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01 de diciembre de 2010

La Junta Interna ATE–Indec denuncia el acuerdo del gobierno con el FMI.

Ahora, el FMI en el Indec

Hoy 1346 / Además de la intervención y la patota

El último martes 23 de noviembre el ministro de Economía Amado Boudou, flanqueado por los interventores en el Indec Ana Edwin y Norberto Itzcovich, brindó una conferencia de prensa anunciando la llegada de una comisión del Fondo Monetario Internacional para asesorar en la confección de un Índice de Precios al Consumidor (IPC) a nivel nacional. Más allá de la opinión que el gobierno dice tener sobre el “Fondo”, que evidentemente ha sido abandonada en pos de cumplir con el pago al Club de París, la iniciativa es presentada como una “novedad” y un “salto de calidad”. Difícilmente los responsables de la destrucción del Sistema Estadístico Nacional, actividad por la que perciben los más altos salarios del escalafón, puedan brindar calidad alguna en esta nueva etapa, en asociación con quienes han pretendido siempre cobrar lo que la Argentina ya ha pagado cien veces.
Además, la propuesta no es una novedad porque el índice de precios de cobertura nacional ya existía en el Indec. En 2003 se hallaba en su primera etapa de implementación, incluyendo a las 7 provincias que según la última Encuesta de Gastos de los Hogares disponible en ese momento representaban el 83% del gasto total del país. Hacia fines de 2005 comenzó a publicarse.
Cuando en enero de 2007 irrumpe la intervención del gobierno en el IPC y comienza la manipulación de los precios en el área de Capital Federal y Gran Buenos Aires, el IPC nacional siguió publicándose, pero ante la evidente disparidad que el índice nacional mostraba con el adulterado del área metropolitana, la intervención decidió desmantelar el equipo de trabajo, despidiendo, desplazando y dejando sin tareas a los trabajadores que se oponían a la manipulación.
 
 

Una nueva maniobra
Es en este contexto, en el que se hace oídos sordos a lo que las universidades nacionales señalan [coincidiendo con los trabajadores del Indec], que se anuncia el asesoramiento del FMI para elaborar un IPC nacional.
Tener un IPC Nacional conlleva un trabajo preliminar de más de 2 años para obtener datos de calidad. Esto no es más que otra forma de ganar tiempo tratando de seguir convalidando y naturalizando la mentira, el accionar de la “patota” y el reparto de los recursos que solventa toda la sociedad para el grupo que lleva adelante esta política. Para ello no se duda en aliarse nada menos que con el FMI, sabiendo que no hay forma de disfrazar lo que significó, significa y significará el FMI para los pueblos del mundo, y muy especialmente para nosotros. Mientras tanto, los trabajadores, los más pobres, los jubilados seguimos sintiendo en nuestros bolsillos como se burlan con las cifras oficiales de inflación, pobreza e indigencia de Ushuaia a La Quiaca.
La recuperación de la credibilidad de los índices se puede lograr reponiendo en sus lugares a los trabajadores desplazados, cesando en sus funciones a los funcionarios responsables del desmantelamiento del Indec y convocando a las universidades nacionales y a usuarios especializados de nuestro país a que colaboren y comprueben que se tiene en cuenta lo que proponen cuando se los convoca. Contamos con técnicos, profesionales y trabajadores de las estadísticas en todo el país, capacitados para recuperar y darle a nuestros indicadores el prestigio del que gozaban antes de la decisión de destruir ese patrimonio científico de todo el pueblo, no hace falta recurrir al FMI ni a sus “técnicos”. Sólo hace falta que se vayan la Intervención y la patota del Indec.