El gobierno hizo fracasar la reunión de negociación convocada por el arzobispo de Tucumán monseñor Villalba que se realizó el martes 3. El gobierno mantuvo su propuesta de aumento a la base de cálculo de 20 pesos, más el pago en negro por responsabilidad médica en negro solamente a los profesionales médicos y no al resto de las categorías del sistema, como enfermeros administrativos, etc.
Los delegados autoconvocados sostenían la propuesta votada por las asambleas de aumento del 100% a la base de cálculo, pase a planta permanente de 5.000 trabajadores, muchos que actualmente están con contratos basuras y monotributistas.
Cuando se levantaba la reunión el arzobispo Villalba hizo una propuesta a las partes, le pidió al gobierno que aumente a 50 pesos el aumento a la base de cálculo, y que el ítem de responsabilidad médica, que es de un 20% del básico que perciben los profesionales, sea para todos los trabajadores. El gobierno aceptó esta propuesta y los autoconvocados se comprometieron discutirlo en asambleas el día siguiente.
Cuando se realizaban las asambleas, con mucho debate en los hospitales de la capital si agarraban o no, y con una aceptación mayoritaria, en el interior de la provincia, el gobierno en forma unilateral mediante una conferencia de prensa de los ministros de Economía y de Salud se desdijeron de lo que se habían comprometido con el obispo y los delegados, diciendo que el gobierno no tiene plata y que no pueden aumentar más que 20 pesos.
Segunda marcha de antorchas
Ese mismo día, el miércoles 4, se realizó la segunda marcha de antorchas, donde participaron más de 10 mil personas. Los trabajadores concurrieron con sus familias a la plaza, había mucha bronca con el gobierno, los distintos oradores repudiaron al gobierno y llamaron a profundizar la lucha.
En la movilización participaron distintas organizaciones sociales y políticas entre ellas una importante columna de la CCC, Sindicato Municipal de Aguilares, CTA, colegios de profesionales, centros estudiantiles, agrupaciones estudiantiles CEPA, JUP, jubilados, usuarios autoconvocados, partidos políticos como PCR, UCR, MST, entre otros.
La movilización recorrió el centro con un gran apoyo de la población, que aplaudió el paso de la marcha e hizo sonar cacerolas desde los balcones de los edificios. Fue una contundente respuesta a la prepotencia del gobierno de Alperovich fortaleciendo a la vez el movimiento en su lucha.
Pero el gobierno sigue provocando ahora con la modalidad de mandar patotas para intimidar a los trabajadores autoconvocados, como pasó en el hospital de Aguilares que una patota entró a romper carteleras de los trabajadores amenazándolos, con total impunidad. Por ese motivo los delegados de todos los hospitales realizaron la asamblea interhospitalaria.
Desde allí llamaron a profundizar la lucha con una nueva marcha de antorchas para el viernes 13 y llamaron a cerrar las puertas de los hospitales para evitar nuevas provocaciones de las patotas. En el Hospital Maternidad su delegado propuso a la asamblea prepararse para una lucha larga e ir organizándose pasar Nochebuena en la Plaza Independencia.
Corresponsal