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03 de octubre de 2010

El paro y movilización agraria tuvieron desde el inicio una fuerte y sostenida expresión en la ciudad de Salto. La unidad con los obreros de Arcor.

Abrazo de chacareros y de obreros

Hoy 1219 / Salto, provincia de Buenos Aires

En la intersección de las rutas 31 y 191 frente a grandes silos y al parque industrial, sobre la rotonda de entrada a la ciudad, se instaló el piquete que a lo largo de 80 días sostuvo firmemente los cortes y las reiteradas movilizaciones hacia el interior del pueblo. También desde el piquete se organizó la movilización a Rosario el 25 de Mayo, se reiniciaron los cortes desde el 26 de mayo, y se preparó la movilización hacia Armstrong, el 2 de junio.
Hay dos hechos que se destacan en estos 80 días: El primero es el histórico tractorazo en Salto el 13/5 con más de 3.000 personas con 200 tractores, con la adhesión de los camioneros independientes y comerciantes, acompañados por delegaciones de los pueblos de Tacuarí, Gahan, Arrecifes, Rojas y Colón, marchó desde la rotonda hasta la intendencia y rodeó la plaza, reclamando la presencia del intendente kirchnerista. Se le exigía un pronunciamiento a favor del reclamo agrario con el canto "¿Migliaro dónde está?". Al mismo tiempo, se rechazaba el aumento de la tasa vial en un 100%, dispuesto por la Intendencia.
El segundo hecho es el paro en la principal empresa de la zona, Arcor, que tiene 750 trabajadores efectivos y 250 contratados, quienes en una gran asamblea impulsada desde abajo, con 500 compañeros, realizaron inmediatamente después del tractorazo -desbordando a los delegados de fábrica electos por el sindicato-, un paro por tiempo indeterminado, exigiendo un salario de bolsillo de $ 1.900 para la categoría más baja.
El paro de Arcor de Salto por aumento de salarios, al que se sumó luego la Federación dirigida por Morán -al igual que los paros y movilizaciones en Terrabusi de Gral. Pacheco- son parte del proceso que protagonizan por abajo los obreros de la alimentación, en el curso de la negociación paritaria del sindicato con la cámara empresaria, que culminó la semana pasada. El conflicto sigue abierto porque no se ha definido aún el salario de bolsillo en la empresa y porque la patronal produjo despidos masivos en la última semana de mayo, los que fueron firmemente rechazados por los obreros en asamblea.
Durante las jornadas del 19 al 25 de mayo, mientras el piquete preparaba la movilización a Rosario y los obreros de Arcor realizaban una permanencia en la empresa con un paro activo, el apoyo mutuo y la coordinación del piquete rural con el paro obrero se manifestó de muchas formas y se simbolizó, según sus protagonistas entrevistados por este corresponsal, "con el abrazo histórico sobre las alambradas perimetrales de la fábrica que están frente a la rotonda donde está el piquete. Al son de los bombos de los obreros que recorrían las instalaciones de la empresa, al llegar frente al piquete del que se encontraban separados por la alambrada, tanto los chacareros como los obreros se subieron a la alambrada y se abrazaron sobre ella".