En el marco de la 48° Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, y como parte de las actividades organizadas por la Librería Raíces (stand 1614 del Pabellón Amarillo), se realizó una mesa-debate titulada La batalla cultural y las nuevas derechas, coordinada por la revista La Marea. Participaron como expositores el sociólogo Carmelo Cortese, el reconocido músico Juan Falú, y Rosa Nassif, dirigente del Partido Comunista Revolucionario, con la coordinación de Cristina Mateu.
Según Carmelo Cortese, el gobierno de Milei le asigna a la disputa ideológica –disputa a la que el gobierno mismo denomina “batalla cultural”– una importancia central dentro de su proyecto político. Y para el sociólogo es evidente que el núcleo de las ideas de Milei vienen penetrando desde hace tiempo en amplios sectores de las clases populares, que no sólo lo votaron en las elecciones, sino que cada vez más reproducen algunas de sus consignas más reaccionarias, como por ejemplo la idea del “orden” represivo como necesidad para garantizar una “libertad”, que siempre aparece como libertad individual. En ese sentido, Cortese sostuvo que es necesario que los sectores políticos del campo popular y específicamente de la izquierda realicen un ejercicio de autocrítica por haber subestimado el crecimiento de esas y otras ideas reaccionarias, especialmente entre los jóvenes, como primera medida para entender las causas de este presente.
En línea con ello, Juan Falú sostuvo que a lo largo de los últimos años se fue “cocinando a fuego lento” un cuestionamiento a la política, que no fue suficientemente advertido ni por los políticos ni por la intelectualidad; y tampoco fue advertido por un pueblo que –afirmó Falú– no recibió desde la política una pedagogía, que no fue “educado” políticamente, que en democracia no pudo consolidar su conciencia política. Según el músico, esto se produjo, además, en medio del enorme crecimiento de la pobreza, incluso durante los gobiernos peronistas, que históricamente han combatido la pobreza. En ese sentido, Falú sostuvo que la “clase política” de todos los colores debe ser enjuiciada, ya que han sido los responsables del “vaciamiento cultural” de la praxis política nacional. Nuestro país posee, según Falú, una tradición cultural extraordinaria, pero el conservadurismo se adueñó de la tradición, mientras que la izquierda la negó, y el peronismo la olvidó desde una práctica política enajenada de las realidades culturales.
Por su parte, Rosa Nassif hizo referencia a la necesidad de comprender que las ideas dominantes son las ideas de las clases dominantes, y que es necesario librar las luchas también en el terreno ideológico y cultural. Según Nassif, dado que el voto a Milei se basó principalmente en la idea de que así no se podía seguir y de que era necesario un cambio, la pregunta que cabría hacerse –como parte de una reflexión autocrítica– es si se podría haber dado una polémica más fuerte, dentro del frente con el peronismo, alrededor de la necesidad de otro rumbo para el país, dado que el deseo de cambio de un sector del pueblo terminó encarnando en un proyecto de extrema derecha. Sin embargo, Según Nassif, a este gobierno se lo ha enfrentado en las calles desde el primer momento: con un paro general el 24 de enero, el 8 de marzo por los derechos de las mujeres, el 24 de marzo contra la impunidad y el negacionismo, y más recientemente el 23 de abril por la educación pública; todo eso forma parte de la batalla cultural. Pero no basta con encabezar esas luchas: es necesario ganar la batalla en el plano de las ideas, especialmente cuando el gobierno nos ha desafiado a los comunistas, calificando a todo lo que se lo opone de “zurdo”, comunista o marxista. Según Nassif, lo principal es derrotar a Milei, e impedir que dure cuatro años en el gobierno, pero el desafío es recuperar la idea de la necesidad de superar este sistema capitalista mediante el camino revolucionario.
El contenido completo del panel se puede ver en el canal de YouTube de La Marea:
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