El miércoles 27 de marzo se realizó una masiva asamblea de los ferroviarios del Sarmiento, que colmaron la capacidad del salón de la Seccional Oeste de la Unión Ferroviaria en Haedo, con alrededor de 800 trabajadores.
El miércoles 27 de marzo se realizó una masiva asamblea de los ferroviarios del Sarmiento, que colmaron la capacidad del salón de la Seccional Oeste de la Unión Ferroviaria en Haedo, con alrededor de 800 trabajadores.
La asamblea fue llamada para discutir paritarias, en el marco que la dirección Verde del Sindicato no ha informado hasta el momento cuál es el pedido que llevan adelante. Ante esto se resolvió pedir un aumento del 30%, y llevar este reclamo a la reunión en el Ministerio de Trabajo el próximo 4 de abril, exigiendo que a esa reunión a la que concurre la dirección del Sindicato se les permita participar a Sobrero y Reynoso como paritarios elegidos por los trabajadores del Sarmiento. Y en el caso de no tener respuestas al reclamo se mandató al Cuerpo de Delegados a convocar a medidas de lucha, en el marco en que se está discutiendo la convocatoria a un paro nacional de la CTA y la CGT.
Junto a esto se pide que se abra el debate de normativas en el marco de las paritarias, para discutir las condiciones de trabajo y una cantidad de problemas que tienen que ver con las categorías, que no se debaten desde hace siete años.
Otro punto que estuvo en discusión fue el pedido de resarcimiento (una especie de indemnización) a los trabajadores por el cambio de empresa de TBA (Cirigliano) a la actual Ugoms (Roggio-Romero). Este reclamo que tiene el antecedente de otros similares ganados por el Sindicato de Camioneros ante los cambios de firmas de las empresas, implicaría un sueldo por año trabajado en la anterior empresa (TBA).
También se planteó el reclamo de las mujeres ferroviarias que piden el cupo femenino en todos los puestos, para que no las limiten a tareas de limpieza o evasión. La masividad y la voluntad de lucha de los obreros ferroviarios demuestran una vez más que no están dispuestos a pagar la crisis ni a dejar que los jerarcas del Sindicato arreglen una vez más a espaldas de los trabajadores.