Qué significado y qué valor tiene el voto en blanco en esta democracia para nosotros los ciudadanos, contribuyentes, y trabajadores argentinos?
Es la única manera de censurar a los políticos, la forma más elocuente de hacerles saber verdades fundamentales que han olvidado desde su arrogancia y descaro: que nosotros pagamos sus sueldos y que sólo el ciudadano tiene el auténtico poder y la soberanía en democracia.
Por si quedaba alguna duda, la actual campaña electoral en nuestra querida Argentina, está dejando claro que los políticos no tienen ideas nuevas. (…) Ninguno dice, por ejemplo: “Si llego a ser diputado propondré restaurar los trenes, o, propondré revisar las leyes que permiten la minería depredadora, ladrona y contaminadora, o, propondré la recuperación de todos los recursos naturales y el ejercicio real de la soberanía sobre esos recursos: la tierra vendida o cedida a los extranjeros por los gobernantes de turno, el agua, los glaciares, el gas, el petróleo, los bosques, nadie es dueño de la tierra, nosotros somos de ella, o propondré la recuperación de las leyes laborales perdidas, o propondré leyes que limiten las ganancias y riquezas de los ricos para evitar el exceso de planes sociales y prebendas y usar esos recursos para la educación y proyectos de trabajo, o propondré una ley que declare que la muerte de un solo niño por hambre es un delito y por lo tanto hay un culpable, o propondré la aplicación de las leyes que dictaminan que los pueblos aborígenes son los primeros poseedores de las tierras que les expropiaron los poderosos, etc.”
¿Votando en banco lograremos estas conquistas? Pues no, sólo estaremos comenzando a lograrlas, porque perderemos el miedo a dejar el hábito tonto de obedecer a los que mandan y que nos dicen que el voto en blanco es un voto inútil. El 28 a la noche si el voto en blanco fuera numeroso veríamos que los “cara dura” de los políticos exhibirían caras blandas y desencajadas; y los verdaderos poderosos, que siempre salen con caras sonrientes, se preguntarían “Y ahora, ¿qué hacemos? Si una mayoría significativa votara en blanco, creo, se generarían horizontes y posibilidades de otras acciones hoy imprevisibles.
Se sabe positivamente que un político prefiere que voten a su enemigo y no en blanco.
Víctor Hugo Castro y Juana María Alos (29 de mayo de 2009, Día del Cordobazo)
