El compañero Penayo comienza contando que “Es preocupante lo que está pasando dentro de la fábrica con el tema de los rebrotes de coronavirus. El crecimiento que hay afuera se expresa también internamente, hay preocupación en las compañeras y los compañeros. Ya hay 25 contagios nuevos en los últimos días.
“La empresa está produciendo. Hasta antes de este rebrote la empresa tenía programada la producción hasta fines de agosto. Ahora hay que ver cómo se baraja con este nuevo rebrote y si mantienen los ritmos de producción.
“Con relación al Covid, una discusión con la empresa es el tema de los criterios, de los protocolos fundamentalmente. Peleamos que funcione la comisión de crisis que tenemos en la planta. Nosotros, como todo el año pasado, ponemos por delante la seguridad y la salud de las trabajadoras, los trabajadores y nuestras familias. Más ahora con estas nuevas cepas que parece que son más contagiosas”.
Paritarias
“Otra pelea es el tema del salario –dice Penayo-. Estamos en medio de la discusión paritaria en el gremio de la Alimentación, que tenía una cláusula de revisión. El año pasado se cerró en un 32% y se tiene que ajustar lo que falta por la inflación del año.
“Estamos planteando cuánto tiene que estar ganando un trabajador, como vienen haciendo los compañeros del Astillero Río Santiago. Ellos habían calculado el mes pasado que un trabajador tendría que ganar 137 mil pesos, con lo que se cubría la canasta familiar. Hoy creo que está más que eso, porque la inflación ya aumentó un 4% en marzo y fundamentalmente aumentaron los alimentos. Así que ya estamos en más 140 mil pesos la canasta plena que tendría que estar ganando un trabajador con una familia tipo (esposo/a y dos hijos).
“Ante esa situación, en esta instancia planteamos por lo menos empatar a la inflación que se calcula de un 48%, y no sé si no nos quedamos cortos. Para llegar a un 48% nos está faltando un 16%, del 32% que se firmó el año pasado.
“Se han hecho varias reuniones con las cámaras empresarias, que no quieren reconocer ni siquiera la revisión. Hay un forcejeo como todos los años. El jueves pasado el STIA impulsó una caravana y bocinazo a las cámaras empresarias. Si los empresarios no aflojan vamos a pelear estado asambleario y movilizaciones en toda la industria.
“Hay bronca en las compañeras y compañeros, porque te dicen “nosotros en el marco de esta pandemia estuvimos produciendo. La alimentación es una de las industrias que no ha parado la producción”.
Las cámaras y empresas como Mondelez manifiestan que no están en condiciones de dar aumento salarial, porque dicen que tienen entre un 30 y un 40% de la dotación de sus empleados que están licenciados a los que le están abonando el salario y eso les genera pérdidas. Y ahí está la discusión.
“Pero lo que ellos no dicen es que el gobierno está dando mucha ayuda. Mantienen subsidios a las pequeñas empresas y entiendo que a algunas medianas les dan créditos sin interés.
“No es la misma situación de los monstruos como Mondelez, Arcor, Pepsico, Molinos Río de la Plata, Nestlé y otros gigantes de la alimentación. Ellos están en condiciones de poder bancar.
“En Mondelez Victoria desde la Interna tuvieron que ir a bloqueo de portones para que la empresa corrija malas liquidaciones. Y sabemos que el monopolio yanqui quiere ajustar achicando los puestos de trabajo.
“Porque acá la discusión es quién va a poner la plata, quién va a pagar la crisis sanitaria y la crisis económica. Creo que ese es uno de los debates que tenemos que dar en todos lados.
Si no hay avance en las paritarias, se va a profundizar el plan de lucha que maneja la FTIA. Nosotros vamos a seguir la pelea por la unidad de todos los sectores para enfrentar esta nueva ola de la emergencia sanitaria, para no perder en los salarios y mantener la fuente de trabajo”, finaliza Penayo.
Hoy N° 1859 14/04/2021