Se viven tiempos turbulentos en el mundo. Y las potencias imperialistas no quieren perder posiciones, y avanzar en sus dominios. Rusia está empantanada en su invasión a Ucrania, gracias a la heroica lucha del pueblo ucraniano que resiste y no se vence. Estados Unidos y Europa, principalmente a través de la OTAN, meten sus garras en la región.
China también quiere aprovechar el “río revuelto” y avanzar sobre Taiwán, para recuperar el control sobre la isla. El gobierno imperialista chino transmitió durante julio una serie documental en su canal estatal, llamada “Persiguiendo sueños”, donde muestra sus deseos de invasión a la isla. En este contexto, Estados Unidos anunció el mes pasado un acuerdo de ayuda militar a Taiwán por 345 millones de dólares. Este acuerdo representa la primera venta de armas directas de los yanquis a Taiwán.
El vicepresidente de Taiwán, William Lai, visitó Estados Unidos la semana pasada, para afianzar las relaciones con los yanquis. Oficialmente esta visita fue una “parada técnica” en su viaje a Paraguay, aunque el vicepresidente dio discursos durante esta “parada técnica”. Lai es el candidato más fuerte para las elecciones presidenciales que se celebrarán el año próximo. Como respuesta a esta visita, China realizó ejercicios militares en la zona de influencia de Taiwán, con 42 aviones y 8 barcos. El Ejército chino declaró que los ejercicios eran para poner a punto la coordinación entre buques y aeronaves. El objetivo era calificar las capacidades reales de combate y de coordinación de las distintas fuerzas militares chinas.
Horas antes de que se detectaran estos ejercicios militares, el presidente yanqui Joe Biden, el presidente de Corea del Sur y el primer ministro de Japón se reunieron en Estados Unidos para reforzar lazos, profundizando en la cooperación económica y en materia de defensa. Esta alianza comenzó a forjarse con el primer viaje de Biden a Asia el año pasado, donde visitó Tokio y Seúl.
Los tres países resaltaron la importancia de la paz y la estabilidad en la región del estrecho de Taiwán como elemento indispensable de la seguridad y la prosperidad en la comunidad internacional. El gobierno chino publicó en medios oficiales que estos tres países están formando “una estructura de mini OTAN que será destructiva para la seguridad regional, complicando la situación con más conflictos”, y que recurrirá a la Asociación de Naciones de Asia Sudoriental (Asean) para salvaguardar de manera decisiva la paz y la estabilidad regionales. Japón planteó un aumento del 67% de su presupuesto militar para el 2024.
Como parte del acuerdo firmado luego de la reunión, los yanquis, japoneses y surcoreanos también se comprometieron a intensificar el intercambio de información militar relativa a los lanzamientos de misiles, las actividades cibernéticas y el lavado de criptomonedas de Corea del Norte.
Escribe Rodrigo Cruz
Hoy N° 1976 30/08/2023
