos son los datos estadísticos, pero los  números son fríos si no se analizan en qué contexto se dan. La pandemia ha puesto en el tapete varios temas que o no estaban en la agenda política o se ocultaban, de los cuales varios veníamos denunciando.

Por un lado demostró la falta de política sanitaria, con un solo hospital provincial con capacidad en camas en terapia intensiva en Río Gallegos, es decir una concentración en la Capital que sumado a las distancias entre ciudades y pueblos de la provincia atentaba contra la salud de los pueblos alejados de la Capital. Por otro lado la falta de instrumentos, recursos y personal hacía que la derivación a Bs. As. era moneda corriente.

La falta de médicos, enfermeros, especialistas ya existía en un grado muy alto, la pandemia ha demostrado y puesto a la luz justamente esta falta tan importante que garantiza el funcionamiento del sistema. Esta semana hubo una multitudinaria asamblea en el Hall del Hospital Regional donde médicos, enfermeros, personal administrativo planteaban su agotamiento, reclamaban más personal, mejores condiciones de trabajo y aumento salariales. El éxodo del personal sanitario se debía y debe a las malas condiciones de trabajo y remunerativas del sector.

Esta es una de las razones principales de cómo la pandemia ha afectado tanto a Río Gallegos, justamente la falta de una política sanitaria pensada en la salud de la gente. A su vez como decía Ramón Carrillo las condiciones de vida de las personas también tiene que ver con una política de salubridad.

En Río Gallegos, Caleta Olivia, Las Heras, por ejemplo crecieron en los últimos años los barrios humildes donde no hay cloacas, agua potable, condiciones dignas de vida, hambre. Afectando obviamente el sistema inmunológico.

También la pandemia ha demostrado una provincia donde el sistema productivo es extractivo casi con exclusividad y en beneficio de un puñado de empresas extranjeras (mineras y petroleras) las cuales se enriquecen de una manera obscena mientras los grandes grupos poblacionales  caen cada vez más en la marginalidad social.

Otro caso es el sistema educativo. La pandemia demostró que la desigualdad social y el acceso a medios tecnológicos, o al manejo de ellos fueron agravados por la pandemia, con lo cual ensanchó la brecha entre los que más tienen y los que no.

En el caso del sistema educativo pasa algo parecido al sanitario; éxodo de docentes buscando mejores condiciones de vida, escuelas con falta de insumos y condiciones edilicias paupérrimas. Docentes y estudiantes que tuvieron que aprender en el corto plazo a reinventar el vínculo pedagógico.

Pero en una realidad donde el contacto no es personal, y donde solo el 35% mantiene un contacto educativo permanente en el nivel secundario, y un 65%, en el nivel primario. Ni hablar de los costos en lo que significa el nivel especial e inicial.

En una situación donde el cansancio y la alienación se ve en todos los niveles educativos, dado que las familias y los docentes son los que vienen sosteniendo el vínculo pedagógico.

El debate en la provincia entre anticuarentena y la mantención de dicha cuarentena no es tan profundo como en otras provincias, pero sí en algunos sectores abrumados ya por la situación comienzan a ser ganados para levantar la cuarentena.

Nosotros creemos que en política sanitaria algunas cosas sí hicieron bien y en otras falta mucho. Sobre todo en lo que significa las condiciones de trabajo y salubridad del personal sanitario y de todos los sectores (docentes, trabajadores privados y estatales, pequeños comerciantes, etc.) mejoras en sus ingresos para poder sobrellevar esta situación.

Por todo lo antes dicho es claro que antes, durante y después de la pandemia es necesaria una política que resuelva las necesidades del pueblo y no de un grupo concentrado extranjero.

Que es necesario y urgente un impuesto de emergencia a las grandes fortunas para que con esos dineros se destrabe, se mejoren  las condiciones de salud, educación y vivienda  de la mayoría de la población. Que los pocos muy ricos aporten alguna vez a los muchos muy pobres.

 

PTP Santa Cruz