Roxana nos cuenta que, debido a la pandemia tuvieron que postergar los congresos, por lo que abordaron la memoria y balance del 2019, 2020 y 2021 todo junto. “El congreso se hizo en dos partes. Se inicia con el congreso ordinario, en el que se hace el balance político, cómo pusimos el sindicato a disposición de todo lo que fue la lucha contra la pandemia y por todos los que tenían necesidades, colaborando con comedores y merenderos, y también para enfrentar el costo de vida, que en nuestra provincia es particularmente alto. Los estatales veníamos con una paritaria, que ATE no firmó en el 2020, en la que perdimos un 14% del valor del salario. Esto caló profundo en el conjunto de las trabajadoras y trabajadores, y ni hablar de los municipales, que están precarizados.
“Funcionamos con una presidencia honoraria, de nuestras compañeras y compañeros fallecidos en estos años. El propio congreso resolvió quienes me acompañaron en la presidencia efectiva, la primera que me tocó en esta gestión. Hicimos un emotivo homenaje a tres compañeras históricas de ATE, Dora, Mary y Cristina, que nos ayudaron a nosotras, cuando entramos al sindicato, a refundarlo y a formarnos en política, junto con Ricardo Araujo, nuestro ex secretario de ATE, hoy secretario de la CTA Autónoma de la provincia.
“Se dio todo un tiempo para la lectura de la memoria y balance, y que puedan pedir explicaciones de todo lo actuado por la dirección del gremio. Además, nuestra memoria y balance está a disposición de todos los afiliados y afiliadas en cualquier momento.
Entre los puntos centrales del balance, Rechimont destaca: “En este período, durante la pandemia tuvimos ingresos a planta permanente, tanto en los municipios como en la provincia. Estuvimos con un sindicato abierto las 24 horas, en particular con los integrantes del Cymat (Condiciones y medio ambiente del trabajo), los que hicieron los protocolos. Nunca paramos la actividad gremial, a pesar de las condiciones de la pandemia. Nuestro sindicato ha estado a la altura de las necesidades de las y los trabajadores y del pueblo.
“En unidad sindical pudimos dar una lucha para no perder contra la inflación en las paritarias.
Nosotros planteamos que buscamos la más amplia unidad, con los movimientos sociales, políticos y gremiales, en la calle, primero contra el ajuste y la entrega del gobierno de Macri, y después planteando nuestra disconformidad con el acuerdo con el FMI, porque entendemos que esa deuda es fraudulenta y se tiene que investigar. Que no puede ser que siempre el pueblo, y los trabajadores y trabajadoras, paguemos la fiesta de unos pocos. Y que no vamos a permitir nunca más el desmantelamiento que hubo en tiempos de Macri.
“Tendremos todas las diferencias y haremos todas las críticas a este gobierno del Frente de Todos, pero la derecha no tiene que volver a gobernarnos nunca más. Por eso es que salimos a la calle a reclamar. Porque tenemos la conciencia de saber que tenemos que marcar el rumbo a las políticas del gobierno. Si no marcamos nuestras agendas, los gobiernos no las van a implementar. Pero no es lo mismo salir a marcarle la agenda a un gobierno que tiene políticas públicas pensadas para el pueblo, que a aquel otro que destruye esas políticas, como pasó con el macrismo”.
Contra la precarización laboral y la violencia de género
Consultada por el crecimiento del gremio, la compañera responde: “En este período, ATE tuvo un aumento y una masividad de afiliaciones en muchos sectores. Nosotros, por estatuto y por línea política, nucleamos a los trabajadores precarizados en todos los niveles del Estado, nacional, provincial y municipal. Ante la falta de contratos como corresponde por convenio colectivo de trabajo por parte de los gobiernos, tenemos muchísima precarización laboral. Somos de las pocas provincias que hemos logrado dos leyes contra la precarización, desde el menemato hasta la actualidad, pero eso no da respuesta a la totalidad de trabajadoras y trabajadores.
“El crecimiento en el sindicato tiene que ver con el crecimiento de lo que atraviesan los compañeros y compañeras, no sólo por la precarización, sino por la violencia en los lugares de trabajo.
“Tenemos desde hace muchos años un departamento de género y diversidad, y hemos trabajado arduamente junto a la Secretaría de Género y Diversidad de la CTA A. Hemos podido modificar situaciones de compañeras víctimas de violencia, en la familia y en el trabajo. El convenio 190 de la OIT vino a darnos argumentos, pero entendemos que faltan implementar políticas en los lugares de trabajo para que se erradique esta violencia.
“Tenemos un caso que es único en el país, y dicen que es único en el mundo, no lo sé. Logramos, a través de una ordenanza en el municipio de Santa Rosa, el ingreso de una víctima en el puesto de trabajo de su agresor. Porque peleamos contra el Poder Judicial para lograr condenas ejemplares para los violentos y los femicidas, pero cuando esto sucede, las víctimas o los hijos de las mujeres asesinadas, quedan desprotegidos económicamente. Y lo que pasaba en la provincia es que los violentos iban presos, pero seguían cobrando su sueldo. Logramos este puesto de trabajo para una víctima en la capital, y ahora estamos con el objetivo de lograrlo en toda la provincia”.
Objetivos inmediatos
Finalmente, nos plantea Roxana: “Los objetivos más importantes que salieron del congreso de ATE es seguir luchando contra la precarización laboral, en los municipios. Vamos en camino de un plenario provincial de trabajadores y trabajadoras municipales, porque el contexto en que se encuentran es terrible. Queremos que los compañeros y compañeras de Salud Pública que ingresaron por pandemia tengan estabilidad laboral.
“Se está por inaugurar un hospital de magnitud en la capital, y sabemos que hace falta un gran recurso humano para ponerlo en funcionamiento, con un servicio digno para el pueblo y una salud pública de calidad. Por eso necesitamos que esas trabajadoras y trabajadores estén como corresponde. Esto tiene que ver con estudiantes de enfermería o de medicina, para que tengan oportunidad de trabajar en ese hospital. Y peleamos también por una inyección de trabajadoras y trabajadores administrativos y servicios generales, recurso humano que se ha resentido, por la tercerización.
“Además, vamos a impulsar una campaña para que se aplique efectivamente ese convenio 190 de la OIT para erradicar todo tipo de violencias en el mundo del trabajo. Tenemos una guía de procedimientos para atención a las víctimas, que está hace años en el ministerio y no se activa.
Otro punto importante es el pase a planta de la última ley que logramos contra la precarización laboral en la provincia, la 2871 ley de Planta Permanente con jornada reducida, en la que nos quedan para pasar a las leyes de jornada completa en la 1279 de salud y 643 empleo público, a compañeras y compañeros de la salud y auxiliares de educación”.
Hoy N° 1912 11/05/2022