En la última edición de su periódico mensual, el Partido Paraguay Pyahurä, PPP, realiza un análisis de las medidas del gobierno de Horacio Cartes, que éste llama “nuevo rumbo”, cuando en realidad se trata del viejo “modelo de producción agroexportadora, latifundista, que profundiza la inequidad existente y condena al atraso y la dependencia de nuestro país”, como afirma también la Federación Nacional Campesina (FNC).
En la última edición de su periódico mensual, el Partido Paraguay Pyahurä, PPP, realiza un análisis de las medidas del gobierno de Horacio Cartes, que éste llama “nuevo rumbo”, cuando en realidad se trata del viejo “modelo de producción agroexportadora, latifundista, que profundiza la inequidad existente y condena al atraso y la dependencia de nuestro país”, como afirma también la Federación Nacional Campesina (FNC).
En una nota titulada “Cartes y su política: el presidente de los explotadores”, se señala que a cuatro meses de su gestión, “las medidas tomadas, tanto políticas como económicas, benefician de manera directa a los sectores agroexportadores, empresarios inescrupulosos, latifundistas, todos enemigos del desarrollo nacional”.
Entre las medidas políticas se destaca “la modificación de la Ley de Defensa Nacional que permite a Cartes el uso de las fuerzas armadas sin más trámites que su decisión individual (…). Aparece nuevamente el ‘enemigo interno’ donde las ocupaciones de tierra o de instituciones, los cierres de rutas, la lucha contra el modelo agroexportador, las huelgas u otras medidas de lucha del pueblo en su búsqueda permanente por la transformación son sospechadas de terrorismo o simplemente mal vistas, calificadas por la derecha, judicializadas e intervenidas por policías y militares”.
El análisis sigue con otras medidas económicas y sociales antinacionales y antipopulares, como “la llamada Ley de Alianza Público Privada (APP) que significa el saqueo y la entrega de empresas productoras de bienes y servicios y recursos naturales por 40 años a empresas privadas y capitales principalmente extranjeros”. U otras como el “aumento de la tarifa del pasaje”, “la suba del precio del gasoil y la correspondiente suba de la canasta básica [que] son sólo muestras de las acciones del gobierno dirigidas al pueblo.”
También se señala que “el modelo productivo agroexportador constituye uno de los pilares de la política económica oligárquica ligada a los imperialismos, implementada en nuestro país en donde la mayor concentración de la tierra, la expulsión de paraguayos y paraguayas de sus comunidades, el envenenamiento masivo producido por la fumigación de sojales, la aniquilación de los cultivos de autoconsumo constituyen consecuencias para nuestro pueblo sentidas principalmente por el campesinado que viene organizándose, luchando y resistiendo bajo la dirección de la FNC, lo que trajo consigo campesinos baleados, encarcelados, imputaciones por doquier, presencia de civiles armados, disparos de intimidación realizados por los propios sojeros. Y es que la agroexportación es el modelo que impera en nuestro país y seguirán intentando la expansión de sus cultivos a costa de lo que sea”.
Resistencia del pueblo
“A pesar de los intentos de contener las movilizaciones, el pueblo resiste y se levanta contra estas medidas antinacionales y antipopulares que implementan Cartes y sus cómplices. Tanto en la ciudad como en el campo, las movilizaciones populares se intensifican haciendo resonar consignas contra la APP y a favor de la huelga general, contra la suba del pasaje, contra el modelo de producción agroexportador, contra los hechos de corrupción registrados en la administración pública.
“En este escenario, el PPP fue uno de los protagonistas principales discutiendo en los barrios y comunidades las consecuencias nefastas que traerán estas políticas del gobierno y la necesidad de la organización y lucha del pueblo.
Nuestro partido fue uno de los propulsores y protagonistas activos de la presión popular ante estas injusticias y no en vano ha caracterizado los primeros 100 días de gobierno de Cartes como 100 días de militarización, entrega, represión e imputación”.