Una vez más queda al desnudo la esencia de clase del gobierno de CABA. Las personas mayores no somos su preocupación. Citan a los mayores de 80 años para vacunarse. Y los castigan con interminables colas de parado y bajo el sol. Las escenas que hemos visto, mujeres y hombres, muchos de ellos en sillas de ruedas o andadores, sin atención ni información de semejante desmadre, debiendo esperar interminables horas hasta ser vacunados. Y a pesar de que CABA retiene un stock de vacunas sin aplicar ¡Aún no se ha vacunado ni al 50% de ese rango de edad!
En CABA esta “indolencia” castigó también a la mayoría de los geriátricos. En los hechos muestran la hilacha privatizando la vacunación. Según la propia página del gobierno de la Ciudad más del 18% de las vacunas fueron aplicadas por las prepagas y obras sociales amigas. Un privilegio inadmisible por el cual algunos se benefician a costa de los demás. El ministro de Salud Quirós desoyó los ofrecimientos del propio PAMI de aportar su capacidad en pos de agilizar la vacunación de los mayores. Cada día que pasa un mayor se puede contagiar poniendo su vida en peligro.
Una oposición destructiva que ya hizo campaña contra la cuarentena y contra las vacunas sigue poniendo palos en la rueda. Patricia Bullrich tiene la osadía de preguntarse ¿por qué el que tiene plata no puede comprar su propia vacuna y vacunarse? Estos personeros no conocen la palabra solidaridad, no se enteró de los siniestros negociados que los monopolios farmacéuticos y las grandes potencias están realizando alrededor de las vacunas y su distribución. Algo similar propugna Juntos por el Cambio con su proyecto de Ley para autorizar “a todo el mundo” (a cada persona, cada gobernación, cada intendencia) a comprar sus vacunas.
Quienes repudiamos las vacunaciones VIP señalamos la hipocresía de los que alientan la privatización de la vacunación VIP. Mientras tanto se conduelen de quienes deben pagar el Impuesto a las grandes fortunas, aunque ahora sea en 6 cómodas cuotas.
Los adultos mayores no aceptamos más maltratos. Exigimos lo que nos corresponde. No a la salud como negocio. Sí a la salud para las personas. El gobierno nacional gestiona trabajosamente la compra de vacunas. Los incumplimientos por parte de las farmacéuticas son moneda corriente. Así como los “desvíos” de partidas e insumos por parte del matonaje institucional de los gobiernos centrales. No cabe entonces la baja politiquería de querer sacar ventajas de las dificultades comunes a la mayoría de los países. Larreta y Quirós no deben sentarse sobre las vacunas y especular. Los mayores no lo vamos a tolerar y nos estamos organizando en forma conjunta con todos los centros de jubilados de CABA y organizaciones de personas mayores en nuestra ciudad.
¡Que completen la vacunación de los mayores de 80! ¡Que inicien ya la inscripción de los mayores de 70 años!
Corresponsal
Hoy N° 1856 17/03/2021