El titular de la Comisión de la Pastoral Social, Jorge Casaretto recibió a una delegación de la CCC, encabezada por su coordinador nacional de Desocupados Juan Carlos Alderete y el coordinador del MIJP, Mariano Sánchez.
En la reunión, los compañeros intercambiaron con el obispo opiniones acerca de la situación política, cómo se ha agravado la situación de pobreza e indigencia en nuestro país, la política de este gobierno en relación a lo social.
Tanto el titular de la Pastoral Social como los compañeros desocupados coincidieron en que es muy complejo que el gobierno ponga en práctica el programa de ayuda a los hijos de desocupados, porque no se sabe cómo se van a resolver las complicaciones, por ejemplo con los niños que todavía no tienen documentos, los nacidos en Argentina hijos de extranjeros. “El tipo de operativo que van a hacer es muy complejo, es algo que se puede prestar para mayor clientelismo, y en eso, la Iglesia coincide que es muy difícil de resolver si no es mediante una ley que asegure el financiamiento de los programas sociales”, recalcó Alderete.
Con relación a los 100 mil puestos en cooperativas anunciados por la presidenta, en palabras del coordinador de los desocupados, “se coincidió en que en el Conurbano las cooperativas trabajan en forma selectiva, punteril”; y que ante la situación que se agrava, Casaretto les planteó su preocupación por la droga, que en algunos barrios populares se está “favelizando” porque hasta hay “cocina de drogas”.
Luego de describir la tarea de la Corriente a nivel nacional, “le explicamos por qué la Corriente Clasista y Combativa, por qué clasista y por qué combativa”.
Mariano Sánchez contó que plantearon en la reunión “la necesidad de aumento a los jubilados, que no se use el dinero de la Anses para estos planes, sino que se saque de la plata con la que se paga la deuda externa ilegítima y usuraria, que sea con un impuesto a las transacciones financieras, al juego, a la minería”.
02 de octubre de 2010
