El jueves 5 de mayo detuvieron a Gladis Favretto, y a dos de sus hijos. Gladis es dirigente de la CCC, Corriente Clasista y Combativa del Chaco. Se realizó un allanamiento en su domicilio, solicitado por la Fiscalía Nro. 3, Rosana Soto al Juzgado de Garantías Nro. 1. El motivo, expresaron los uniformados, era la búsqueda de dos palas y una manguera nivel. Sustrajeron sólo dos palas.
Gladis explicó que son elementos de trabajo de la Cooperativa Tierra, Techo y Trabajo LTDA., que es la herramienta legal con la que trabaja la organización en los barrios de Resistencia y en toda la provincia.
En el allanamiento hubo violencia de más de 20 policías, que ingresaron con amenazas y golpes a los jóvenes mientras su madre les pedía que “los lleven pero no les peguen”. El resultado fue que la golpearon también a ella (por “entorpecimiento del allanamiento”) y la trasladaron a la comisaría segunda, mientras que los hijos permanecieron en la comisaría octava.
Ante este atropello, la CCC, FNC y el Movimiento de Naciones Pueblos Originarios en Lucha, el PTP-PCR, rápidamente se organizaron en distintas localidades del interior yendo a las rutas, y otros compañeros frente a la comisaría octava en Resistencia, recibiendo solidaridad de organizaciones sociales, políticas, de mujeres, etc. La Mesa Nacional de la CCC se pronunció en repudio y alerta nacional, convocando a una marcha a la Casa del Chaco en Buenos Aires para el lunes 9.
«La política de persecución policial, las causas armadas y la violencia hacia los pibes de los barrios, es moneda corriente. Nosotros peleamos para salir de la droga, no hay ningún lugar de internación pública para los pibes y pibas en situación de adicciones. Nosotros tenemos una Casa de Atención y Acompañamiento Comunitario que se llama Ni un Pibe Menos por la Droga, donde hacemos esfuerzos para recuperarlos, mientras la policía, en lugar de buscar a los grandes distribuidores, persigue a los pibes y a los hijos de dirigentes sociales. No vamos a permitir esta injusticia», expresaron los manifestantes en la movilización frente a la comisaría octava.
Para horas del mediodía del viernes 6, gracias a la respuesta de las organizaciones y la solidaridad de amplios sectores, se logró la liberación de Gladis y por la siesta la de sus hijos.
La juventud de los barrios continúa en riesgo. La persecución claramente es dirigida a los hijos de dirigentes que luchan contra el flagelo de la droga y contra toda injusticia.
«Impulsaremos una gran movilización contra los fiscales y jueces que persiguen a los jóvenes en los barrios y cajonean, cierran o demoran casos de violencia institucional, femicidios, gatillo fácil, o no avanzan con los grandes distribuidores, a la vez que exigiremos al gobierno la concreción de Centros de Abordaje con internación para jóvenes en situación de adicciones y contra las cúpulas policiales que usan brutal violencia como moneda corriente para las detenciones y en las Comisarías», finalizaron.
CABA. Marcha a la Casa del Chaco el 9 de mayo
Hoy N° 1912 11/05/2022