Por culpa de las políticas que viene llevando a cabo el gobierno nacional nos encontramos con los niveles más altos de gente en situación de calle.
Desde el comienzo de este gobierno venimos diciéndole No a las políticas de Milei-Villarruel, No al DNU y No a la Ley Bases. Salimos a las calles a reclamar kits escolares y alimentos para los comedores. El desempleo se agudizó, sumado al aumento desregularizado de los alquileres, donde una familia necesita $851.351 para no ser pobre, el aumento del transporte, etc. Estos son algunos de los factores que empujan a familias enteras a vivir en la calle donde padecen el hambre y el frío ante la indiferencia del gobierno.
En CABA según el censo del 2022 viven 3.121.707 personas, y según el ReNaCalle (llevado a cabo por distintas organizaciones) 8.028 no tienen hogar. Jorge Macri propone una ciudad «limpia y ordenada» sin profundizar ni resolver los padecimientos e intereses del pueblo. En la ciudad más rica de Argentina, las personas mueren en la calle. Como respuesta este sistema nos mete droga.
Las muertes que se podrían haber evitado
En los días que llevamos de invierno, vamos lamentando la muerte de seis personas. En menos de una semana cuatro personas en situación de calle fallecieron por las bajas temperaturas, algo que se podría haber evitado.
Un gobierno con políticas de exterminio hacia los que menos tienen, que decide tener almacenados colchones, frazadas y 5 millones de kilos de alimentos pudriéndose en galpones, apelando a la justicia para no entregar nada. Siguen mirando para otro lado antes los padecimientos de nuestro pueblo, especialmente de quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad, cosa que puede evitarse si dejarán de negociar y someterse ante los distintos imperialismos que se disputan nuestros recursos, que solo favorecen y enriquecen más a los sectores dominantes de nuestro país, esto quedó expresado en la sanción de la Ley Bases y recientemente en el Pacto de Mayo.
Mientras tanto el pueblo pierde el trabajo, pierde sus alquileres, las cosas aumentan todos los días, y condenan a gran parte de nuestro pueblo a morir de hambre y de frío en las calles.
Descuidan a las infancias, nuestras niñas y niños desaparecen y el gobierno no hace nada para detener las muertes, secuestros, y trata de los mismos, el caso más reciente es el de Loan en Corrientes.
Pero sin embargo proponen una nueva ley de baja de imputabilidad, y cárceles container en la ciudad de Buenos Aires.
Las organizaciones trabajamos en conjunto y nos criminalizan, inventan causas y hasta nos llevan presas y presos por luchar. Lo único que este gobierno hace es apuntar sistemáticamente a quienes todos los días luchamos junto con las y los pibes de los barrios para cambiar la realidad en la que nos obligan a vivir.
Ya lo dijimos muchas veces y lo vamos a seguir diciendo: ¡La calle no es un lugar para vivir ni para morir!
La calle es para luchar por nuestros derechos.
¡Por eso defendemos lo que tenemos y luchamos por lo que falta!
¡Basta de criminalizar a las organizaciones!
Corresponsal
hoy N° 2018 17/07/2024
