Con la presencia de amigos, entre ellos una concejal del Frente Cívico y Social, compañeros del PCR, del PTP, de la CCC, de Amas de Casa del País, que siguieron con mucha atención la exposición, se llevó a cabo la charla-debate a cargo de los compañeros Adolfo Rosas y Marcelo Lesgart.
Con la presencia de amigos, entre ellos una concejal del Frente Cívico y Social, compañeros del PCR, del PTP, de la CCC, de Amas de Casa del País, que siguieron con mucha atención la exposición, se llevó a cabo la charla-debate a cargo de los compañeros Adolfo Rosas y Marcelo Lesgart.
El historiador Adolfo Rosas hizo un desarrollo de cómo habían sido los factores internos y externos que habían llevado a la Revolución de Mayo y por qué los verdaderos patriotas fueron derrotados. El papel jugado por los originarios, sobre todo en la gran insurrección dirigida por Túpac Amaru y Túpac Catarí, que conmovieron hasta los cimientos del poder colonial español.
“La derrota de los patriotas”, dijo, “llevó a encaramarse en el poder a un grupo de terratenientes y grandes comerciantes ligados al puerto de Buenos Aires, quienes querían separarse de España, pero no perder sus privilegios”. De ahí en más obstaculizarán todo intento de desarrollo democrático y soberano de nuestra naciente nación. A pesar de ello, el 9 de Julio de 1816, reunido el Congreso en la ciudad de Tucumán, por presiones del General San Martín y también de Belgrano, y venciendo la famosa frase de “que la circunstancias no lo permitían”, lo que hizo decir a Bernardo Monteagudo: “Oh, circunstancias, cuándo dejaran de ser una excusa para resolver nuestros problemas”, se declaró nuestra Independencia de España.
Posteriormente el diputado Medrano en sesión secreta le agrega y se aprueba, “y de toda otra dominación extranjera”. “¿Por qué entonces –se pregunta Rosas–, llegamos a este bicentenario con un país dependiente de cuanto imperialismo lo ha disputado?”. Subraya: porque hay que remover las dos grandes montañas que lo comprimen: la burguesía intermediaria junto a los terratenientes, todos ellos herederos de los que derrotaron a los patriotas, que son los que le abren la puerta a los imperialismos, yanquis, ingleses, rusos, chinos, europeos en general, y con los cuales hacen sus negocios a costa del sacrificio de nuestro pueblo. Por eso se deben llevar a cabo las tareas revolucionarias que desemboquen en una segunda y definitiva independencia que construya un país, soberano y verdaderamente independiente.
El doctor Marcelo Lesgart, partiendo de la base de que este es un pueblo que nunca ha dejado de luchar, y en su carácter de abogado laboralista y también de defensor de los derechos humanos, fue desgranando las distintas instancias en que nuestro pueblo con la movilización popular y la clase obrera al frente, ha podido frenar los embates de la oligarquía terrateniente y los grandes industriales. Así se refirió a hitos como el cordobazo, rosariazo, el 17 de Octubre, que modificaron el curso de la historia. Posteriormente se refirió justamente a por qué la dictadura de 1976 fue tan genocida. Porque había que parar ese auge revolucionario de masas que se había desarrollado en el país desde fines de los años 60 con el resurgimiento del clasismo revolucionario.
Tuvo un párrafo destacando las luchas llevadas a cabo en los 90, con las Marchas Federales y subrayó algo muy importante: “cómo el pueblo aprendió a buscarle la vuelta para enfrentar a las clases dominantes, mediante cortes de ruta, de calles, misas de sacerdotes que ayudaron en esos momentos críticos, etc.” En una palabra, cuando tuvo que enfrentar lo hizo, pero también supo sacar provecho de algunas circunstancias, cuando la mano venía difícil. Para finalizar dijo ”vimos un 19 y 20 de diciembre, que se transformó en un argentinazo triunfante”, con el cual se consiguieron puestos de trabajo precarios, se dejó de pagar la deuda externa y la Argentina se transformó en un gran movimiento asambleario”.
Luego se abrió un interesante debate entre los presentes y los disertantes, llegando a la conclusión de que para los momentos difíciles que estamos pasando y cuando se avecinan grandes luchas, tenemos que organizarnos y crecer para poder estar a la altura de las circunstancias y poder dirigirlas.