Afiliamos al PTP en Comodoro, Puerto Madryn y en Rawson. En cuatro salidas, se hicieron 45 afiliaciones, con muy buena recepción de los trabajadores, amas de casa, jóvenes, jubilados y pensionados; recogimos muchísima bronca con el gobierno kirchnerista por los precios que no paran de subir todos los días, los impuestos, los servicios, etc.
Afiliamos al PTP en Comodoro, Puerto Madryn y en Rawson. En cuatro salidas, se hicieron 45 afiliaciones, con muy buena recepción de los trabajadores, amas de casa, jóvenes, jubilados y pensionados; recogimos muchísima bronca con el gobierno kirchnerista por los precios que no paran de subir todos los días, los impuestos, los servicios, etc.
En Madryn, los trabajadores metalúrgicos de Aluar con mucha bronca por los descuentos del impuesto a las ganancias, la contaminación en la planta con los fluoruros y las muertes a los dos o tres años por cáncer de los que se jubilan. Otros, de la misma planta en contratistas por la Uocra, como INFA, EISI, etc. cobran menos y con mucho más riesgo de contaminación de la alúmina porque están contratados, mientras Mateo Suarez de la Uocra mira para otro lado.
Los trabajadores de la alimentación en las plantas pesqueras protestan por los cierres de las empresas. Está la lucha de Alpesca por las fuentes de trabajo, con marchas, cortes de ruta y asambleas que pasan por arriba a su sindicato de la alimentación, y los gigantescos negociados de la droga, en la pesquera Poseidón del Cura Segundo (el mismo dueño de Alpesca), amparado por los gobiernos nacional y provincial, con la complicidad de Luis Núñez del STIA.
En los trabajadores hay mucha bronca con los dirigentes sindicales como Caló (UOM) y el “Caballo” Suarez (SOMU) que transan con el gobierno K, y no mueven un dedo contra el impuesto a las ganancias y por el costo de vida y las paritarias.
Un marinero de una pesquera española nos contaba que en cinco meses embarcado les descontaron 55.000 pesos de impuesto a las ganancias, mientras la empresa que tiene 11 barcos, exporta langostino en euros.
En Comodoro, afiliamos en un barrio petrolero a muchas mujeres y trabajadores, hartos de esta inflación, el impuesto a las ganancias y contra las 12 de horas de trabajo en los equipos de perforación, y por las 8 horas como cuando estaba la YPF estatal. La semana pasada se hizo un plan de afiliación provincial al PTP, con objetivos semanales y un plan del PCR, para ponernos a la altura de las circunstancias ante los grandes desafíos que tenemos por delante.
