1. Lo nuevo de este 1° de Mayo
1. Lo nuevo de este 1° de Mayo
El acto central de este 1° de Mayo, día internacional de la clase obrera, mostró el reagrupamiento de fuerzas que se ha producido en el movimiento obrero, en sus tres sectores: ocupados, desocupados y jubilados. Acuerdo que, con las particularidades de cada lugar, también se ha dado en numerosas provincias y localidades.
El acuerdo unitario de la CTA, con la CCC y el MST, crea la base de un centro de coordinación de iniciativas que proyecta un programa de lucha hacia el conjunto de los trabajadores y sus organizaciones, como se expresó en la propuesta de acción conjunta a Moyano y la CGT. En esa dirección es un hecho fundamental la decisión de la CTA de marchar a un paro nacional activo el 8 de junio.
El triunfo en la CTA de la lista encabezada por Pablo Micheli, con Darío Perillo -de la CCC- en la Secretaría de Organización; el crecimiento de esa central no sólo en los estatales sino también en gremios y empresas privadas; y la línea unitaria de esa central de lucha contra la política K de descargar la crisis sobre los trabajadores y el pueblo, también crea condiciones para que una parte de la clase obrera se vaya colocando en el centro de acuerdos para la lucha democrática, como se vio el 24 de marzo, en la convocatoria contra la ley antiterrorista, en el repudio a la represión a Famatina, etc. Y en acuerdos para la lucha nacional por Malvinas el 2 de Abril, y ahora en la pelea por una YPF 100% estatal.
Estos cambios abren una perspectiva nueva, de gran importancia tanto para los trabajadores como para que la clase obrera se vaya ganando el eje de un centro coordinador para la lucha popular, patriótica, democrática y antiimperialista.
2. El acto en Velez
El acto del kirchnerismo en Vélez se convirtió en parte del operativo con que el gobierno retomó la iniciativa política a partir de su acción sobre YPF. Iniciativa que había ido perdiendo por una suma de hechos: ajuste con “sintonía fina”, provocación a los docentes, masacre de Once, represión a Famatina, falta de respuesta a los damnificados por la tormenta en Buenos Aires, liberación de precios provocando un salto en la inflación, y el crecimiento de las luchas obreras y populares.
La proyección política de Máximo Kirchner y de La Cámpora (centros de atención de TV oficial en el acto), muestran que el gobierno K ya trabaja para las elecciones del 2013, a las que considera claves para la continuidad de su proyecto: sólo un triunfo electoral arrollador el 2013 le aseguraría los dos tercios de las dos Cámaras del Congreso para aprobar la convocatoria a una Asamblea Constituyente, que legalice un tercer mandato de Cristina K (como presidenta o primera ministra). Por eso tratan de instalar la “necesidad” de una reforma constitucional.
Como se ve, el kirchnerismo se prepara para una batalla política clave. Esto reafirma la importancia de garantizar la personería del PTP, nacionalmente y en cada provincia, para estar en condiciones de jugar en esa batalla, incidiendo en el reagrupamiento de fuerzas y garantizando las condiciones para actuar, cualquiera sea el escenario político, con lo que más convenga a la clase obrera y el pueblo.
Por otra parte, la compra por Cristóbal López del multimedios de Hadad (canal C5N, radio 10 y 4 FM), es parte de los preparativos K para esa batalla política. Cristóbal López es un viejo conocido del kirchnerismo. Néstor Kirchner llegó a la intendencia de Río Gallegos y a la gobernación de Santa Cruz con el apoyo de Diego Ibáñez (a través del cuñado de Néstor, “Bombón” Mercado). Ibáñez dirigía el gremio petrolero, Mercado lo representaba en Santa Cruz, y Cristóbal López “lavaba” la “plata negra” de Ibáñez.
Con una oposición (dentro del sistema) muy golpeada por las elecciones del año pasado, el “cristinismo” aprovecha para ganar posiciones, lo que agranda las grietas con gobernadores e intendentes del PJ de los que desconfía.
3.Crisis e inflación
También se agrandan las grietas por la presión del gobierno para garantizarse un aparato sindical dócil frente al avance de la crisis y la inflación. La UTA firmó respetando “el techo” salarial de Cristina K, y en los mecánicos se dice que ya acordó el Smata. Caló (de la UOM), candidato K a la secretaría general de la CGT que mandó “su gente” al acto de Vélez, fue enfrentado por varias seccionales que rechazaron firmar por “el techo”.
El gobierno, para tratar de imponer a Caló al frente de la CGT, tiene que pagar el costo político de aliarse con lo peor del sindicalismo: “los gordos” y demás colaboracionistas. Pero todos reclaman, en privado, puntos que pide Moyano: $13.000 millones que el gobierno roba a las obras sociales, aumento del mínimo no imponible, etc.
El gobierno hace avanzar los juicios contra Moyano. Este, en un acto de los camioneros calificó de “traición a los trabajadores” la quita de conquistas: techo salarial en paritarias, impuesto al salario, el robo del gobierno a las obras sociales, etc. Moyano citó a Eva Perón afirmando que “traicionar a los trabajadores es traicionar a la patria”.
Un ejemplo del colaboracionismo sindical K es Peralta, el gobernador de Santa Cruz que pasó de dirigente gremial a represor de huelgas: amenazó a una masiva asamblea petrolera por decidir un paro en YPF si sigue intervenido su sindicato, y envió decenas de gendarmes a los yacimientos.
Abajo crece la combatividad: petroleros de Santa Cruz, Chubut y Mendoza, marítimos de todo el país, estatales y docentes de Santa Cruz, y estatales de La Pampa y Córdoba, docentes y estudiantes universitarios en Entre Ríos, médicos residentes en Buenos Aires, docentes de la Capital Federal, la FAA que después del tractorazo en Entre Ríos marcha a otro en el sur de Santa Fe, la nueva y masiva concentración en el puente de Gualeguaychú, sigue la lucha en Tinogasta y Famatina, etc.
4. Un paso adelante, dos pasos atrás
El Senado aprobó el proyecto de ley sobre YPF enviado por el gobierno K, y esta semana se dispone a hacer lo mismo la Cámara de Diputados.
Después del paso positivo de sacarle el control de YPF al monopolio imperialista español Repsol, la ley K que terminará de aprobar el Congreso abre las puertas para dar dos pasos atrás: consolida a YPF como una sociedad anónima que operará sin ningún control –las provincias no tendrán poder de decisión– y crea el marco legal para la asociación con monopolios imperialistas.
Un anticipo de que marchaban en esa dirección la dio la designación de la intervención: De Vido y su equipo fueron los mismos que durante estos años, junto con Repsol y Eskenazi, vaciaron a YPF. La otra prueba la dan las reuniones del gobierno K con cuánto monopolio imperialista ronda como buitre al yacimiento de Vaca Muerta.
A la hora de la verdad, los Kirchner, como burguesía intermediaria del imperialismo, priorizan “la caja” y negocian su “asociación estratégica” con los grandes monopolios. Vaca Muerta podría muy bien ser explotado por una YPF estatal, con un plan para resolver el autoabastecimiento nacional. Pero lo que muestra la ley es que el gobierno busca dólares y negocios. Las petroleras imperialistas cobran caro: piden contratos seguros por 50 años, y que se les pague el precio internacional del petróleo, hoy a 104 dólares. No hay salida a la crisis energética por este camino, hay negocios y más saqueo de los recursos nacionales.
Más que nunca vamos a luchar por una YPF 100% estatal, sin indemnización a Repsol ni a Eskenazi, con investigación y cárcel para los vaciadores, control de sus trabajadores y la población de la zona, estacioneros y usuarios. Abriendo el camino para esa misma solución a todo el ciclo del petróleo, el gas y la energía.