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02 de octubre de 2010

Reproducimos la siguiente declaración política de los camaradas entrerrianos.

Ante la lucha agraria

Comité Zonal del PCR de Entre Ríos

La suba de las retenciones a niveles confiscatorios (45% y más) por parte del gobierno kirchnerista, terminó no solo con la renta extraordinaria sino también con la ordinaria de los pequeños y medianos productores de nuestra provincia, donde los rindes de la soja es de 24 quintales de promedio respecto a la zona pampeana, donde son un 50% más altas, poniendo al mismo nivel a estos con el puñado de grandes pooles o terratenientes, dejando en evidencia la falsa política “redistributiva” del kirchnerismo, quitándoles la poca rentabilidad que aún les quedaba. Esto hizo aflorar que detrás del fenómeno de la sojización (que pasó del 2003 al 2008 de 9 a 16 millones de Has) seguía latente la crisis ganadera, con las mismas 50 millones de cabezas de ganado como 50 años atrás con mayor población; o la crisis de la lechería, que ya había hecho desaparecer dos tercios de los productores desde la década de los 90. En realidad con la política kirchnerista avanzó el monocultivo, mientras seguían en crisis todas las economías regionales. Esos productores hacían un poco de soja para tratar de salvarse. Por eso se masificó rápidamente el conflicto, porque ante la última gota que rebalsó el vaso salieron a la lucha por todo: por la leche, la carne, el trigo y mejores precios para todas las economías regionales, tratando de subsistir.

Frente multisectorial
Dentro del frente que lucha contra las medidas del gobierno kirchnerista y el de Uribarri participan mayoritariamente pequeños y medianos productores; un sector de obreros rurales (tractoristas, maquinistas) sectores del campesinado rico y sectores de terratenientes extrapampeanos, con los cuales objetivamente golpeamos juntos, pero con un programa diferenciado. Asimismo participan transportistas, profesionales, docentes, estatales, desocupados, jubilados y estudiantes universitarios.
* La principal responsabilidad de que tantos sectores y clases tan diversos se hayan unido en la lucha es del gobierno unitario de los Kirchner, al haber aplicado medidas en forma indiscriminada igualando a los pequeños productores con los grandes terratenientes. Medidas que quieren disfrazar de distributivas de la riqueza, cuando en realidad sigue subsidiando a los grandes empresarios amigos: como los De Urquía, Mastellone, automotrices extranjeras, Eurnekián, Eskenazi, Elstain entre otros.
* Estas retenciones centralizan ingresos, sin devolver a las provincias como coparticipación una parte de la riqueza que producen para apoyar efectivamente a las producciones regionales y evitar así la sojización. Esta lucha tuvo el mérito de hacer resurgir la lucha federal.
* Tuvo una gran peso en la aparición en esta lucha de los autodenominados “Autoconvocados”, que ayudaron a su masificación, a pesar de no integrar por ahora entidades gremiales; muchos de los cuales habían votado a Cristina Kichner. Son miles de productores o minirentistas y contratistas pequeños, medianos y algunos grandes, que están muy duros contra el gobierno. Varios de ellos junto a ingenieros agrónomos trabajan para los llamados “pulcitos” de capitales regionales. Diferenciados de los grandes pooles, tipo Grobocopatel, De Urquía o Fondagro que integra Capitanich (gobernador del Chaco).
* Desde el comienzo el PCR levantó un programa diferenciado clave para terciar: partiendo de retrotraer la situación al 10 de Marzo, retenciones segmentadas coparticipables e impuestos progresivos a los pooles y terratenientes. Un millón de chacras que hoy sintetiza medidas antiterratenientes y democráticas. Control del Comercio Exterior con participación obrera y campesina, para redistribuir la riqueza, y que no sigan haciendo negociados los monopolios Cargill, Bunge y Born, De Urquía con los gobiernos de turno; Nueva Ley de Coparticipación en defensa del Federalismo; Ley de Arrendamiento; Precio sostén y en origen. Todo esto se ha puesto a la orden del día con la lucha campesina, así como la nacionalización del petróleo y de los ferrocarriles. Empresa estatal de producción de fertilizantes y agroquímicos para frenar el robo de los monopolios como Monsanto, Cargill, Bayer, Syngenta y Atanor que aumentaron un 200% los precios, rapiñando otra parte de rentabilidad a los pequeños y medianos productores. Porque sin un programa diferenciado, el apoyo “al campo”sin más, lleva a furgonear ese frente heterogéneo que constituyen las cuatro entidades, con varias de las cuales solo hay acuerdos tácticos para golpear juntos y con otra como Federación Agraria acuerdos mayores.
* La inflacionaria política kirchnerista y las medidas confiscatorias afectan a la mayoría del pueblo, pero ningún sector solo podrá abrirle la mano sin la confluencia de las luchas, por eso formamos junto a otras fuerzas la Multisectorial por Entre Ríos, al calor de esta lucha en camino a una alianza obrero-campesina y popular. La clase obrera se va uniendo a esta lucha a partir de sus propias reivindicaciones: por aumento de planes sociales, salarios y jubilaciones, contra el hambre y por trabajo genuino y en blanco. Los estatales, docentes y universitarios por presupuesto, contra el Unitarismo K, que se lleva la riqueza de las provincias.
* Los gobiernos nacional y provincial se han debilitado por la lucha, mandan al parlamento la discusión de la resolución 125. En la provincia sectores de Gualeguaychú y del Túnel no acordaban con la posición de levantar sin mantener las fuerzas en la ruta, ya que no confían en este parlamento y este gobierno que ha quedado al desnudo su verdadera esencia en esta larga y dura lucha. Donde los más chicos y medianos pelean      o desaparecer y en ese camino van entendiendo que la unidad con otros sectores populares es una condición para hacerle abrir la mano al gobierno. Luchamos terciando entre las rupturas y disputas por arriba para avanzar en el camino de una Reforma Agraria, la independencia nacional y las transformaciones sociales y revolucionarias necesarias para el pueblo, por el camino del Argentinazo, que abra paso a una revolución democrático-popular, agraria y antiimperialista.