Con la indignación que produce, vamos a desentrañar la gran mentira de Macri en medio de la campaña, tiene el tupé de decir que el gobierno actual endeudó más al país que el suyo. Es una provocación que tiene la inteligencia de obligar a girar la campaña de Juntos, o como se llame esa derecha que él agrupó, alrededor de sus propios dichos. Y lo está logrando.
Es una mentira flagrante, cuando Macri asumió la deuda pública total equivalía a 230 mil millones de dólares, cuando se fue a 326 mil millones de dólares, pero estos 96 mil millones no es que “equivalían a” sino que fue toda en dólares con agentes externos. Cuando él llegó no teníamos deuda con el FMI, era cero dólar, y nos dejó con esta carga de 44 mil millones con el FMI, y si fueron sólo 44 mil es porque logramos sacarlo antes, sino esa hubiera llegado a 56 mil millones, con lo que implica tener al FMI soplándote la nuca.
Alberto Fernández no tomó ni podía tomar deuda en dólares, porque el propio Caputo, cuando Macri lo mandó a contratar el último pagaré de 10 mil millones de dólares en enero del 2018, volvió y dijo “en el sector privado ya nadie nos presta más nada”. Pero lo peor es que de ese endeudamiento, 86 mil millones de dólares se fugaron del país. Y acá está la diferencia entre una deuda en dólares y una deuda en pesos. Nadie se fuga en pesos, los dólares son los que se fugan porque constituyen capital fuera del país. El tomó deuda para la fuga. Estos datos los tiene el Banco Central.
El resto, unos 10 mil millones son los que fueron a cubrir déficit fiscal, que poco y nada fue a la obra pública, porque se la hacía tomando deuda a futuro, con los créditos chinos, con el Banco Mundial, con los europeos. Casi la única que pagó el Estado fueron esos 400 millones de dólares que enterró al pedo en esos túneles del soterramiento del Sarmiento, una obra para favorecer a la empresa italiana Ghella, con la que él logró controlar el grupo SOCMA cuando hizo el entubamiento del arroyo Maldonado.
Agotada la deuda privada, como dijo Caputo, fue el FMI que vino a tirar estos 44 mil millones de dólares, justamente para garantizar que se consume la fuga de los fondos que aún estaban en pesos, porque el grueso de los dólares del FMI son los que garantizaron que los fondos buitre y los fondos golondrina que Macri mantenía cebado con las Lebacs se fueran del país.
De Renzis: Voy a agregar dos datos. El primero, es que simultáneamente Caputo le dijo a la sociedad argentina “qué importante es el crédito que tenemos que nos prestan a 100 años” y endeudó el país en 100 años, donde el dinero que se recibió se cubre en 10 y 90 son de intereses. Por el otro lado mandaron el oro a Londres para garantizar este nuevo endeudamiento. Por lo tanto, no solamente miente Macri sino que debería el gobierno nacional producir mediante denuncia en la fiscalía la acción inmediata para que devuelvan el oro que está en Londres y para que Caputo dé explicaciones del endeudamiento a 100 años.
Arnoldo Gómez: …para que se investigue, como se mandó a pedir, quiénes fueron los que fugaron los dólares, hay que reclamar…
De Renzis: Tienen la lista y no la hacen pública.
Arnoldo Gómez: Exactamente, ahí es donde pega la declaración de Macri, porque obliga a que todos los que se han beneficiado con esa fuga pasen a apoyar sus declaraciones y los que empujan al gobierno a no actuar para que devuelvan el dinero quedan necesariamente callados la boca.
Entonces, en el establishment la declaración de Macri tiene un gran impacto, y no hay que subestimarla. Tiene un impacto para hacer girar la campaña alrededor de él como el líder audaz del establishment.
Es que el gobierno de Alberto Fernández no se endeudó, entre otras cosas porque pagó de intereses entre los años 2020 y 2021 más de 5 mil millones de dólares cada año, para no incrementar la deuda y porque es lo que le reclamaron los bonistas y el FMI como condición para entrar en la negociación. Este fue el gran error del gobierno.
De Renzis: Además hubo una violación de la carta orgánica del Fondo Monetario y la gerente anterior fue presionada por el secretario del Tesoro norteamericano porque Trump quería que ganase las elecciones Macri y por eso vino ese dinero.
Arnoldo Gómez: Por eso esa deuda no se tenía que pagar sin investigar. Si estos 10 mil millones de dólares que el gobierno de Alberto Fernández destinó a “la buena fe” para abrir las negociaciones, si las hubiera invertido en dar satisfacción al pueblo y, por ejemplo, acelerar una vacuna del Estado contra el Covid o desarrollar los ferrocarriles, esta derecha no tendría ningún margen electoral, y la crítica caería en el vacío. Fue un error. No se debe pagar un dólar más hasta que se investigue, hacer que devuelvan los que fugaron los dólares, para no tener que generar tampoco más deuda en pesos, desarrollar proyectos soberanos y dar satisfacción al pueblo que siempre responde con lealtad.
Esto que dijo Macri impacta en los sectores que también hacen de novio con el gobierno, pero tienen pánico al default y presionaron al gobierno para que entre en estas negociaciones como, por ejemplo la “mesa de la agroindustria”, y no está bueno haber dejado al frente de la empresa quebrada a los Vicentin, ni haberle dado de regalo la inauguración de obras en la aduana de General Deheza que se le dio a Urquía la semana pasada, porque pese a “la buena fe” en la negociación para no ir al default y a estas concesiones, guardan silencio hipócrita frente a las declaraciones de Macri y las dejan ir.
Hay que desnudar esta mentira de Macri para que no vuelva ni él ni Juntos, y para avanzar en suspender estos pagos al FMI.
