Cada 1° de octubre se celebra en China la fundación de la República Popular en 1949. Pero China ya no recuerda con orgullo la revolución que permitió esta fundación. Este año, en coincidencia con el Día Nacional de China, el ejército envió 38 aviones cazas a violar el espacio aéreo de Taiwán. Fue un nuevo récord de 149 vuelos durante cuatro días de hostigamiento militar. Durante este año, China violó el espacio aéreo de Taiwán en 198 ocasiones. El diario oficial propagandista del PC Chino escribió que estas operaciones son para familiarizarse con las condiciones del campo de batalla. Especificó que una vez dada la orden de ataque, los pilotos chinos podrán luchar como ‘veteranos experimentados’. Y agregó que esto es «un fuerte aviso a los secesionistas taiwaneses y a los países extranjeros que les apoyan».
Estados Unidos le pidió a China “cesar su presión militar sobre Taiwán” y agregó que tiene un “compromiso con la seguridad de la isla, después de que durante muchos años hayamos trabajado por la paz y la estabilidad en la zona”.
La presión china sobre Taiwán aumentó desde la elección en 2016 de la presidenta Tsai Ing-wen, que considera que la isla “ya es independiente”. El gobierno de Taiwán pidió la aprobación de un presupuesto especial de 8.600 millones de dólares para comprar armamento, sistemas antibuque y misiles supersónicos. El ministro de Defensa de Taiwán, Chiu Kuo-cheng, dijo que China podría estar preparada para lanzar una invasión de la isla en 2025.
En la zona también realizaron ejercicios de entrenamiento buques de EEUU, Reino Unido, Japón, Australia, Canadá y los Países Bajos, incluidos tres portaaviones. Un submarino yanqui de propulsión nuclear, el USS Connecticut, chocó con un objeto sumergido en el mar de China meridional. Varios marines a bordo resultaron heridos en el accidente. La marina yanqui no reveló si el choque fue accidental, o un ataque chino. El submarino se encontraba de incógnito en la región.
Putin, el presidente ruso, dijo que China no necesita usar la fuerza para apoderarse de Taiwán. Y puntualizó «Al aumentar su potencial económico, Beijing puede implementar sus objetivos nacionales. No veo ninguna amenaza militar. La posición de Rusia se basa en el hecho que necesitamos dar una oportunidad a todos los países de la región, sin interferencia de potencias no regionales”.
Las dos principales potencias imperialistas, Estados Unidos y China, están intentando organizar un encuentro virtual entre los presidentes de ambos países para fines de este año.
El presidente yanqui, Joe Biden, cambió el eje de la política nacional de EEUU, alejándose de las guerras y centrándose en la disputa con China. En este sentido, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) yanqui creó un centro de misión para China, tras determinar que China es la mayor amenaza a largo plazo para Estados Unidos.
Hoy N° 1886 20/10/2021