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02 de octubre de 2010

Si gana General Motors ganamos todos

Hoy 1244 / Rodear desolidaridad lalucha de los mecánicos

La batalla de la clase obrera contra los despidos y sobre todo contra las suspensiones se libra en todas las ramas de la producción y los servicios y en todo el país, pero hoy tiene un centro que es la lucha de los trabajadores mecánicos de General Motors de Rosario.
Desde hace tres semanas el monopolio realiza maniobra tras maniobra y los trabajadores, con su Comisión Interna a la cabeza, con una línea correcta unen la mayoría, aíslan la minoría traidora y obligan al Smata de Rosario a enfrentar los despidos parciales de un sector, y las suspensiones.
Como en la década del 90 una concentración obrera se transforma en el centro de la batalla. Su derrota o su triunfo teñirá el futuro de la lucha de la clase en el período que sigue, como fue Somisa contra las privatizaciones.
Las patronales imperialistas, por la crisis que afecta profundamente a sus casas matrices quieren hacerle pagar a los trabajadores. Empiezan por los contratados y de agencia, ofertan retiros y buscan dividir en fetas cada contingente de personal; efectivos de contratados; antiguos y menos antiguos; más calificados y menos; por comportamiento, faltas, etc.
¿Por qué los trabajadores de General Motors están a la vanguardia de la pelea?, porque no permitieron un solo despido ni una sola suspensión. “Avanzamos todos unidos, si tenemos que retroceder lo hacemos todos juntos”, afirman. 
Si la correlación de fuerzas en una determinada situación obliga a un paso atrás, que se reduzcan las horas extras para todos, si hay que suspender que se suspenda a todos rotativamente, etc. Si quieren cerrar, expropiación y se hacen cargo los trabajadores de la fábrica.
Los trabajadores desde el 2001 han demostrado en 300 empresas recuperadas que pueden producir y bien. Para las terminales del automotor, ya la toma de la planta de Ford en 1985, probó que se puede fabricar automóviles sin los patrones, los capataces y los jefes.
Si no se puede vender un auto que se exportaba se fabricará un “ratón” de dos personas para que los trabajadores no anden en moto y se venderá en el mercado interno.

Una batalla emblemática
La batalla de General Motors es emblemática. Todos los patrones siguen con detenimiento su desarrollo. Las clases dominantes están pendientes, los diarios desinforman, el gobierno de Cristina y Néstor Kirchner dice que no quieren despidos, y dejan que Moyano amenace con la triple indemnización.
El gran secreto de este doble discurso es aplicar el “procedimiento de crisis”: despidos no, suspensiones de un sector, pagando primero el 80%, después el 60, o el 40. Para luego echar probando “fuerza mayor” y pagar la mitad de la indemnización.
En esta jugada van confluyendo todos, porque no quieren oleadas brutales de despidos antes del proceso electoral del 2009. En ese proceso tratan de dividir la masa, lo que se facilita si pasan las suspensiones y los trabajadores se van a sus casas, por eso todos los trabajadores del país deben expedirse públicamente, expresando su solidaridad con los mecánicos de GM.
La pelea por la recuperación de cuerpos de delegados y comisiones internas es fundamental en el proceso de tener la iniciativa de lucha contra despidos y suspensiones, desbordando desde abajo a los traidores y conciliadores, con asambleas y democracia profunda.
Junto a esto reagrupar gremios, organizaciones de desocupados, de campesinos y multisectoriales, que apoyen a GM en todo el país y que se avance en clarificar, discutiendo pacientemente la crisis y quién debe pagarla. 
Desnudar la línea trucha del gobierno y de los traidores sindicales enfrentando los despidos y las suspensiones, fábrica por fábrica; lugar de trabajo por lugar de trabajo en cada ciudad y pueblo del país; tanto del ámbito privado como del estatal; con la más amplia unidad de masas y multisectorial. Los clasistas estamos y estaremos en la primera fila de esta batalla.
Hoy hay que ganar en GM para enfrentar la crisis y hacerla pagar a los que se enriquecieron estos años, y al gobierno vendepatria y versero de los Kirchner.
La jornada nacional del jueves 27 de los desocupados es una gran oportunidad para generalizar nacionalmente la solidaridad con General Motors.