Las fuerzas productivas y el programa en la actual coyuntura
Frente a esta política desarrollada desde el golpe de estado del 76 hasta la fecha, que ha profundizado la dependencia al imperialismo en nuestro país y en la industria petrolera en particular, es necesario hacer un estudio del desarrollo de este proceso.
Las fuerzas productivas y el programa en la actual coyuntura
Frente a esta política desarrollada desde el golpe de estado del 76 hasta la fecha, que ha profundizado la dependencia al imperialismo en nuestro país y en la industria petrolera en particular, es necesario hacer un estudio del desarrollo de este proceso.
YPF fue creada como una empresa monopólica estatal, que llegó a ser una de las primeras y más grandes del mundo, con un desarrollo tecnológico de punta, grandes campañas de exploración, con plataformas marítimas propias, etc. YPF controlaba, y explotaba la integridad del negocio petrolero, hacía la exploración, la perforación, la extracción, la destilación y posteriormente la venta de los combustibles. Todos los equipos, instalaciones, maquinarias, flota mercante, etc., pertenecían a YPF.
Uno de los argumentos del General Mosconi para la fundación de YPF fue la negativa de la Standard Oil [1] a entregarle combustible para realizar maniobras con aviones militares. Lo que evidenció lo estratégico del recurso energético.
El proceso de privatización de YPF, terminó desmembrando totalmente esta forma de producción monopólica y estatal, que le permitía al país controlar una de las palancas claves del desarrollo nacional, desde el yacimiento hasta el surtidor. Entregándoles en concesiones a distintos monopolios imperialistas, todos los yacimientos [2]. Instalando una nueva organización de producción, donde las operadoras de áreas, son las que marcan el ritmo de la producción en cada yacimiento, y son las que se apropian del petróleo y de la principal tajada de la renta petrolera, y de la plusvalía de los trabajadores, contratando a las otras empresas (contratistas) para que contraten a los obreros y pongan las herramientas para hacer los trabajos.
Volver a una YPF estatal y monopólica que tenga en su poder la totalidad de la industria, desde el pozo al surtidor, es un objetivo estratégico justo. Un país independiente y soberano no puede resignar un recurso estratégico como la energía.
Hoy, el momento político, y la actual etapa del desarrollo de la industria petrolera, nos exige ajustar un programa que nos permita unir todo lo posible de ser unido para derrotar la política entreguista que han desarrollado las clases dominantes. Política que ha dejado al país sin el autoabastecimiento energético, pasando a ser un importador neto, y ha permitido el avance de distintos monopolios imperialistas. Monopolios que han saqueado el recurso y se han alzado con impresionantes ganancias que deja la renta petrolera, aprovechando todo el desarrollo y los descubrimientos de la YPF estatal.
Para este programa es fundamental partir de la realidad, y tener en cuenta todos los actores y su rol en esta nueva estructura productiva.
Las Operadoras de Áreas
Las empresas operadoras de áreas, que son las que tienen los contratos de concesión de los yacimientos, no son las dueñas de los yacimientos, ya que estos son recursos intransferibles del estado): CHEVRON, EXXON (yanquis) TOTAL (francesa), PAN AMERICAN ENERGY (60% Ingleses BP- 40% BRIDAS -ruso-chinos) presidida por Carlos Bulgheroni, YPF, SINOPEC (chinos), PETROBRAS (brasilera), WINSTERSHAL(alemanes), etc.), son las que gerencian los yacimientos, y contratan absolutamente todos los trabajos que se hacen en los yacimientos[3].
Los empleados de las operadoras son fundamentalmente técnicos, e ingenieros, en su totalidad jerárquicos [4], muchos "fuera de convenio".
Estas empresas son las que marcan los ritmos de inversión y desarrollo de los yacimientos. Cada una de estas empresas trata de ganar terreno y posicionarse en los distintos yacimientos, y se disputan el reparto de la renta petrolera. Este grupo de empresas y sus representantes políticos son el principal obstáculo en el proceso de la lucha por estatizar los yacimientos. Teniendo en cuenta que el principal garante y gerente de esta entrega y de esta forma de explotación es hoy el gobierno de Macri, que en lo fundamental es continuidad de las políticas de entrega y saqueo de las clases dominantes que nos han llevado a esta situación [5].
Las empresas contratistas
Por otro lado están las empresas contratistas. Estas son las que contratan a los obreros que hacen los trabajos en los yacimientos, contratadas por las operadoras. En este grupo, hay empresas monopólicas como HALIBURTON, SCHLUMBERGER, SKANSKA, NABORS, SAI, etc., siempre hay que tener en cuenta que son un grupo, donde hay monopolios imperialistas y empresas de burguesía nacional y pequeña burguesía, que explotan a los obreros, quedándose con una parte de su plusvalía,y a su vez es un grupo cuya actividad está subordinada a las decisiones estratégicas que toman las operadoras de áreas. Las operadoras tienen múltiples mecanismos de apriete sobre las contratistas [6].
Hay empresas contratistas de perforación, mantenimiento, producción, movimiento de suelo, tratamiento químico, obras civiles, transporte de personal, catering, servicios especiales (fractura, cementación, perfilado, etc.). Estas son las que hacen, a través de los obreros que contratan, todos los trabajos en los yacimientos, son las que les venden los servicios a las operadoras.
Las contratistas, si bien son las responsables de todos los trabajos en los yacimientos, y son las dueñas de los equipos de perforación, máquinas, herramientas, etc., cumplen un papel relegado en la política de desarrollo de dichos yacimientos.
Este grupo de empresas, a su vez, se dividen en tres grandes grupos, según la rama. Por un lado las empresas de perforación, terminación, y reparación de pozos: SAN ANTONIO, DLS, PETREVEN, KEY, NABORS, HP. Son las empresas de torre. Por otro lado están las de servicios especiales, que son las que fracturan, cementan, etc.: SCHLUMBERGER, HALIBURTON, BJ, etc. Y por otro están las de producción, que incluyen todos los trabajos de superficie en los yacimientos, mantenimiento, montaje, producción, etc.: SKANSKA, OPS, OIL, BURGWARDT, etc.
Otros sectores de trabajo, vinculados a la producción petrolera, lo componen el de bombas electro-sumergibles y sistemas de estimulación en la producción secundaria, con G.E. (General Electric) gran monopolio yanqui que compró Wood Group (inglesa), y también a LUFKIN, la principal fabricante de aparatos de bombeo en América Latina (cigüeñas). En este grupo hay trabajadores encuadrados en la UOM. Y el sector denominado "pileta seca" que lo tomó Camioneros.
En el grupo de las contratistas encontramos un contingente importante de burguesía nacional. Hoy hay, según datos de la dirección provincial de rentas de Neuquén, unas 534 empresas contratistas en el rubro petrolero, de las cuales 396 son neuquinas, de las otras 138 empresas, no detallan entre las nacionales y extranjeras, pero con este solo dato podemos ver que la burguesía nacional y local tiene un fuerte desarrollo en la industria petrolera. El progreso y desarrollo de esta burguesía está condicionado a los monopolios que operan los yacimientos, ya que son los “clientes” de sus productos, sean estos mantenimientos, tecnología, herramientas, etc. A su vez, gran parte de esta burguesía, se está viendo cada vez más amenazada y “apretada” por las operadoras, que descargan el ajuste sobre esos contratos, reduciendo la tasa de ganancia de las empresas chicas para mantener la de ellos, o fomentando el progreso de los monopolios amigos en detrimento de las pymes, y empresas nacionales.
Dentro de estas empresas de burguesía nacional, están las empresas que nacieron con la privatización de YPF. Varios sectores desmembrados de la YPF estatal, fueron dados a concesión a emprendimientos de los mismos empleados de YPF. Muchos de esos emprendimientos siguen en pie, y en algunos casos, como PETROGAS de Cutral Co, tienen más de mil empleados, y se han afirmado. Otras empresas siguen siendo sociedades de los viejos empleados de YPF y luchan por su subsistencia, contra los demás monopolios del rubro que se imponen por los negociados que tienen con las operadoras en el resto del mundo.
También existe una gran cantidad de pequeñas empresas contratistas, de servicios, que componen una pequeña burguesía, muchos de ellas están compuestas por ingenieros autónomos con uno o dos empleados.
En algunos casos como en Cutral Co y Plaza Huincul, estas empresas se han agrupado en cámaras empresariales, como es el caso de la CEIPA.
Los obreros petroleros
Los obreros petroleros atesoran una gran experiencia de lucha, desde las históricas huelgas de la década del 30´, contra la STANDAR OIL de 1958, pasando por la lucha en contra del vaciamiento y posterior privatización de YPF, lucha muy grande que fue entregada por la dirigencia sindical traidora del SUPE. Y otras más contemporáneas como la histórica lucha de los obreros de PRIDE en el 2006, las de Cerro Dragón en julio del 2005 que incluyó la toma del yacimiento más importante del país, o la lucha de los obreros de Las Heras- Santa Cruz Norte contra el impuesto a las ganancias en febrero del 2006, consecuencia de la cual están con una condena a perpetua varios trabajadores, etc.
Los obreros petroleros están, en la cuenca neuquina, afiliados en su totalidad (99%) al Sindicato de Petróleo y Gas Privados de Río Negro Neuquén y La Pampa, sindicato que ha crecido y montado una estructura muy importante. Tiene un cuerpo de 220 delegados y una comisión directiva de 30 miembros. Sindicato pequeño a nivel nacional pero con alto poder de fuego. Ya que está parado sobre el 40% de la producción de gas, y el 30% de la producción nacional de petróleo.
La inmensa mayoría de los obreros petroleros trabajan en las empresas contratistas. Actualmente en la cuenca neuquina hay afiliados al Sindicato de Gas y Petróleo Privados de Neuquén Rio Negro y La Pampa, unos 23000 obreros.[7]
En la Cuenca del Golfo San Jorge, los petroleros de Chubut tienen un Cuerpo de Delegados de más de 200 delegados, los de Santa Cruz tienen 4 Cuerpos de Delegados (Las Heras, Truncado, Caleta Olivia, Gallegos) sumando casi 300 Delegados. Hace pocos días, en una gran asamblea en Caleta, se separó de Federación, pero la disputa sigue ya que se programa una nueva asamblea en Las Heras para la formación de otro sindicato por fuera de Federación. El sindicato Jerárquico de la Patagonia Austral (de Comodoro a Tierra del Fuego) tiene 135 Delegados.
Además tenemos que tener presente que hay un contingente importante de obreros en el gremio de Camioneros, que tienen un peso muy importante en las distintas tareas de logística de los yacimientos. Otro contingente importante es el de obreros de la UOCRA, que en el caso de la cuenca neuquina, tienen un papel secundario en lo numérico y en lo productivo, pero en el caso de Chubut y Santa Cruz, tienen un gran peso en ambos sentidos.
Los obreros deben conducir el frente único para derrotar esta política y lograr poner el petróleo en manos del pueblo argentino. Para que la clase obrera pueda ser la que hegemonice este frente único, debe tener un programa justo, que sea una herramienta para esa unidad, unidad que le permita aislar al enemigo y derrotarlo.
Podemos decir que son múltiples las contradicciones en la actual etapa de desarrollo de la industria petrolera, y destacamos como la principal la que opone por un lado a las operadoras de áreas, y sus representantes políticos, y por otro al pueblo y sus trabajadores. En función de esta contradicción principal debemos identificar y estudiar todas las demás para poder derrotar a los primeros. Es decir, estudiar las contradicciones entre las operadoras de áreas, y sus grupos imperialistas, y sus representantes políticos y sindicales. Por otro lado, las contradicciones que existen entre las operadoras y las contratistas, entre los obreros de las contratistas y las empresas, la de los obreros con las operadoras, entre las contratistas de burguesía nacional y las que son monopolios extranjeros, etc.
Viendo la actual situación, y los distintos actores que componen hoy la industria petrolera, hay que ajustar el programa a nuestra táctica de golpear centralmente a la política de entrega del gobierno nacional, que les transfiere a las Operadoras de Áreas el poder de decisión sobre los yacimientos, sin poner en el mismo plano a las empresas contratistas, y uniendo todo lo posible de unir para derrotarlas. Estatizando la operación de los yacimientos. Y a partir de ahí, desarrollar otra política en camino a la estatización integral de la industria petrolera, bajo control de los trabajadores y del pueblo.
Desde este punto de vista, proponemos ajustar y unificar nuestro programa para la recuperación de los yacimientos y la industria petrolera.
1- Recuperar la totalidad de los yacimientos, Anulando los contratos (como hizo Illia en 1963 con los contratos de Frondizi en Comodoro Rivadavia) otorgados a las operadoras de áreas como PAN AMERICAN ENERGY, SINOPEC, CHEVRON, TOTAL, EXXON, etc. Por ser ilegitimas, fraudulentas y en su mayoría ilegales[8], con escandalosos contratos a 40 años como el de Cerro Dragón, y con concesiones casi a perpetuidad con la nueva ley petrolera. Sin resarcimiento económico, e inicio de demanda para el cobro de los pasivos ambientales no remediados. Recuperando de esta forma la renta petrolera, y el poder de decisión. Siguiendo el camino del Gral. Enrique Mosconi.
2- YPF 100% Estatal y convertirla en empresa pública Sociedad del Estado, con control de los trabajadores, técnicos y profesionales, de las organizaciones populares, y de las universidades. Controlando toda la actividad hidrocarburífera en sus aspectos ambientales, sociales, económicos y productivos.
Esta empresa será la única operadora de los yacimientos y deberá:
- Tener una clara política que termine con la superxplotacíon de los obreros petroleros, volviendo a los turnos de 8hs de la YPF estatal anterior al menemismo, terminando con los turnos de 12, 14, 16hs, sin reducción de los sueldos. Incorporando un turno más de trabajadores, para cubrir todas las vacantes necesarias, y los relevos suficientes para un mejor régimen de licencias.
- Tener una política de defensa de las PYME y de la industria nacional, frente al avance de los monopolios extranjeros. Impulsando líneas de créditos, entre otros incentivos. Y promover el desarrollo de la industria pesada y de tecnología1 (equipos de perforación, herramientas, maquinaria, etc.) en manos del Estado. Dándole participación e impulso a través de las universidades.
- Restablecer la inversión exploratoria de recursos convencionales, en la parte continental y off shore (costa marítima), en acuerdo con las organizaciones de la flota amarilla.
- Recuperar todas las destilerías para regular el precio y la producción de los combustibles. Impulsando el desarrollo de nuevas destilerías y petroquímica en las zonas cercanas a los yacimientos, viejo reclamo de las comunidades petroleras.
- Prohibir la exportación de los hidrocarburos, ajustando la producción a las necesidades nacionales. E impedir el envío de las ganancias al exterior.
- Realizar convenios de cooperación energéticos regionales (Bolivia, Perú, Brasil, Venezuela, etc.)
- Diversificar la matriz energética, acelerando la sustitución de las fuentes energéticas sucias por tecnologías limpias. Y poder utilizar el petróleo y el gas en sus diversos aspectos productivos. Fomentando la industria petroquímica. Desarrollando en nuestras universidades e institutos terciarios la tecnología apropiada para reducir el impacto ambiental de la industria petrolera.
Este programa nos debe ayudar a poner a la clase obrera al frente del reagrupamiento capaz de llevar adelante la lucha por la liberación nacional y social, y nos debe servir para el reagrupamiento de las fuerzas populares en la lucha por derrotar la política entreguista y antiobrera del gobierno de Macri.
También debe ser una herramienta para crecer y desarrollar nuestra fuerza principalmente entre los obreros petroleros. Y que nos permita, con esta línea de hegemonía proletaria, desarrollar nuestra fuerza también dentro del sindicato jerárquico, de la pequeña burguesía y de la burguesía nacional patriótica y democrática.
Notas:
[1] Operadora yanqui que después derivó en la actual CHEVRON y EXXON.
[2] Los yacimientos son de propiedad intransferibles del Estado*. Lo que se les entrega a las operadoras es una concesión del yacimiento, a cambio de un compromiso de inversión y algunos cánones que se les cobra. Las concesiones son permisos para la explotación del yacimiento por un plazo determinado. Un yacimiento es una unidad productiva, determinada por los accidentes geológicos, que forman trampas geológicas, que impiden que el petróleo migre hacia otras zonas. Cada yacimiento depende de su formación geológica determinada Así, hay yacimientos que el petróleo está a 1000mts de profundidad y en otros a 5000mts. Hay yacimientos de 150km2 y hay otros de 5km2. Hay yacimientos en el mar, etc. En un yacimiento relativamente grande, pueden haber más de mil pozos (Puesto Hernández tiene 2300 pozos), que bombean a las distintas baterías, y de ahí a las plantas de tratamiento de petróleo, que centralmente separan el agua del petróleo, y el gas, y lo despachan a los oleoductos de conducción hasta las destilerías.
[3] Salvo excepciones como en el de YPF, que tiene algunos equipos de perforación propios. O en el caso de los Bulgueroni, que además de ser Presidentes de BRIDAS, son dueños de la perforadora DLS, del grupo Archer.
[4] También en casos excepcionales, y principalmente en YPF, se da que hay obreros propiamente dichos en la empresa, que trabajan en los equipos propios de la operadora.
[5] Es necesario distinguir, entre los distintos grupos y sectores, cuál o cuáles son las principales a los que hay que golpear en cada momento particular, ya que responden a distintos monopolios y países imperialistas, y la disputa siempre está presente. A través de estas empresas se expresa la lucha por el reparto de la renta y de posiciones imperialistas estratégicas.
En el último periodo, el gobierno K hizo negocios y fue responsable del vaciamiento de YPF, permitiéndole a REPSOL que saque el 100% de las utilidades a su casa matriz, eliminando la exploración y la perforación de nuevos pozos. Esto impactó drásticamente en la producción, generando el déficit energético. Déficit que es una herida de extrema gravedad para la economía argentina.
El gobierno de CK, acorralada por la terrible sangría que le generaba la caída de producción, y la creciente necesidad de importar combustibles, y visto que YPF opera principalmente los yacimientos de la cuenca neuquina, (maneja solo el 30% de la producción de petróleo del país) y que aquí está la formación Vaca Muerta, expropió a los españoles de REPSOL, y arregló con un sector de los yanquis, para que invierta en Vaca Muerta, a cambio de concesiones nefastas tanto públicas como secretas. Tratando de ganar terreno con su propio grupo, y haciéndole pagar al pueblo argentino, los costos de la llamada "curva de aprendizaje" .
Teniendo en cuenta que los yanquis son los únicos que han desarrollado en gran escala la producción de los no convencionales, son los que tienen la tecnología necesaria para dicha explotación, el gobierno de CK, puso en YPF a un hombre de SCHLUMBERGER (empresa yanqui), y este puso en mandos claves a varios hombres del mismo monopolio.
YPF ha dedicado el 70% de las inversiones a la perforación de los pozos no convencionales, y SCHLUMBERGER se ha convertido en una de las empresas que mejores negocios está haciendo con este asunto. No es la única, ya que HALIBURTON cobra en dólares seis veces más caro una fractura a YPF, que a CHEVRON en EEUU o en China. Y NABORS y HP (también yanqui), son las únicas que tienen los equipos de perforación que permiten el sistema multipad, para optimizar los tiempos y las maniobras de perforación en los no convencionales, con lo que también se alzan con sus sobreprecios en dólares.
El gobierno K, por un lado, arregló con los yanquis para el desarrollo de los no convencionales, lo que se da principalmente en la zona de Añelo en la provincia de Neuquén. Permitiéndole a los yanquis avanzar en sus posiciones estratégicas, haciendo jugosos negocios, cargando sobre las espaldas del pueblo los costos de la “curva de aprendizaje” con el aumento de los combustibles.
Por otro lado y en sintonía con su alianza estratégica e integral con los chinos, a través de CNOOC y SINOPEC, han pasado a ser los 4º productores de petróleo en el país. No sólo eso, sino que ya tienen equipos propios de perforación, terminación, y pulling, a través de BRIDAS (en sociedad 50% con el grupo ruso Bulgheroni) ; han comprado a la ESSO la destilería de Campana, y las 550 estaciones de servicio (AXION), con lo que se han convertido en una compañía integrada, manejando todo el circuito productivo, al nivel de YPF. Durante el gobierno K los chinos han penetrado profundamente en la industria, operando a través de asociaciones, los principales yacimientos del país como Cerro Dragón (yacimiento que tiene el 40% de las reservas de petróleo del país en la provincia de Chubut) con PAN AMERICAN ENERGY (PAE.). A su vez, dentro de PAE. se da una durísima disputa entre los "socios" BP. y BRIDAS, consecuencia de la cual BP perdió un juicio con los Bulgheroni-CNOOC por 700 millones de dólares.
Es necesario el estudio de la disputa y del avance de unos y de otros ya que por aquí se expresa la aguda disputa interimperialista que atraviesa nuestro país, y la industria petrolera en particular.
[6] Por lo general les hacen un sistema de negociación de contratos, con contratos en los mejores casos de 2 años, a veces "de palabra", donde no les actualizan los precios de los insumos, y les hacen pagar los costos de la inflación a éstas. Otro mecanismo son las órdenes de servicios, que son multas que les descuentan a las contratistas por determinado incumplimiento del contrato. Hay que tener presente que las contratistas forcejean con las operadoras permanentemente, y siempre tratan de descargar sobre los trabajadores las reducciones de contratos, o incluso los ajustes para mantener sus tasas de ganancias. Muchas veces quitando beneficios o reduciendo personal, o aumentando los ritmos de producción y las exigencias a los obreros, para no romper relaciones con las operadoras, y seguir vendiendo un “buen servicio y barato”. A la vez, muchos conflictos se dan por el cambio de las contratistas, con respecto a los trabajadores: si se respeta la antiguedad, si les vuelven a hacer la revisación medica, y "los malos" y "quilomberos" quedan afuera, etc. Los Sindicatos tambien intervienen, y son muchos los casos que "algunos dirigentes" son dueños de Chatas de turno, socios en algunas contratistas…
[7] Hay tres grandes grupos diferenciados por rama, según sus tareas.
Por un lado están los obreros de los equipos de torre, que son los obreros que trabajan en los equipos de perforación, terminación y reparación de pozos. Estos constituyen un contingente muy combativo y de los más explotados, ya que los equipos trabajan las 24hs ininterrumpidamente en todo el año, son los que soportan los turnos rotativos de 12 horas y los diagramas de trabajo de 14 días (sin importar feriados, domingos, etc.) por 7 días de descanso, y en general estos obreros son trasladados según la demanda de las operadoras por lo que sufren en gran parte el desarraigo. Por los últimos registros que manejamos, son unos 6000 obreros en los equipos de torre en Neuquén. Este sector es el más afectado por la baja de inversión de las operadoras, ya que lo primero que se para, son las perforaciones nuevas, y con eso lo fundamental dentro de esta rama. Por cada equipo de perforación de 30 trabajadores, trabajan en total 150 sumando todas las contratistas.
Hay trabajadores petroleros en los equipos que están en la denominada "permanencia" con 10 días de trabajo continuo en los equipos y 5 en la casa. estos turnos aberrantes, destruyen las familias petroleras y a los propios trabajadores que nunca pueden festejar un cumpleaños con sus hijos….
Otro sector está compuesto por los obreros de servicios especiales. Son los que trabajan en las empresas de fractura hidráulica, cementación, perfilaje, inyección de ácidos, etc. Son obreros que también sufren el desarraigo, ya que trabajan en tareas ininterrumpidas, y a demanda de los equipos de torre, con ritmos laborales muy intensos y muchos riesgos asociados a sus tareas (altas presiones, emanaciones de gases tóxicos, altas temperaturas, etc.). Son un sector de mano de obra muy específica y muy necesaria en la industria de los no convencionales. Por su historia y su peso en la industria son el sector mejor remunerado. Actualmente se está en una lucha por mantener esos sueldos, ya que pasó de ser un sector secundario en la industria, o que no era necesario en la totalidad de los pozos, a ser un sector indispensable para la explotación de los no convencionales. Los costos de mano de obra, de servicios especiales, pasaron a ser un costo estructural en la perforación de los nuevos pozos, costo que quieren bajar las empresas.
El otro sector de obreros petroleros son los de producción. Estos obreros son los que realizan todas las tareas de mantenimiento, puesta en marcha, reparación, etc. en la superficie, es decir una vez que los pozos se terminaron de perforar, son los que hacen todas las maniobras para que el pozo produzca y así con todos los pozos y baterías de los yacimientos. Este contingente, junto con el de torre son los más numerosos del rubro. En el caso de producción, son obreros que garantizan que el yacimiento produzca, con lo que es un sector estratégico, mirado desde el punto de vista productivo.
El reclamo por la eliminación del "impuesto a las ganancias" es un gran reclamo de todos los petroleros que en muchos casos "le regalan" el aguinaldo y a veces también otro sueldo por año al estado nacional.
[8] No podrá otorgarse ninguna clase de concesión para la explotación, industrialización y comercialización de hidrocarburos sólidos, líquidos y gaseosos y minerales nucleares, salvo a una entidad autárquica nacional, que no podrá ceder ni transferir el total o parte de su contrato, y si así lo hiciere quedaría de hecho anulado el mismo y todas sus instalaciones y derechos en el ámbito provincial pasarían a ésta. Art 96 de la Constitución neuquina.