En la provincia de Tucumán, el martes 25 de marzo a las 16 hs. un operativo policial con uniformados fuertemente pertrechados y chalecos antibalas irrumpieron sorpresivamente en el domicilio de Marcos Mendoza, dirigente de la JCCC. El operativo estaba al mando del policía Maruk. Mientras lo mantenían esposado y encapuchado requisaron sus pertenencias y las de su familia, blandiendo una orden de allanamiento de la Fiscalía VI Dra. Reinoso de Cuello y del V Juzgado de la jueza Lenis de Vera.
La supuesta causa que le inician tiene que ver con un incidente del 21 de junio de 2007, donde la policía reprimió violentamente una protesta protagonizada por desocupados y cosecheros del limón, deteniendo a tres compañeras que fueron golpeadas por el propio Maruk en la Casa de Gobierno.
Marcos Mendoza, dirigente de la Juventud de la CCC, militante de la Juventud Comunista Revolucionaria, acusado hoy de golpear a un policía, nunca fue citado a declarar, nunca fue informado de la causa.
Mientras ladrones, violadores y asesinos andan sueltos; mientras políticos corruptos son encubiertos evitando sistemáticamente su detención, mientras siguen haciendo negocios turbios a costa del pueblo, los grupos especiales de la policía de Alperovich son usados para encarcelar a quienes se atreven a alzar su voz en contra de la miseria y la explotación.
Estos son los métodos fascistas de Alperovich con los que claramente busca criminalizar la protesta social, en momentos en los cuales el paro agrario pone en jaque al gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y comienza a maniobrar para enfrentar a los productores con los demás sectores sociales.
A 32 años del golpe de Estado la memoria de la que habla el gobierno la usa para reprimir a todos los sectores que se manifiestan contra su política.
¡Exigimos su inmediata libertad!
03 de octubre de 2010
