La resolución del Comité Central de integrar el Frente de Todos sin formar parte del gobierno y encabezar la solidaridad y los reclamos por la emergencia del Covid 19, que contiene la alimentaria, laboral y de violencia de género, nos ubicó en un torrente que facilitó las iniciativas de colecta del Partido y la JCR. Enfrentamos las propuestas políticas del macrismo con nuestras propuestas de salida a la crisis, para dar solución a los reclamos populares, y con la experiencia acumulada en la colecta del 2020, superamos exitosamente los objetivos planteados.
Recaudamos un 44% más que el año pasado, manteniendo el poder adquisitivo, con cotizaciones importantes de los afiliados y con un ¡30% más de aportes! El aumento del número de aportes es significativo y tuvo que ver con que la colecta fue más pareja.
El año pasado las ollas se articulaban con la cuarentena y eran una forma de defenderla frente a la oposición de derecha. Este año las ollas se mantuvieron como una necesidad frente al hambre y fue necesario articularlas con la campaña por la vacunación, junto al reclamo que provean de vacunas los laboratorios que la fabrican en el país y que el Estado acelere la vacuna nacional.
La segunda ola del Covid pegó fuerte. El Partido sostuvo la solidaridad y los reclamos apretando los dientes, frente al dolor de decenas de camaradas y compañeros de la CCC fallecidos en la primera línea. La capacidad organizativa que fueron adquiriendo los comités de zona y las comisiones nacionales, pese a cuadros veteranos limitados por su vulnerabilidad frente a la pandemia, y mecanismos de control más colectivos permitieron una realización con buen ritmo.
Junto a la fuerza desplegada en las ollas, sobre todo de centenares de mujeres y los reclamos de los trabajadores de la salud, este año se unió a las luchas salariales, desde aceiteros y en paritarias en Mondelez, que se articularon con rifas motorizadas desde las fábricas.
En recursos mantuvimos la articulación con integrantes de una peña y algunos pequeños empresarios, llevando solidaridad a ollas, lo que abrió vínculos que rompen años de trabajar la misma red, y obligó a confrontar con ideas de derecha que coexisten junto a su solidaridad en estos sectores, a los que nos cuesta llegar.
La posición del Partido sobre la licitación del mantenimiento de la navegabilidad del Paraná y el desarrollo de la misma en Santa Fe, el libro de Luciano Orellano, junto a las posiciones en el ARS y las iniciativas de los puertos desde el Chaco hasta Ushuaia, así como el balance del impuesto a las grandes fortunas, permitió instalar debates en la política nacional, sobre cómo articular la pelea por la pandemia y la salida de la crisis con un rumbo soberano. Estuvieron articulados con los videos e iniciativas de colecta, posibilitando llegar con nuestras propuestas a la clase obrera y el pueblo.
Un rasgo que se repite desde hace años es el entusiasmo con que toman en sus manos la colecta numerosos compañeros, que no integran las filas del Partido y que en la campaña lo hacen suyo, con la rifa en la mano visitaban las viviendas vecinas en los barrios para ofrecerlas. Decenas de miles de bonos y rifas con los símbolos del Partido y sus consignas, quedan hace años en los hogares populares y van formando una corriente de opinión y de cariño a favor del Partido. ¿Lograremos que esos miles se integren orgánicamente a nuestras filas?
Se mantuvieron formas nuevas surgidas en la colecta anterior, como los festivales artísticos virtuales, que el frente cultural impulsó. Se desarrollaron bingos virtuales. Se hicieron numerosas charlas y videos zonales. Lectores de la página web del extranjero aportaron. Son sólo algunas expresiones de la actividad desplegada por el Partido y la Juventud. Un registro parcial a completar, pero que refleja una hermosa y aguerrida colecta.
Comisión Nacional de Finanzas
Hoy N° 1877 18/08/2021