Según informes de las Naciones Unidas, cerca del 85% de las escuelas de la Franja de Gaza han sido destruidas por la genocida invasión del ejército israelí.
A los más de 41 mil asesinados y más de 95 mil heridos, hay que sumar que el ensañamiento fascista del gobierno de Netanyahu que ha bombardeado e inutilizado 477 de las 564 escuelas de Gaza. Además, atacó a las sedes de las 12 universidades de la Franja.
Son más de 600 mil las y los chicos en edad escolar que no pueden asistir a las clases que en el hemisferio norte comenzaron en septiembre. Y hay 88 mil estudiantes universitarios privados de continuar sus estudios.
El Departamento de Relaciones Exteriores del Frente Democrático para la Liberación de Palestina (FDLP) denuncia un “genocidio educativo”, sobre la base de un informe de la ONU del mes de abril, en el que se describe “un esfuerzo deliberado por destruir de manera integral el sistema educativo palestino, un acto conocido como genocidio educativo”, que expresa “la eliminación sistemática de la educación mediante el arresto, la detención o el asesinato de profesores, estudiantes y empleados, y la destrucción de la infraestructura educativa”.
Esta destrucción del sistema educativo se enmarca en las atrocidades cometidas por el ejército de ocupación fascista en la Franja de Gaza. Se destruyeron completamente más de 150 mil viviendas, 200.000 han sido destruidas parcialmente y 80.000 han quedado inhabitables), la mayoría de los centros de salud, más de 200 mezquitas y tres iglesias, así como decenas de centros de refugiados y almacenes de la UNRWA, “incluidas las zonas que el ejército de ocupación designó como seguras, por no hablar de la destrucción de las sedes de instituciones gubernamentales y de los medios de comunicación y el corte del suministro de agua y la destrucción de pozos de agua con el objetivo de que la guerra del hambre y la sed declarada por el ejército de ocupación israelí sea un éxito”, denuncia el FLDP.
Pero esta masacre no ha podido doblegar al valiente pueblo palestino, que busca de mil maneras resistir al genocidio. Por eso, este pueblo que tenía hasta antes de la brutal invasión una de las más altas tasas de educación de Medio Oriente, pelea por su presente y su futuro, por su derecho a vivir en su tierra, y por el derecho a la educación, como muestran las imágenes difundidas por la Embajada de Palestina en nuestro país, con niñas y niños estudiando entre los escombros de sus casas.
Es un deber para todas y todos los que en nuestro país peleamos por un futuro más digno y una patria libre de la dependencia y el latifundio, desarrollar toda la solidaridad posible con la causa del pueblo palestino, contra la genocida ocupación israelí.
hoy N° 2027 18/09/2024
