El 26 de septiembre se cumplieron cinco años de los hechos de la noche del 26 de septiembre y la madrugada del 27 de septiembre del 2014, cuando fueron baleados, detenidos, muertos y secuestrados decenas de alumnos de la Escuela Normal de Ayotzinapa, que asistían a la Ciudad de México a las manifestaciones conmemorativas de la masacre de Tlatelolco (2 de octubre).
Cinco años, 43 desaparecidos, 3 asesinados. El Estado mexicano, durante la presidencia de Enrique Peña Nieto, fue el responsable del descomunal operativo represivo que montaron la Policía de Iguala, el Ejército, la Policía Federal, disparando contra estudiantes desarmados.
Esa noche fueron secuestrados 43 estudiantes, además de los heridos y torturados. Hasta el día de hoy no hay certezas sobre qué pasó con los 43 de Ayotzinapa, aunque lo más probable es que hayan sido entregados a un grupo narco vinculado al gobierno, que debían “dar un escarmiento”.
Los familiares de los 43 de Ayotzinapa vienen librando desde el primer día una dura lucha por conocer la verdad, y con la consigna del pueblo argentino y las Madres de Plaza de Mayo durante la dictadura, siguen reclamando “vivos los llevaron, vivos los queremos”.
Con esa firmeza y el acompañamiento de los compañeros de los estudiantes de la Normal, y de un conjunto de organizaciones sociales, políticas y personalidades, los padres fueron desmontando una a una las mentiras con que el Estado intentó cubrir el crimen.
Las denuncias tuvieron repercusión internacional, por eso en nuestro país también se llevaron a cabo actos reclamando verdad, justicia y castigo a los culpables de los hechos de Ayotzinapa.
Hoy N° 1785 02/10/2019