Luego de un mes de movilizaciones populares y enfrentamientos con la policía que dejaron más de 400 muertos en la República Popular de Bangladesh, la primera ministra Sheikh Hasina, que gobernaba desde el año 2009, renunció el lunes 5 de agosto y escapó en helicóptero hacia la India.
Bangladesh es un país vecino de la India, la segunda economía de la región y el octavo país más poblado del mundo, con 170 millones de habitantes.
Las multitudinarias movilizaciones (mayoritariamente estudiantiles) avanzaron por las calles de la capital Dhaka, superaron a las fuerzas policiales y tomaron la residencia oficial de la primera ministra.
Luego de la caída del gobierno se produjo la liberación de presos políticos, entre ellos una ex primera ministra que se encontraba con arresto domiciliario y de numerosos líderes estudiantiles.
En un primer momento asumió el poder una junta militar que disolvió el Parlamento, pero el rechazo de los estudiantes y la movilización popular obligaron a la renuncia de esta junta militar, para que el 8 de agosto asumiera la presidencia interina el ex premio Nobel de la Paz y economista Muhammad Yunus, de 84 años, y opositor al gobierno de Hasina.
Las movilizaciones habían comenzado en julio con un reclamo de los estudiantes universitarios para poder ingresar a trabajar en el Estado como empleados públicos, oponiéndose a un sistema de “cuotas” privilegiadas reservadas para familiares de los veteranos de la Guerra de Independencia contra Pakistán de 1971. La propia Sheikh Hasina es hija de un héroe de la independencia de Bangladesh y había acusado a los manifestantes de terroristas.
Un fallo de la Corte Suprema obligó al gobierno de Hasina a ceder ante el reclamo de los estudiantes y dar de baja el sistema de “cuotas”, pero los enfrentamientos continuaron.
Las movilizaciones se hicieron cada vez más plurales y masivas exigiendo justicia por los asesinados y la renuncia de Sheikh Hasina. Los organismos de derechos humanos denuncian más de 600 desapariciones forzadas y cientos de asesinatos políticos desde el año 2009. Damos todo nuestro apoyo a los vientos de lucha que recorren la región y exigimos juicio y castigo por los asesinados.
Escribe Francisco Rossi
hoy N° 2022 14/08/2024
