A fines del año pasado asumió como presidente de Ecuador Daniel Noboa, empresario representante de la derecha, luego de ganar el balotaje. Asumió por 17 meses, pues Guillermo Lasso (anterior presidente) llamó a elecciones después de declarar la “muerte cruzada” y disolución del Congreso Nacional, para evitar que se lo enjuicie políticamente. Hubo importantes luchas populares para que se vaya Lasso, y se presentaron a elecciones agrupaciones de izquierda que no pasaron al balotaje.
El contexto de inseguridad es muy preocupante. Noboa prometió ponerle un punto final. Pero el 8/1 el narcotráfico lanzó una escalada de violencia sin precedentes, con la fuga de la cárcel de “Fito” (Adolfo Macías), líder del grupo Los Choneros. El gobierno declaró el estado de emergencia, y se desencadenó una ola de actividad criminal: vehículos incendiados, explosiones de bombas, secuestros de policías, detención de funcionarios penitenciarios, intentos de saqueo y el secuestro de instalaciones de TC Televisión, en Guayaquil. Otro líder narco, Colón Pico (líder del grupo Los Lobos), se fugó de otro penal junto a 40 presos. El gobierno sacó otro decreto declarando el conflicto armado a nivel nacional, llamando a las fuerzas militares al combate contra los terroristas. Las organizaciones gubernamentales y políticas tradicionales mostraron completo apoyo, y el presidente de la Asamblea Nacional aprovechó la situación para anunciar que aprobarán indultos y amnistías para miembros de las fuerzas policiales que enfrentan procesos judiciales.
Hubo una intensa ofensiva de desinformación en las redes sociales, que hizo entrar en pánico a la población y difundiendo la sensación de que la situación era incontrolable.
Los países imperialistas no dejaron pasar la oportunidad. Estados Unidos expresó su voluntad de “colaborar”. Durante el gobierno de Lasso se firmó un acuerdo para permitir que tropas yanquis operen en Ecuador en condiciones de conflicto.
Para entender mejor estos sucesos, extraemos partes de la declaración de la Secretaría del CC PCMLE del 11 de enero.
“… Daniel Noboa habló del Plan Fénix para enfrentar el crimen organizado y garantizar la paz en el país… Sin embargo, no realizó nada, hasta el punto de no saber si este plan existe o no… La población vive atrapada por el miedo. Ecuador es hoy uno de los países con mayores índices de violencia criminal en el mundo, así como uno de los países con mayores índices de homicidios…
… Hay evidencia de la penetración del narcotráfico y el crimen organizado desde el gobierno de Rafael Correa hasta la actualidad… El caso Metástase muestra la vinculación de jueces, jefes de la Policía y del Ejército, abogados, empresarios y líderes políticos de derecha con el narcotráfico. El presidente del Consejo de la Judicatura está preso junto a otras 40 personas… hay pruebas de comunicaciones donde se denuncian pagos a jueces para obtener la libertad del exvicepresidente de Correa, Jorge Glas … También se aconseja “comprar” instituciones del Estado (como aduanas), porque tienen relación con un alto funcionario del gobierno de Guillermo de Lasso que las “vende”.
Luego analiza el impacto de la situación sobre las ideas del pueblo y agrega “las fuerzas políticas burguesas y los empresarios se suman hablando de “unidad nacional”… y esconden su intención de imponer una política neoliberal, afectar los derechos de los trabajadores y del pueblo y afectar aún más sus condiciones de vida… dicen que es necesario sacar subsidios a combustibles para financiar la lucha contra el narcotráfico… Como parte de su proyecto neoliberal quieren hacer una consulta popular sobre distintos temas: minería en beneficio del capital internacional; contratos por horas, que precarizan el trabajo; arbitraje internacional para resolver disputas sobre cuestiones de inversión extranjera… La embajada yanqui está tratando de implementar el “Plan Ecuador”… Para Noboa, el momento actual es muy importante: puede crecer en imagen o puede colapsar. Algunos analistas dicen que si “gana la guerra” garantizará su reelección.
“Condenamos los actos de violencia actuales y exigimos que el Estado garantice la vida y la seguridad de la población. Llamamos a la unidad del pueblo para enfrentar la situación, enfrentar colectivamente los problemas, organizar la solidaridad para proteger el barrio, lugar de trabajo o actividad; levantamos las banderas en defensa de la vida; Exigimos medidas concretas para que sean eficaces en la lucha contra la delincuencia; El gobierno debe garantizar la seguridad de los hospitales y servicios públicos… Los problemas del pueblo son de seguridad, educación, salud y empleo. Si no se resuelven, el delito persistirá; Es necesario dar una respuesta estructural; sabemos que los resultados no son inmediatos…” y enumera propuestas para que lleve a cabo el gobierno.
Y cierra “El narcotráfico lava plata, ¿Qué está haciendo la UAFE (Unidad de Análisis Económico y Financiero) para controlar esto? Los que aparecen como líderes de las pandillas no son los cabecillas, sino sus operadores. Quienes dirigen todo esto están en los niveles más altos; Hay que alcanzar y capturar a las verdaderas cabezas…
El gobierno convocó a una consulta popular que, en principio, no nos oponemos. El pueblo debe participar en las decisiones fundamentales para el país, por eso proponemos que se sometan a consulta otro tipo de preguntas, como si se declara o no la emergencia de manera segura, si se continúa pagando o no la deuda externa durante el año 2024, entre otros. Nuestro Partido, a través de sus diferentes mecanismos e instrumentos, continúa su acción política, promoviendo sus puntos de vista y compitiendo por el liderazgo político de las masas”.
Escribe Rodrigo Cruz
Hoy N° 1994 17/01/2024