Los trabajadores del Lavadero Virasoro, llevan adelante un paro por tiempo indeterminado en reclamo de la reincorporación de 41 compañeros despedidos, aumento salarial para cubrir la canasta básica y mejores condiciones de trabajo. Desde que la justicia falló para que desalojen la empresa que tenían tomada, se instaló una carpa en la puerta de la misma. Mientras tanto, la patronal nunca se presentó a dialogar.
El 11 de julio a la madrugada, con un operativo enorme del Cuerpo de Infantería, el Comando Radioeléctrico Seccional 18 y la Policía Provincial, se intentó desalojar a los trabajadores por la fuerza. Hubo balas de goma, perros y golpes con cachiporras. Los obreros y algunos sectores como los estudiantes de la FUR que llevaron su solidaridad, resistieron la represión y no se movieron del lugar. Luego de esto, las fuerzas represivas continuaron circulando en forma permanente, incluso móviles sin patente se detienen en el lugar.
El mismo día se realizó una asamblea multisectorial en la puerta de la empresa, a la que asistieron varias organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos, como la CCC y el PCR. En la asamblea los trabajadores decidieron por unanimidad continuar el paro por tiempo indeterminado hasta que la empresa reincorpore a todos los compañeros. “Los despedidos no se negocian porque nadie negocia con el hambre de su familia”, afirmaron los delegados de esta empresa dedicada al lavado y lijado de prendas de jeans para grandes marcas como Levi’s, Bensimon y A.F., entre otras.
Se volanteó la empresa Vira Offis, perteneciente también al Grupo Virasoro del empresario Jorge Guidetti. Los trabajadores de esa empresa decidieron realizar en el momento un paro de actividades en solidaridad con los obreros. También se realizó el sábado pasado una peña solidaria para recaudar para el fondo de huelga en el Sindicato de Prensa.