La oligarquía terrateniente salió con los tapones de punta. Ya no solo no quieren liquidar sus exportaciones para así condicionar al gobierno, sino que salieron fuertemente a cuestionar la Ley de Fuego y montaron un show mafioso y xenófobo frente a la Estancia Casa Nueva de Dolores Etchevehere.
La Sociedad Rural, en unidad con el macrismo, se opone a la sanción de la “Ley de Protección de ecosistemas víctimas de incendios”, que el Frente de Todos presentó en el Congreso para que no se pueda cambiar el uso del suelo de los terrenos incendiados y terminar así con los incendios intencionales. Hay que decir que el mapa de los fuegos coincide, casi perfectamente, con el mapa del agro negocio. Parece que como dice el dicho, había que pegarle al chancho para que salte el dueño.
Repudiamos la convocatoria reaccionaria frente a la estancia Casa Nueva en Santa Elena (Entre Ríos), de quienes hablan de “defensa de la propiedad privada”. Pero lo que moviliza a esta concentración no es eso que dicen, sino el odio de clase de parte de un sector que es dueño de gran parte de las tierras del país y creen que por eso son dueños de todo, porque la verdadera situación es que una de las herederas de las tierras, Dolores Etchevehere, donó su parte al Proyecto Artigas, haciendo uso de su legítimo derecho, por lo tanto no hay usurpación de tierra. Nos solidarizamos con los integrantes de este proyecto que hoy están en el lugar acompañando a Dolores y han empezado a trabajar la tierra.
En la Argentina se debe discutir profundamente la tenencia y el uso de la tierra. El 1% de las explotaciones agropecuarias controla el 36 % de la tierra. Mientras que el 55 % de las chacras (las más pequeñas) tiene solo el 2 % de la tierra. En 30 años desapareció el 41% de las chacras y otras actividades agropecuarias, de ahí que la tierra se haya ido concentrando en pocas manos. Durante este tiempo se promovió la agricultura sin agricultores, pero para reactivar la economía necesitamos una agricultura con agricultores.
Es una necesidad para el desarrollo nacional democratizar la tenencia de la tierra, creando por ejemplo un millón de chacras, dándoles tierra a las y los campesinos sin tierra, a los pueblos originarios y a la juventud.
Hay que avanzar en resolver acceso a la tierra para producir y para vivir. Es una urgencia en la Argentina. Por #TierraTechoTrabajo para nuestro pueblo.
Escribe Juan Carlos Alderete, diputado nacional por el PTP en el Frente de Todos