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26 de febrero de 2014

El miércoles 19 unos 800 productores del este de la provincia realizaron un caravanazo a la Casa de Gobierno, muchos de ellos autoconvocados, reclamando por la terrible situación que atraviesan. 

Camionetazo de productores

Reclaman por el precio del vino en Mendoza

La movilización, principalmente compuesta por pequeños y medianos viñateros, reclamó por el precio del vino, la presión impositiva del gobierno y los intentos de modificar la ley de aguas en favor de los grupos más concentrados.

La movilización, principalmente compuesta por pequeños y medianos viñateros, reclamó por el precio del vino, la presión impositiva del gobierno y los intentos de modificar la ley de aguas en favor de los grupos más concentrados.
La situación de los pequeños y medianos productores es angustiante, con un precio del vino que no ha sufrido importantes variaciones desde el 2010 pero con un escalonado e incesante aumento de los insumos y costos, el agua en este periodo aumentó 500%, los venenos y fertilizantes 800%, los combustibles 600%, la AFIP 400%. Así comentaba un productor “estamos todos endeudados e hipotecados, nuestras fincas están para el remate”. Otro decía “En 2010 el litro de vino escurrido costaba $1,34, hoy $2; había que pagar en la AFIP $165, hoy $735, mientras que un herbicida pasó de $250 a $1.970”.
La policía intentó detener la caravana e impedir que los 400 vehículos llegaran a Casa de Gobierno y retuvo a una parte de la misma a unas cuadras de la gobernación. La combativa movilización, con gran presencia de pequeños productores y contratistas de viña, se fue abriendo paso y exigió respuestas del gobernador. El subsecretario de Producción, Cristian Correa, intentó justificar lo injustificable y ante el grito de los productores, que comenzaron a arrojarle vino y agua, tuvo que escaparse corriendo con custodia policial.
 
Vitivinicultura en crisis
Con las políticas del gobierno en la última década ha crecido en el campo mendocino la concentración de la tierra, la extranjerización y la desaparición de los pequeños y medianos productores. Así según datos del último Censo Agropecuario las hectáreas cultivadas pasaron de 6 millones a casi 9 millones pero desaparecieron el 30% de las explotaciones agropecuarias que existían.
La reconversión vitivinícola impuso el modelo de exportación de vinos de alta gama y se instalaron en la provincia cientos de bodegas extranjeras comprando que compraron por monedas tierras claves. Las exportaciones que eran insignificantes alcanzaron el 30% de la producción y con el viento de cola de la economía y un dólar “competitivo” obtuvieron gigantescas ganancias. Sin embargo luego de la crisis del 2009 y el leve repunte en el 2010-2011, la nueva oleada de la crisis volvió a golpear haciendo caer las exportaciones (este año 17%), reduciendo el precio internacional del vino y aumentando por otra parte, los insumos la mayoría en dólares. 
Las grandes bodegas extranjeras volcaron parte de su producción al mercado interno sobrecargándolo. En contrapartida los pequeños y medianos viñateros vinculados al mercado interno que no obtuvieron las ganancias de la exportación, vieron congelados sus precios de venta y aumentar sus costos. 
Como se dijo en el acto, mientras el gobierno nacional y provincial hablan de combatir a las corporaciones, en los hechos negocian con ellas en perjuicio de la pequeña producción. Así por ejemplo en medio de la crisis, en la provincia son cuatro grandes bodegas las que imponen el precio del vino (Baggio, Catena, Peñaflor, Fecovita) todas representadas en la Coviar (Corporación Vitivinícola Arg.), organismo que nuclea a las grandes bodegas y al gobierno.
Mientras un litro de vino se compra en el supermercado a $40, al productor se le paga sólo 2,50, el Estado se queda con 7,50, la bodega con 20 y el supermercado con 10. Nos decía un productor “La movilización es porque por una botella de 40 pesos en góndola, malbec, el productor gana $2,50 pagadero de nueve a diez meses, el precio es el mismo o menos del año 2010, ¿quién puede vivir con el mismo sueldo del 2010?”
 
En crisis toda la producción agraria
No sólo la producción vitivinícola está en ruinas, la producción hortícola y frutícola también atraviesan un momento muy complicado, entre otros factores por el impacto de las heladas de septiembre del año pasado que afectó el 30% de la producción (haciendo perder unos 20 mil puestos de trabajo entre fincas, galpones y agroindustrias) y la desaceleración de Brasil y la depresión de su moneda, que es el principal mercado exportador de Mendoza y alcanza hasta el 70% de algunos productos como el ajo.
Esta situación, junto a políticas que golpean a la pequeña producción, han hecho caer la producción y el precio de la mayoría de los productos. Nos comentaba un productor “el kilo de ajo que el año pasado se pagó a $2,30, en la última temporada se ofreció a $0,80”.
 
Apepro presente
La Asociación de Pequeños Productores nucleada en la FNC estuvo presente en la protesta. Malvina Luera, presidenta de la Asociación, habló en el acto y comentó la difícil situación de los campesinos pobres sin tierra que tienen que trabajar en la chacra y de cualquier cosa para sobrevivir, planteó que toda la producción agrícola de Mendoza está en crisis y que cada vez son más los pequeños productores que van a la quiebra mientras unos grandes se llenan los bolsillos y cuestionó al gobierno y sus políticas de mentira que buscan hundir a los pobres. Malvina sostuvo en el acto la necesidad de unir a todos los pequeños y medianos productores de la provincia en un gran paro con cortes de ruta para lograr un precio para la producción y evitar la quiebra de los pequeños. Su discurso fue muy aplaudido y sumó a las presencias de otras asociaciones agrarias del Valle de Uco y el Sur como Federación Agraria.
 
Vamos por más
El viernes 21 se realizó una asamblea en el este de la provincia que reunió a mil productores, la asamblea muy combativa con críticas al gobierno nacional y provincial, resolvió un nuevo caravanazo para el jueves 27 sí no hay respuestas del gobierno y la posibilidad de continuar el plan de lucha con una jornada de piquetes y llevar el reclamo al carrusel vendimial.  
La protesta de los productores se realiza en medio del debate de paritarias, con la posibilidad de un paro multisectorial para el 5 de marzo, de trabajadores estatales, judiciales y de la educación, lo que implica la necesidad de articular los distintos torrentes de lucha para evitar que el ajuste lo siga pagando el pueblo.