No les ha temblado la mano a los Kirchner: en la primer semana luego de las elecciones han llevado a cabo una quincena de despidos de los trabajadores que han ido a declarar a la Justicia, y de una parte de aquellos que llevaron adelante el paro en julio pasado. Intentaron ponerse una careta y guardaron los despidos hasta luego de las elecciones. Ahora se creen impunes para seguir mintiendo con los datos del Indec, para ello necesitan personal que agache la cabeza.
Cientos de trabajadores cortaron la calle; y se sumó la solidaridad de distintos sectores de la sociedad, como también la de varias juntas internas de ATE Capital. La Junta Interna de ATE Indec, junto a ATE Capital, llamó a un plenario de delegados en la puerta del Instituto para declarar un paro activo el miércoles 7, que logre la reincorporación de los despedidos.
Por un lado ambas juntas internas conformaban parte de una comisión junto a representantes de Alberto Fernández y Peirano, que firmaron un acta donde se determinaba que no iba a haber despidos ni represalias a los trabajadores del Indec. Por el otro lado, Guillermo Moreno, que tiene ingerencia directa en la dirección del Instituto, decide el despido de quince compañeros en abierta contradicción con dicha Comisión.
Está claro que hay contradicciones por arriba, donde se pelean espacios de poder, pero el que dirige las “bandas” es el propio Kirchner que viene haciendo este juego desde hace más de 10 meses. Es él ahora con CK quien debe resolver la reincorporación de los compañeros para encaminarse a lograr la credibilidad del Indec. Ya la careta se le ha caído, la mentira de los índices es conocido nacional e internacionalmente, y los trabajadores parecen no dispuestos a bajar los brazos por un Instituto creíble con todos los compañeros trabajando.
03 de octubre de 2010