La provincia de Salta, siguiendo las políticas llevadas a cabo por los sucesivos gobiernos de la Argentina, ha sufrido una fuerte fragmentación del sistema de salud en los últimos 25 años. Para entender la situación que se atraviesa hay que tener en cuenta las políticas de desinversión, tercerización y la reducción del 25% por ciento del personal de salud, en el periodo previo a la pandemia de Covid-19. Frente a este escenario Noemí comenta “Desde el gremio y el Frente Intersindical de Salud venimos denunciando esta situación desde el inicio de la pandemia. El incumplimiento de las paritarias negociadas a principio de año y la pésima gestión del Ministerio de Salud del gobierno de Sáenz ha provocado esta situación que agobia al pueblo y al personal de salud. Lo indignante es que el gobierno ha recibido partidas millonarias desde Nación, tuvieron seis meses para equipar hospitales, comprar insumos y generar nuevos espacios de cuidados para recluir a los pacientes, pero han preferido actuar con indiferencia y abandono. Dicha gestión le ha costado la cartera a la ex ministra de Salud Josefina Medrano, por lo que ahora estamos a la espera de poder negociar con el nuevo ministro, el doctor Juan José Esteban, quien es un hombre que proviene de la salud pública, para ver si se pueden generar mejores condiciones para enfrentar esta la pandemia”.
Sobre la situación de los profesionales de la salud Noemí agrega que “El equipo sanitario está cansado, enfrenta la pandemia con un 25% menos del personal necesario, que era una falencia previa. Los compañeros prácticamente viven en el hospital, y actúan a partir de un fuerte compromiso con el pueblo y la salud pública, porque hay que levantar que de trabajar en el sistema privado ganarían sueldos muchísimos más altos y no se verían en los aprietes que enfrentan a diario. Los compañeros se sienten muy solos, el gobierno nos ha dejado pilas frente a esta pandemia, porque no contamos con los insumos de protección necesarios para cuidar nuestra salud, lo que ha provocado una gran cantidad de casos dentro del equipo, sumado a los maltratos por parte de pacientes que ante a la desesperación, se desquitan con ellos. No se les puede pedir que se inmolen por la salud pública si nadie da respuestas. Venimos denunciando y exigiendo respuestas, ¿Qué hicieron con las tres partidas millonarias destinadas a reforzar el sistema sanitario? La peor situación la atraviesa el norte de la provincia, porque en esa zona, en algunos parajes o pueblos, se cuenta con un solo médico de cabecera que enfrenta la situación como puede”.
Para finalizar Noemí comenta: “ahora con la vuelta a la fase 1 se está intentando contener un desborde que era completamente evitable. Pero de no haber cambios concretos en la política llevada a cabo, y seguir ignorando los reclamos del personal de salud, a los muertos los vamos a poner el equipo de salud, y frente a ello, el gobierno va a tener que hacerse cargo y pagar el costo político de no cuidar a quienes nos cuidan”.
Hoy N° 1833 23/09/2020
